14/12 – 10:00 – La norma se publicó en el Boletín Oficial de hoy con el número 1253
A pocos días de tener que abonarse el medio aguinaldo, segunda cuota anual – la Ley 27.073 obliga a pagarlo antes del 18 de diciembre-, el Poder Ejecutivo Nacional reglamentó la exención del Impuesto a las Ganancias mediante el decreto 1253, al disponer el incremento de la deducción especial.
Según la norma, que fue anticipada ayer en exclusiva por Infobae y publicada este miércoles en el Boletín Oficial, quedarán plenamente exentos los aguinaldos hasta un nivel de bolsillo de $15.000, equivalente a un salario bruto promedio mensual del semestre no mayor a los $35.000.
Por otro lado, para los haberes brutos (antes de descuento de 17% para el Sistema de la Seguridad Social y Obra Social) que no superen los $55.000, podrán aplicar una deducción especial de hasta $15.000. De ahí que el beneficio disminuirá proporcionalmente, hasta llegar a dicho umbral de ingreso nominal.
El Poder Ejecutivo incrementó la deducción especial del Impuesto a las Ganancias para el caso exclusivo de la segunda cuota del medio aguinaldo de diciembre a $15.000, para las remuneraciones que no superen los $55.000 brutos.
La medida era esperada por las empresas porque operativamente estaban en la disyuntiva de liquidar el sueldo anual complementario sin la deducción de Ganancias en los casos en los que correspondiere, con el consiguiente esfuerzo financiero que significaría si finalmente no quedaba exento, o se limitaba a topes menores, porque la retención se liquida a la AFIP sobre el filo de la primera quincena de enero.
Además, no se trata de una incertidumbre menor, porque la Resolución 2437 de la AFIP, que reglamenta el cálculo de la retención del impuesto, establece que el aguinaldo influirá en el cálculo de manera total en diciembre, generando una retención exagerada en ese mes, porque ya no podrá prorratear una eventual retención mayor en los meses siguientes. Antes de esa modificación legal, los tributaristas recuerdan que “una manera de gambetear el tributo era adelantar parte del sueldo de diciembre antes de las Fiestas y abonar el aguinaldo formalmente en los primeros cuatro días del mes de enero del año siguiente. De esta manera, su incidencia en Ganancias se diluía con el proceso inflacionario.
Según adelantó el titular de la AFIP en su presentación en el Senado, el costo para el fisco representa unos $883 millones.
El primer aguinaldo de este año fue también eximido, dentro de la ley de blanqueo (27.260), con las condiciones de haber cumplido con los impuestos por los años 2014 y 2015 y no habiéndose adherido a los blanqueos de capitales y por último no ser sujeto de Bienes Personales.
Impulso al consumo
Tanto los economistas, como los tributaristas, ponderaron la medida, porque impacta notablemente el salario de bolsillo de quienes están alcanzados por Ganancias todo el año, porque “ya están tomadas todas las cargas de familias y deducciones del año, y esto entra como un ingreso marginal al impuesto y a la tasa máxima que estás pagando. Puede ser de un 20% para arriba, porque con las escalas siguen siendo muy bajas”.
Además, saca un peso de preocupación a las empresas, en particular las medianas y grandes, porque tienen todo un procedimiento de liquidación, donde evalúan la situación de cada empleado desde principio de mes, y entre todas esas cosas, después calculan el Impuesto a las Ganancias, porque demoraba todo el proceso.
En algunos casos, las empresas emitieron las órdenes de pago a los bancos, sin el descuento, para luego compensarlo, una vez conocida la norma, con la liquidación final del salario de diciembre, que tendrá lugar antes del cuarto día hábil de enero 2017. (Infobae)