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Crimen de lesa humanidad

Medicamentos truchos
15/09 – 10:00 – En cualquier país del mundo que se descubriera un crimen como el de los medicamentos adulterados, el hecho se transformaría en un escándalo que implicaría consecuencias políticas importantes. Aquí no. Todo indica que la investigación llegará a un punto donde todo se diluirá, como la AMIA, como la embajada de Israel (por nombrar otros grandes crímenes). Las entidades de DDHH pareciera que no consideran este atentado contra la sociedad argentina como merecedor de su repudio y preocupación. ¿Será por la relación política de los culpables con el propio poder?

Los crímenes fabulosos cometidos con remedios adulterados en contra de la población por parte de funcionarios, empresarios y sindicalistas de nuestro país deben ser considerados como crimen de lesa humanidad cuyo enunciado expresa “Se denomina crimen contra la humanidad, según lo establecido por el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, a las conductas tipificadas como asesinato, exterminio, deportación o desplazamiento forzoso, encarcelación, tortura, violación, prostitución forzada, esterilización forzada, persecución por motivos políticos, religiosos, ideológicos, raciales, étnicos u otros definidos expresamente, desaparición forzada o cualesquiera actos inhumanos que causen graves sufrimientos o atenten contra la salud mental o física de quien los sufre, siempre que dichas conductas se cometan como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque”.

En el último punto el enunciado especifica “Otros actos inhumanos” de carácter similar que causen intencionadamente grandes sufrimientos o atenten contra la integridad física o la salud mental o física: actos inhumanos de gravedad similar a otros crímenes contra la humanidad”.

En principio Juan José Zanola y su mujer, Paula Aballay como administradores de la obra social bancaria, Néstor Lorenzo, José Luis Lingeri, Hugo Moyano, Ginéz González García, Héctor Capaccioli, Claudio Zin, Alberto Costa, subsecretario de Control Sanitario, entre otros muchos tendrían que ser acusados por crímenes de lesa humanidad y la Justicia debiera caerles con todo el peso de la ley.

No ha existido en el país, fuera de la dictadura, un acto de tanta criminalidad como la que día a día se descubre y que involucra a nombres conocidos, quienes históricamente han vivido vinculados a la corrupción estatal.

El Juez Oyarbide abrió la Caja de Pandora y pensamos que será muy difícil que alguien pueda cerrarla, pues aquí no se trata de un acto de corrupción económica ni de enriquecimiento ilícito solamente, se trata de un crimen contra la población y en consecuencia debiera existir, de parte de la Justicia, una acción rápida, clara y contundente que castigue sin miramientos ni atenuantes a estos criminales.

Cuando sucedió el crimen de Forza, éramos muchos los que opinábamos que no había sido la muerte de un pobre inocente, desprevenido, que encontraron caminando por una calle obscura. La muerte de este delincuente y toda su pandilla, indudablemente respondió a los códigos internos de la mafia, la misma que hoy destapa la cara de algunos de sus cultores locales y que de existir la pena de muerte, les tendría que ser aplicada sin remordimiento.

Estos miserables han condenado a miles de personas a una muerte segura y a sufrimientos en vida, solo por la avaricia que dispensa la cloaca en que han transformado sus vidas. Algunos como ejecutores, otros por omisión, muchos por complicidad y decenas de estos criminales como ideólogos y facilitadores de este crimen, deben pagar con cárcel por el resto de su existencia, el enorme crimen que cometieron.

No he visto, hasta ahora, a las organizaciones de Derechos Humanos levantándose en contra de estos miserables, muchos de los cuales están fuertemente vinculados a gobiernos anteriores y actuales y han sido dispendiosos aportantes de campañas políticas.

Seguimos viviendo la mentira del discurso setentista y parece que allí, en esos años solamente, existieron los derechos humanos para unos pocos; mientras tanto hoy la inseguridad, el índice creciente de pobreza, el aumento alarmante de la desocupación y crímenes de lesa humanidad como el cometido con los medicamentos adulterados, no hacen méritos suficientes como para interesar a los impulsores mediáticos de esa suerte de negocio ideológico en la que han convertido a los DDHH muchos de los cuales están vinculados al poder. (Agencia OPI Santa Cruz)

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11 COMENTARIOS

  1. Pero,…. por que será que todavía no se escuchan hablando de semejante aberración en contra de la gente a Estela de Carlotto, Ebe de Bonafini, Horacio Bervbitsky, etc los “grandes defensores de los hechos de algunos humanos”???…..porqué será…

  2. Tampoco he visto a las organizaciones de DDHH reclamar por el astronómico precio del tomate redondo. Me basta que hayan levantado la voz cuando todos callaban o -peor aún- asentían. La Bonafini me parece un patético símbolo de un tiempo que ya pasó. Y que es pasado, entre otras cosas, por la misma Bonafini, sólo por mencionar a la más conocida. Hoy nadie se acuerda de Augusto Comte Mc Donnell, ni de Carlos Zamorano, por ejemplo. No, para el gorilismo tímido -es un eufemismo- que no se anima a reivindicar a Videla, las DDHH son sólo las palabras desaforadas de la Bonafini.
    A ver, señor Roberto, Sr Autor de la Nota: ¿quieren reivindicar a los que hoy se ven obligados a recorrer los juzgados sin mostrar una pizca de arrepentimiento por lo que hicieron? ¡Pues anímensa y háganlo! Porque salvo uds, nadie va engancharse en esta retorcida lógica de “las-organizaciones-DDHH-no-protestan-ergo-son-malas-ergo-los-militares-son-buenos”.

