28/03 – 09:30 – El juez Sebastián Casanello le pidió cooperación a una par uruguaya que también investiga los movimientos del empresario patagónico. Además intentará comprobar los nexos entre Leonardo Fariña y Juan Suris, hoy detenidos en otras causas.
Por: Sergio Farella
El juez federal Sebastián Casanello tira de todas las puntas habidas y por haber para desentrañar maniobras de presunto lavado de dinero del empresario Lázaro Báez. En las últimas semanas se enfocó en buscar la cooperación internacional con distintos países para recopilar datos que podrían complicar al empresario cercano al kirchnerismo.
Casanello recibió un exhorto desde un juzgado uruguayo en el que se reclama información sobre Báez, sus socios y algunas de sus empresas. Es un pedido que se hizo el año pasado y recién llegó las últimas semanas. Fue cursado por la jueza Adriana de los Santos, quien lleva adelante una investigación por lavado de dinero a partir de operaciones sospechosas que detectó el Banco Central del Uruguay (BCU). Esta pesquisa involucra a Báez, a Federico Elaskar, de la financiera SGI, a Fabián Rossi, esposo de la vedette Iliana Calabró; y a las empresas Teegan, sociedad controlada por uno de los hijos de Lázaro; y Helvetic, dueña de la financiera SGI.
Según trascendió, el BCU detectó que una sociedad anónima envió desde Uruguay unos u$s16,5 millones a una cuenta bancaria radicada en el principado de Liechtenstein, vinculada con Báez. Una de las patas de la investigación es la compra del campo El Entrevero, en la localidad de José Ignacio, a manos del contador de Báez, Daniel Pérez Gadín, y por un valor de u$s14 millones. La sospecha es que fue una maniobra de lavado de dinero.
Antes de dar respuesta al exhorto remitido desde Uruguay, el fiscal Guillermo Marijuan pidió se requiera a la jueza oriental detalles sobre lo que está investigando y cuál es el estado de la causa. Casanello compartió el criterio, y reclamó más detalles sobre la investigación a su colega De los Santos. Es que si bien Uruguay informó de esas operaciones sospechosas no aportó ningún detalle, según ratificaron fuentes judiciales a Infobae.
La pista Fariña-Suris
El juez Casanello avanza en la pista que involucra a Leonardo Fariña, hoy detenido por evadir $28 millones por orden de un juzgado federal de La Plata. Juan Ignacio Suris, novio de la vedette Mónica Farro, está detenido en Bahía Blanca y fue procesado por el juez federal Santiago Ulpiano Martínez por proveer facturas truchas. También se lo investiga por ser líder de una presunta organización dedicada al tráfico de drogas.
Fue el propio Fariña quien dijo ser amigo de Suris. Incluso, el ex de la modelo Karina Jelinek en una oportunidad fue detenido cuando conducía una camioneta de aquel que tenía “problemas de papeles”.
A partir de trascendidos periodísticos sobre una supuesta relación comercial entre ambos es que Casanello pidió a su par de Bahía Blanca tener acceso a la causa en la que Suris está detenido.
El pedido fue rechazado y el pasado 17 de marzo Casanello lo reiteró. En el oficio dijo tener “sorpresa” por la negativa de su par de entregarle fotocopias de la causa contra Suris y justificó en la necesidad de conocer “si lo que allí se investiga guarda relación” con la investigación que él tiene sobre Fariña.
En busca del delito precedente
El juez Casanello viene trabajando intensamente en identificar el origen de la fortuna del empresario Báez. La sospecha es que fue favorecido por la obra pública por su cercanía al kirchnerismo, o bien que podría ser producto de la evasión, o de ambas cosas.
El delito de lavado de dinero implica que se cometió un ilícito, y los fondos producto del mismo se introducen en el circuito legal. Sobre Báez constan medio centenar de causas en las cuales se lo investiga a él o bien sus empresas y de allí el juez Casanello espera dar con alguna pista, pero también apunta a la colaboración internacional.
Hasta el momento, pidió información a Suiza, Panamá, Belice y Uruguay. Con el primero de los países se estuvo cerca de una cooperación pero pedían como condición que el juez identifique el delito precedente por el cual se sospecha de actividades de lavado de Báez algo que Casanello está intentando determinar.
Belice no contestó al exhorto y Panamá dio una respuesta similar a Suiza según informaron fuentes a Infobae. En tanto, con Uruguay hay un principio de colaboración y de allí puede que surja prueba que complique al empresario.
En las próximas semanas Casanello estaría definiendo si procesa o no a Fariña y Elaskar, ambos indagados el año pasado. Luego le queda trabajar en el vínculo que une al primero con el empresario Báez.
A principios del año pasado el programa Periodismo Para Todos informó sobre la fuga de unos 55 millones de dólares del empresario Lázaro Báez hacia paraísos fiscales y por medio de estructuras financieras creada a tal fin, y en cuya maniobra Fariña era sindicado como el “valijero” del empresario. (Infobae)