17/11 – 09:40 – Scioli acusa a Macri de querer imponer un ajuste, pero el presupuesto de 2016 ya reduce transferencias al sector energético y a Aerolíneas Argentinas.
Por: Laura Serra
“Con (Mauricio) Macri se viene el aumento de tarifas; es inevitable, porque prepara una quita de subsidios. Conmigo hay garantía de que los subsidios seguirán, eso significa que no van a aumentar la luz, el gas ni el transporte”, repite Daniel Scioli a manera de latiguillo de campaña. Tal vez sea cierto lo que plantea el candidato presidencial del oficialismo, pero hay un pequeño detalle que omite: el propio gobierno que él representa ya dispuso, para 2016, un fuerte recorte en los subsidios, sobre todo los que se destinan a la energía eléctrica y a Aerolíneas Argentinas.
En efecto, la ley de presupuesto 2016 que aprobó la mayoría oficialista en el Congreso asignará alrededor de 179.000 millones de pesos para atender la totalidad de los subsidios que reparte el Estado entre los sectores económicos privados y públicos, un 4,8 por ciento menos que las asignaciones vigentes para este año.
Así lo señala un reciente informe de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP), que advierte sobre un fuerte recorte de las asignaciones al sector energético: el año próximo se destinarán 116.000 millones de pesos, 21.500 millones menos respecto de la partida vigente a septiembre de este año. Esto significa un recorte del 15,7%, porcentaje que seguramente se incrementará si, como se prevé, el Gobierno refuerza de aquí a fin de año la partida para estos subsidios.
La caída en las transferencias corrientes al sector energético se explica por la baja presupuestaria en distintas áreas. Por ejemplo, en el fondo fiduciario que financia el programa Hogares con Garrafa, destinado a la población de menores recursos que no tiene gas natural, recibirá 2340 millones el año próximo, un 32% menos que este año.
También se recortarán las transferencias a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa), encargada de afrontar la compra de combustible para las centrales térmicas y los pagos a agentes acreedores del mercado eléctrico, y a Enarsa, que recibirá un 27% menos que este año. Esta compañía es la encargada de solventar la diferencia entre el precio de importación del combustible y el precio de venta de éste al mercado interno.
A diferencia de lo que sucederá con el sector energético, el transporte verá incrementado en 2016 su nivel de transferencias corrientes. Sumarán alrededor de 48.670 millones, un 24% más que lo previsto para el corriente año, indica ASAP. Este aumento está motorizado por los subsidios al transporte automotor (unos 28.700 millones, un 30% más que la partida vigente al 31 de agosto de este año) y al transporte ferroviario (16.000 millones, un 24% superior).
Sin embargo, el transporte aerocomercial sufrirá una fuerte baja respecto de este año. En efecto, para 2016 el Gobierno destinó 3881 millones para financiar Aerolíneas Argentinas, cuando en lo que va de este mes esta empresa aérea ya lleva gastados 4673 millones. La baja será, entonces, del 20%.
Replanteo de subsidios
La discusión por el futuro de los subsidios es uno de los ejes medulares de la campaña electoral de Scioli y de Mauricio Macri. Si bien el candidato oficialista azuza a su rival y busca emparentarlo con una política neoliberal de ajuste de salarios y suba de tarifas, lo cierto es que tanto su equipo económico como el de Macri coinciden en que es necesario revisar los subsidios y aplicar una política segmentada.
“La situación más evidente es la de la electricidad. Hay 12 millones de facturas mensuales que se pagan a un promedio de 35 pesos”, enfatiza uno de los referentes económicos del equipo de Scioli, Miguel Bein.
“La mitad de lo que se gasta hoy en subsidios para no aumentar las tarifas va al bolsillo del 30% más rico de la población”, sostiene Alfonso Prat-Gay, uno de los voceros en materia económica de Macri.
Este tema se planteó también durante la discusión de la ley de presupuesto en el Congreso. El diputado Julio Cobos (UCR) advirtió sobre la fuerte inequidad que existe en el reparto de subsidios entre el área metropolitana (Capital Federal y Gran Buenos Aires) y las provincias.
“Tomemos, por ejemplo, el precio del boleto, que es de 6,5 pesos en Córdoba; 4, en Mendoza; 5,5, en Jujuy; 4,9, en Neuquén, y 1,8, en la primera sección que corresponde al área metropolitana. El 85 por ciento de los subsidios quedan en la zona metropolitana”, se quejó el mendocino.
Cobos agregó: “¿Saben cuánto paga de gas un departamento de tres ambientes en pleno Barrio Norte? Apenas 32 pesos por bimestre, y 28 pesos de energía eléctrica. Lo mismo ocurre en Puerto Madero. En cambio, la garrafa social cuesta casi 100 pesos. ¿Es justa esta forma de distribución de los subsidios o hay que replantearla?”.
Las cifras del presupuesto que viene
-4,8%
Baja global de subsidios
El presupuesto 2016 dispone 179.000 millones de pesos para atender la totalidad de los subsidios que reparte el Estado entre los sectores económicos privados y públicos, un 4,8% por ciento menos que las asignaciones vigentes
-15,7%
Baja en sector energético
El año próximo se destinarán $ 116.000 millones a subsidiar a este sector, $ 21.500 millones menos respecto de la partida al 31 de agosto de este año
-20%
Aerolíneas Argentinas
Para 2016 se previó una partida de $ 3881 millones. Este año ya lleva gastados $ 4673 millones
+24%
Sector transporte
Significa una partida global de $ 48.670 millones. Los más beneficiados, el automotor y el ferroviario. (La Nación)
Jajajaj, manga de inútiles, se piensan que la fiesta del derroche y no trabajo es eterna, kakeros a vivir de lo que cada uno produce, como me voy a cagar de risa a partir del 10-12-15, porque gane quien gane, los militontos a trabajar y si no juera, juera!!!!
Hay muchos que no ganan ni para el aire que respiran!!!