    • A Mario Eduardo Muro: Lamento que su interpretación tenga tanto sesgo que permita avizorar el verdadero gorilismo. Ud distorsiona sabiendo que patea la pelota fuera de área y saca de contexto todo, inclusive mezcla concientemente los conceptos para decir algo que no se anima a decirlo claramente. Como primera medida parece que Ud defiende a los criminales que nos están matando como sociedad, estos delincuentes que no le han dado oportunidad a la pobre gente que trata de arañar los últimos días de su vida y por culpa de estos animales solo vive la desesperanza. Mezcla y para mitigar este abominable hecho pretende invertir los argumentos señalando que queremos reivindicar a Videla (¿?). Ud está fuera de si o trata de confundirnos. Sobre Bonafini coincidimos y nosotros hemos sido los únicos que una y otra vez dijimos, editorializamos y denunciamos (con nombre y apellido, no anínimamente) el perfil psicótico de esta mujer y la alienación que tiene, sin que ello, en absoluto, signifique justificar o reivindicar una dictadura.
      Por el contrario hemos reconocido la voluntad de lucha de las madres, en su momento el perfil de Carloto y otras tantos defensores de los DDHH, inclusive locales como la profesora Milagros Pierini y cuando preguntamos adonde están los DDHH, lo decimos en la seguridad de que no hemos escuchado A NADIE levnatar la bandera de aquellos que hoy padecen esta muerte comprada en frasquitos con agua que ayudó a generar la misma corrupción que le paga ingentes sumas de dinero a Bonafini para que apoye los grandes logros del gobierno nacional.
      Muéstreme UNO que se haya expedido al respecto. ALGUIEN que en nombre de los derechos humanos de los enfermos haya pedido condena para esta sarta de asesinos????.
      Después que me diga UN NOMBRE y me transcriba la declaración y mencione el medio en que lo dijo podrá abrir juicio sobre lo que hemos escrito respecto de las organizaciones que cuidan los derechos humanos de hace 35 año y borran de su agenda los actuales ¿O en la actualidad no tienen vigencia? ¿O es solo para algunos y para otros no?.
      El silogismo que plantea al final es una chicana barata o de bajo presupuesto. Apunte más alto. Grs por su comunicación. R. Lasagno

  3. no puedo dejar de pensar en mis seres queridos que han muerto a causa del cancer, artritis; amigos adultos que hoy padecen este tipo de enfermedades… y solo me salta la duda… la medicacion que tomaron o que aun toman vendra en estos fransquitos???? o será la legal…. es terrible.

  4. EL NEGRO MURO, SI ES EL OFTALMOLOGO SE AHCE EL BOLUDO PORQUE DEBE ESTAR EN LA TRANZA DE LOS MEDICAMENTOS TRUCHOS. AQUI NO HAY NINGUN LERDO POR ALGO SALE A DEFENDER A LA MAFIA. AGUANTE OPI COMO DIJO EL CHAPULIN ¡¡¡ESTAS EN LO CIERTOO!!

  5. Estimado Sr Lasagno: no sabía que usted era el autor de esta nota. Parece más bien un copy paste de algún medio derechoso, no está a su altura. Y si de silogismos hablamos, analice esta afirmación suya de usted: “parece que Ud defiende a los criminales …”
    Premisa: Muro ni siquiera menciona a los criminales
    Conclusión: Muro defiende a los criminales.
    Esta no es la lógica que me enseñaron en el secundario. Será que lo hice hace tantos años…

  6. LA BONAFINI,FLOR DE DELINCUENTE, ME IMAGINO LO QUE DEBEN HABER SIDO SUS HIJOS! YO NO DEFIENDO ESA CLASE DE GENTE, LOS DERECHOS HUMANOS SON PARA TODOS Y TAMBIEN PARA AHORA, ESTO ES ASESINATO COLECTIVO,LOS FELICITO OPI,UDS SON GENIALES.

  7. Estela de Carlotto, Ebe de Bonafini, Horacio Bervbitsky, todos estos son miserias humanas señores.

    Estela de Carlotto, Ebe de Bonafini, HABLEN CRAPULAS AHORA ATORRANTAS SON TAN COMPLICES QUE NO DICEN NADA… GUARDEN ESE PAÑUELO BLANCO EN EL VOLSILLO.

  8. Pero mi estimado Sr. Muro, se me enrroscó con la cantinela de los años 70 usted también?…bueno, el sentido que le quise dar al tema fué resaltar a 3 personajes que parece que tienen la vista tan desviada como su protector-benefactor político; nada más errado en parte de su reflexión que sugerir que estoy avalando el terrorismo de estado de los 70 que sí lo hubo. Ah! y por favor, no todos los militares eran malos,(el protector-benefactor político de Bonafini se llevó muy bien con ellos y sus leyes -1050-) ni todos los del otro lado eran heroes-

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