Gobiernos sin planes, sin gestión ni estrategias

01/03 – 10:15 – En muchos aspectos, pero especialmente en el tratamiento del tema docente, algo tan sensible para la sociedad en el inicio de cada año, tanto el gobierno nacional como el provincial son exactamente lo mismo y actúan de igual manera. Si consideramos que María Eugenia Vidal es una prolongación del macrismo y que hace y ejecuta políticas similares a Alicia Kirchner, la línea “nación- provincia” no se corta y procedimentalmente demuestran las mismas fallas y falta de políticas en la materia. (Por Rubén Lasagno)

Las clases no empiezan, esa es la realidad. Por otro andarivel va la discusión salarial entre los sindicatos docentes y los gobiernos. El nacional se lavó las manos dejando en libertad a las provincias, pero advirtiendo que el techo es 18%, línea que les bajó a los gobernadores y que la mayoría aceptó con beneplácito. Pero aún así, hay gobiernos como el de Santa Cruz que no está dispuesto ni siquiera a pagar ese miserable aumento de salarios. Contradictoriamente al mensaje lleno de lamento y financieramente lacrimógeno que realiza la gobernadora Alicia Kirchner en cada oportunidad que puede, no lo tuvo ni le tembló el pulso a la hora de aumentarse junto a funcionarios, asesores y ñoquis del Estado, de forma arbitraria e inconsulta sus salarios, gastos “de representatividad”, “Unidad Retributivas” o como quieran llamar a la forma de darse un aumento de sueldos. Lo importante, para Kirchner, no es lo que ellos se autoasignen de salarios porque dentro de su concepción de la cosa pública, se lo merecen, “es de ellos”, sino, negárselo a los demás.

María Eugenia Vidal gobernadora de la provincia de Buenos Aires “negoció” pagarles un 17% a los maestros en 4 veces, algo así como un chiste de mal gusto pero dicho con seriedad y pretensiones del mayor esfuerzo, como acostumbran a decir los gobernadores que advierten que no cumplen órdenes del gobierno nacional, pero no exceden el techo impuesto por Macri.

La única diferencia entre Vidal y Kirchner es que la primera, por el momento, mantiene abierta la puerta del diálogo y Alicia ha decidido no atenderla, pero como va maría Eugenia, bien se puede transformar en monólogo en poco tiempo, si no logra imponerle a los gremios docentes su punto de vista. Es decir, el espíritu dialoguista de Vidal tiene corta vida como va la mano y la próxima instancia es (como ella lo advirtió) un decretazo para instaurar el aumento, con lo cual no se arregla nada, por el contrario se subvierte todo y el conflicto comienza a llegar al punto de no retorno. De eso sabemos mucho en Santa Cruz y los kirchneristas en especial, son maestros del fracaso en materia de negociación con los docentes.

Otra similitud de Vidal con Alicia, es el “remedio” que piensa aplicar la gobernadora bonaerense, convocando a los 50 mil “voluntarios” para que suplan a los docentes en las aulas. Una estupidez total si alguien cree a estas alturas que se trata de una medida lógica y plausible y que no se trata de una mera presión para el sector gremial. Mayor estupidez aún si alguien cree que un gobierno que no puede mantener y contener a la Educación, dentro de la estructura establecida, con docentes normales, un sistema más o menos organizado y probado, puede funcionar con voluntarios vocacionales, como si ir a dar clases se tratara de pegar ladrillos, a menos que quieran transformar las escuelas en guarderías para satisfacer la necesidad de “contención” de los niños, cuyos padres no saben dónde dejarlos por cuestiones laborales. Sin embargo, si se trata de una cuestión pedagógica, que alguien me explique dónde está el beneficio. Vidal como Kirchner, solo buscan poner a los padres contra los docentes, para presionar por vías indirectas a los sindicatos.

No olvidemos que esta misma idea, la tuvo y la sigue sosteniendo Alicia Kirchner, quien ya el año pasado buscó por todos los medios reemplazar a los maestros por “padres autoconvocados”, “voluntarios” y hasta trabajadores de la UOCRA.

Es decir y para no extenderme más, que los gobiernos tanto provinciales como nacionales, llegan sin planes ni políticas en materias como Educación y Seguridad, por ejemplo. No así en materia económica. Allí sí, eligen profesionales de las finanzas y se exprimen la cabeza para que la inflación no se les vaya de las manos porque indefectiblemente lo pagarán en las urnas en las próximas elecciones. Pero en cuestiones de “menor intensidad” (para ellos), políticas como las educativas y de seguridad no necesariamente deben tener gente pensante, sino buenos cumplidores de órdenes. Así estamos.

En materia de Educación no hay rumbo, no existen políticas públicas, carecen de estrategias, anulan el diálogo porque están impedidos de ofrecer una necesaria recomposición salarial y pretenden que el docente sea “vocacional” y no exija ningún pago por su trabajo o en su defecto, se conforme con lo que les dan. Tal vez ellos (los políticos) no son el mejor ejemplo en la materia; por lo tanto los gobiernos títeres de los poderes concentrados, hoy en manos de Macri, deberán enfrentar este problema cada vez más complejo: la Educación sin salida, porque hay una negativa expresa a pagarle un salario digno a un docente y los paros en este sector conmueven y son un baldón para cualquier gobierno.

Podemos discutir si en esto hay mucho de ideológico o no, pero el fondo de la cuestión es lo que no se resuelve: no se negocia, como en el caso de Alicia Kirchner que se niega a una mesa de acuerdo, se negocia mal y condicionado, como es el caos de Vidal que ofrece el 17% en cuatro partes y cuando los gremios no aceptan esto, en vez de seguir hablando, se recurre al sucedáneo de la sustitución del docente o al presentismo, dos armas letales de cualquier acuerdo y que demuestra la poca o nula capacidad de gestión de los que gobiernan, quienes no saben cómo manejar la política si no es con los bolsillos llenos y cuando los tienen, los asignan a cualquier destino, menos a recomponer el inconmensurable atraso que tiene la Educación en nuestro país. (Agencia OPI Santa Cruz)