Para la Oficina Anticorrupción, el caso de las acciones de Aranguren en Shell “es complicado”

22/06 – 10:30 – La titular del organismo aseguró que se le hará una “recomendación preventiva” al ministro de Energía para no caer en un conflicto de intereses.

Ya venía muy sacudido por el tarifazo en los servicios que implementó y derivó en las peores críticas que tuvo el Gobierno macrista en su complicado primer semestre. Incluso tuvo que desmentir su renuncia. En ese contexto complicado, ahora el ministro de Energía, Juan José Aranguren, quedó en posición incómoda por su doble rol de accionista privado y servidor público. Es por las acciones que conserva en la petrolera Shell, que presidió, una de las empresas que queda bajo su control estatal. El caso “es complicado”, resumió esta mañana la titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso.

En diálogo radial con La Once Diez, Alonso se explayó un poco más sobre la situación de Aranguren, que tiene 16 millones de pesos en acciones de la compañía. Según adelantó, se le hará una “recomendación preventiva” para evitar que el ministro caiga en un conflicto de intereses que derive en un problema legal..

“Aranguren posee acciones de una compañía que es del sector petrolero y él es ministro de energía… se está estudiando si alguna de las decisiones de Aranguren podrían beneficiar a Shell o a él mismo”, señaló la funcionaria. Días atrás, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, había defendido al ministro. “No hay incompatibilidad”, señaló.

Aunque durante la gestión K la Oficina Anticorrupción se convirtió casi en un anexo inmóvil de la Casa Rosada, ahora desde la oposición el kirchnerismo viene reclamando acciones contra Macri y sus funcionarios. En el caso del Presidente, fue apuntado por su aparición en una firma off shore (los “Panamá Papers”) y por un depósito de más de 18 millonesde pesos en Bahamas.

Alonso, que responde al presidente de Boca, amigo de Macri y ¿operador judicial? Daniel Angelici, viene haciendo equilibrio entre la transparencia que reclamaba cuando era diputada y la incomodidad de tener que investigar a sus compañeros oficialistas. “El caso es el más complicado que tiene la Oficina Anticorrupción porque no es tan blanco ni tan negro”, reconoció hoy. Más cómoda se siente la funcionaria sumándose a causas judiciales contra ex funcionarios K como Julio de Vido.

Según publicó La Nación a principio de mes, la OA detectó conflictos de intereses en 22 funcionarios, aunque sólo en cuatro de esas averiguaciones recomendó a los involucrados tomar recaudos para no incurrir en actos ilegales. Uno fue el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, que antes de asumir su cargo dirigía la consultora APL, de asesoramiento de empresas.

En cuanto a Aranguren, este martes luce complicado. Hoy tiene cita en el Senado, donde seguramente el tarifazo y sus acciones en Shell serán utilizados por la oposición para cuestionarlo. En la Cámara alta, el ministro tiene un particular “enemigo”. El senador Fernando Pino Solanas lo denunció por la compra de gas a Chile -según el líder de Proyecto Sur, “violando las reglamentaciones vigentes y un 128 % más caro de lo que compra a Bolivia”. (Clarín)