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Piden que no cierren dos casos de corrupción contra Ricardo Jaime

Ricardo Jaime ex Secretario de Transporte de la Nación - Foto: Clarínjai
14/12 – 10:30 – El fiscal Velasco apeló el fallo de la Sala I de la Cámara Federal que había sobreseído al ex funcionario kirchnerista por la utilización de autos oficiales fuera del ámbito del Estado.

Por: Omar Lavieri
Tal vez los dos casos de corrupción -mínimos comparados con otros desfalcos cometidos en la administración pública- por los que está imputado Ricardo Jaime sirvan para mostrar cómo tarda la justicia federal en tramitar causas con cierto contenido político.

A fines de 2011 y principio de 2012 comenzaron a investigarse dos casos de corrupción en los que Jaime fue imputado por el fiscal Carlos Rívolo por el delito de peculado de uso. La cosa es bastante simple: Jaime usaba como propios dos autos que habían sido cedidos al Estado con fines diferentes al de ser utilizados por el secretario de Transporte de Néstor y Cristina Kirchner. Uno de los autos debió ser utilizado para controlar cómo se iba realizando una obra pública del área de Jaime. Y el otro se debió haber usado para controlar una ruta con peaje. Por el uso del segundo auto está imputado también Claudio Uberti quien, conocido como “El Señor de los Peajes” estaba al frente del Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI). El segundo de los autos ingresó al Estado a través de OCCOVI y terminó en el garaje particular de Jaime. Cada uno de los autos fue devuelto.

Un caso simple que estuvo en manos de dos jueces federales. Norberto Oyarbide manejó los expedientes desde el inicio hasta octubre de 2012 cuando Sebastián Casanello se hizo cargo del juzgado que subrogaba su colega. Hasta entonces Oyarbide había citado a indagatoria a Jaime y luego el caso quedó en manos de Casanello. Rívolo pidió el procesamiento de ambos y Casanello determinó que el caso había prescripto porque enfocó la investigación como una de malversación de caudales públicos. Ese delito tiene una pena menor y como tanto Jaime como Uberti dejaron de ser funcionarios hace tiempo, según el enfoque de Casanello, el caso prescribió. Rívolo apeló y su apelación fue sostenida por el fiscal de Cámara Germán Moldes quien actualmente está de licencia. El expediente pasó por la Sala I de la Cámara Federal que respaldó lo dicho por Casanello y dictó -con la firma de los camaristas Eduardo Freiler y Jorge Luis Ballestero- el sobreseimiento de Jaime y Uberti, quien dejó de ser funcionario luego del escándalo de “La valija de Antonini Wilson”.

El posible procesamiento en estos casos no cambia nada en la complicada situación judicial de Jaime: condenado por coimero, con unos quince casos de corrupción abiertos y a la espera de sentencia en el juicio por la Tragedia de Once. Sin embargo de concretarse, sería el primer procesamiento para Uberti en el fuero federal.

Ante esa resolución de la Cámara Federal el fiscal que reemplaza Moldes, Diego Velasco, presentó un recurso para que la Cámara de Casación revise lo decidido en ambos expedientes. Velasco, puesto allí por la Procuradora Alejandra Gils Carbó, mantuvo los argumentos tanto de Rívolo como de Moldes y sostuvo que los dos ex funcionarios kirchneristas deben ser procesados por el delito de peculado de uso.

Para cuando los casos-relativamente simples de investigar- sean tratados por una sala de la Cámara de Casación ya habrán pasado muchos años (cinco y cuatro respectivamente) desde el inicio de los expedientes. Una muestra más de que cuando la justicia es lenta no es justicia. (Infobae)

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