09:30 Temen que si aceptan el resarcimiento se dejará de buscar la nave; una familia ya inició los trámites y eso puede llevar a que se considere a todos fallecidos
Por: Alan Soria Guadalupe
A seis meses de la desaparición del submarino, los familiares de los tripulantes del ARA San Juan se enfrentan a la incógnita de si deben iniciar los trámites para cobrar los seguros de vida o descartar esa posibilidad y seguir presionando al Estado para que no se abandonen los ya reducidos operativos de búsqueda.
“No lo pienso hacer hasta que no tenga una prueba”, dice una de las parientes que no pedirá el resarcimiento. Su postura se replica en una amplia porción de las familias, que cree que si se accede a cobrar el seguro, en esa decisión subyacería el reconocimiento de que los tripulantes del navío están muertos, por lo que se habilitaría a suspender la búsqueda.
El consenso de no pedir el resarcimiento a partir de mañana, cuando se cumplen los seis meses y legalmente se puede iniciar el trámite, abarca al menos a 40 de las familias, pero, según dicen, en este caso las mayorías no importan. Basta con que una sola familia decida avanzar para que se los tome a todos como fallecidos.
“Si alguien hace el trámite y la Justicia dice que tal día a tal hora una persona desapareció directamente se extiende al resto de los 43 que están en la misma situación, pero hay familiares que por ahora no lo quieren hacer hasta que tengan prueba de que los chicos están en el submarino”, agregó una de las familiares que visita con frecuencia la Base Naval Mar del Plata, donde los parientes hacen guardia.
Sin embargo, la grieta entre los parientes quedó consolidada cuando se supo que para al menos una familia la decisión ya está tomada. Según afirmaron, iniciarán mañana mismo los trámites con la ayuda legal de la Armada.
Las familias de los tripulantes del submarino, que desapareció el 15 de noviembre último cuando se dirigía a la base marplatense, tendrán a disposición para cobrar seguros de vida que en su mayoría no llegan a los $50.000. Solo 12 familias podrán percibir indemnizaciones mayores.
Como reveló LA NACION en marzo, 32 tripulantes tenían seguros sociales básicos previstos por ley y cobertura por el sepelio, por lo que el reembolso alcanza $48.130. El resto de los integrantes del navío habían contratado un seguro voluntario que contemplaba pagos entre $603.180 y $822.230.
Pero para la Armada mañana no marcará un antes y un después. “El 15 para nosotros no es una fecha final. Es una fecha inicial”, les dijeron a los familiares. Y agregaron: “La importancia del 15 es que cualquier persona puede ir a un juez y solicitarle que empiece el proceso para declarar una eventual ausencia con presunción de fallecimiento. No tiene que ver con nosotros, que no tenemos nada previsto en especial”.
Contención y homenajes
Paralelamente, el Estado desplegará medidas de contención para los parientes. Por decreto, el Gobierno anunció que otorgará becas educativas para los hijos de los tripulantes, quienes tendrán los gastos estudiantiles cubiertos para los niveles preescolar, primario, secundario y superior. El beneficio regirá en establecimientos municipales, provinciales y nacionales para los hijos que tengan entre tres y 25 años.
Las becas consistirán en la entrega de una suma de dinero que partirá de un porcentaje del salario mínimo, vital y móvil, que será mayor dependiendo del nivel educativo. El preescolar, por ejemplo, tendrá una cobertura del 35% y el universitario, del 60%.
Según los fundamentos de la medida, los tripulantes eran en la mayoría de los casos los principales sostenes económicos de las familias. Muchas de ellas, además, están integradas por jóvenes en edad escolar.
Por su parte, los familiares también seguirán cubiertos por las obras sociales que tenían los tripulantes.
Los seis meses de la desaparición del submarino se cumplirán, además, entre homenajes organizados por los propios familiares y reclamos para que no cedan los esfuerzos de la búsqueda. El acto principal será frente a la Base Naval Mar del Plata.
Actualmente hay un solo buque afectado a las tareas de rastreo, según confirmó la Armada en una de las reuniones que tienen con los familiares en Mar del Plata, porque el resto no está operativo. Lejos quedó la ayuda de 18 países que participaron durante las primeras semanas de la búsqueda. No habrá homenajes oficiales. Por ahora, queda pendiente que se resuelva la licitación a través de la que se contratará a una empresa para que continúe con el rastreo. (La Nación)
