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El Gobierno espera que la presidencia del G-20 favorezca la llegada de turismo e inversiones

El Gobierno espera que la presidencia del G-20 favorezca la llegada de turismo e inversiones – Foto: Presidencia

10:00 Macri aseguró que el objetivo es participar de la discusión global sin “alzar la voz de enojados” ni seguir “intereses de otros”

Por: Jaime Rosemberg
Sentado entre su esposa, Juliana Awada , y el jefe de Gabinete, Marcos Peña , el presidente Mauricio Macri disfrutaba el momento. A su turno, y a través de videos y alguna carta, líderes mundiales de la talla de la alemana Angela Merkel , el japonés Shinzo Abe y el chino Xi Jinping elogiaban su “fuerte liderazgo” y le prometían apoyo para el trascendente paso que estaba a punto de dar.

“Estamos poniendo a la Argentina en un lugar relevante en el mundo, un mundo al que le inspiramos confianza porque ven que estamos en el camino correcto”, dijo el Presidente en el CCK, donde ayer asumió formalmente y por un año la presidencia del G-20 , el organismo que congrega a los países más poderosos del planeta.

Para el Gobierno, que la Argentina presida la “gran liga” y organice, a fines de noviembre del año próximo, la cumbre del G-20 en Buenos Aires, traerá consigo una multitud de beneficios, no sólo políticos, sino también económicos. La “ola de turismo e inversiones” que se prevé para ese encuentro y el efecto de influencia “intangible” de la designación de la Argentina sobre las decisiones de inversión de las empresas internacionales son, a juicio de la Casa Rosada, dos de las consecuencias positivas que le traerá al país este hecho, inédito en la historia argentina y sudamericana. “Hoy damos comienzo a un período de trabajo muy intenso que servirá para contarle al mundo sobre la Argentina y a la Argentina sobre el mundo”, dijo Macri, ante un auditorio repleto compuesto por miembros de su gabinete, gobernadores oficialistas y opositores, diplomáticos, miembros de la sociedad civil y muchos hombres de negocios.

En sólo diez minutos de discurso, y utilizando un mix de referencias a la política local e internacional, el Presidente dejó en claro que “la inserción inteligente” de la Argentina al mundo es una de las prioridades de su gestión. También, que aspira a liderar la región o, al menos, ser su voz en la discusión con las grandes potencias. “Queremos ser una expresión de toda la región. Y vamos a demostrar que podemos sumarnos a una conversación global sin alzar la voz de enojados, pero tampoco seguir pasivamente los intereses de otros”, señaló.

La diferenciación con el kirchnerismo estuvo, otra vez, presente en el discurso de Macri, al igual que su intención de representar al menos al Mercosur, que se reunirá el 21 de este mes en Brasilia, en las discusiones que se vienen.

La agenda que propondrá la Argentina en el G-20 estará, según lo afirmado por el Presidente, en tres ejes: el “futuro del trabajo”, la “infraestructura para el desarrollo” y un “futuro alimentario sostenible”. Sobre el primero, afirmó que la batería de reformas que envió al Congreso contempla “consensos con todos los sectores”; en relación con el segundo, Macri dijo que el Gobierno está “llevando adelante el plan (de obra pública) más ambicioso de la historia”, y sobre el tercer eje, Macri sostuvo que el país “está listo” para alimentar a 400 millones de personas. “Gran parte de lo que estamos haciendo para el G-20 está pensado en la gran meta nacional, mi gran compromiso como presidente: reducir la pobreza”, puntualizó.

A fines de noviembre, en el mismo CCK o en el flamante Centro de Convenciones, o en ambos, Macri recibirá al norteamericano Donald Trump, el ruso Vladimir Putin, Merkel y Xi Jinping. ¿Hay preocupación por la seguridad? En la conferencia de prensa posterior al acto, Peña y el canciller Jorge Faurie insistieron en que Alemania -que traspasó la presidencia a la Argentina ayer- y otros países, como Rusia y Francia, están transmitiendo conocimientos y estrategias para hacer frente a eventuales incidentes, como los protagonizados en la Cumbre del G-20 en Hamburgo.

“Más que la cumbre en sí, la principal preocupación es que [los presidentes] lleguen, tengan una buena reunión y se vayan sin problemas”, se sinceraron muy cerca del Presidente. Realizar el cierre el viernes 30 de noviembre y el sábado 1º de diciembre de 2018 tendrá la ventaja de tener la ciudad semivacía por el fin de semana.

Durante el año, además, habrá cincuenta reuniones de trabajo en distintas ciudades del país, como Mar del Plata, Rosario, Salta y Córdoba, además de Bariloche, donde hoy se llevará a cabo la primera reunión, protagonizada por los ministros de Finanzas.

Macri destacó que el foro “demostró ser muy efectivo” en 2008, el año de su creación, porque impidió “una depresión internacional”. En la conferencia posterior, Peña vislumbró un efecto secundario positivo para el país. “Nos va a ayudar a abrir la cabeza, integrarnos más al mundo y dejar de pensar a la defensiva”, dijo el jefe de Gabinete. (La Nación)

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