Con el canje de letras y una suba de encajes, ayer se vivió una tregua con el dólar


09:10 Con un ajuste al torniquete monetario ideado hace 15 días y la promesa a quienes apostaron a las Lebac en pesos de que podrán obtener hoy cobertura cambiaria canjeándolas por Letras del Tesoro (LETE) en dólares, sin necesidad de venderlas previamente para lograr el pase de moneda, el Gobierno consiguió ayer el primer síntoma de alivio de los últimos días: logró que el peso recuperara un 2% de su valor frente al dólar (la cotización cayó de $29,57 a $29,04 promedio al público) en un día de bajas para el resto de las monedas emergentes.

Por: Javier Blanco
La renovada apuesta por intentar dejar atrás la corrida se definió durante el fin de semana, tras varias reuniones entre funcionarios del BCRA y de Hacienda, como anticipó LA NACION en la víspera. Pero se materializó ayer y tendrá su broche hoy con la inédita subasta de LETE, que permitirá suscribir esos títulos ya no solo con pesos (al tipo de cambio de referencia de ayer, que cerró en $28,7217) o dólares cash, sino también en Lebac.

Lo concreto fue que las nuevas medidas provocaron un masivo reacomodamiento de precios en activos financieros domésticos, que en lo más álgido del día se reflejó en el salto de hasta el 61% que llegaron a marcar las tasas de las Lebac (para la que vence en agosto, que finalmente cerró en 52% anual).

Los analistas avalaron el nuevo intento oficial de ponerle fin a la tormenta financiera y la decisión que volvieron a mostrar las autoridades económicas de dejar en evidencia que su intención es cerrar este capítulo lo antes posible, tras tres meses y medio de costosas cavilaciones.

“El primer paso en una situación como la actual pasa por lograr la estabilización del tipo de cambio. Y estas medidas deberían ayudar, porque el desarme de Lebac por LETE hará que no haya más supermartes , con el alto costo y la emisión monetaria que significaban. Además, se dio otro paso hacia una política contractiva más eficiente y en línea con las metas monetarias acordadas con el FMI, que implican bajar del 29 al 20% la tasa de aumento de la base monetaria”, sostiene el director del Estudio Alpha, Hernán del Villar.

“En estas circunstancias hay que probar todas las herramientas para que quien quiera dolarizarse pueda hacerlo, pero de manera ordenada y sin presionar tanto sobre el billete. Hay empresas y personas que se pasaron a dólares y van a necesitar pesos en el transcurso del mes para su actividad: decidieron por temor. Si el mercado se estabiliza, un nuevo equilibrio será la consecuencia lógica y quedará a la vista que hubo una sobrerreacción”, coincidió Mariano Sardans, de la gerenciadora de patrimonios FCI.

Para el economista Eric Ritondale, de la consultora EconViews, está llegando el momento en que “los fundamentos tienen que empezar a acomodarse a los valores técnicos y el mercado a estabilizarse, porque el tipo de cambio real empieza a ser consistente con el financiamiento asegurado vía FMI y la corrección que insinúan los déficits externos. Si las nuevas medidas ayudan a acercarlo, mejor”.

Pero su colega Fernando Baer, de Quantum Finanzas, aunque valora las medidas como “otro intento de frenar la tensión”, cree que “aún no está tan claro si llegamos a un nivel del tipo de cambio que pueda considerarse de equilibrio. Y ojo con el canje Lebac/LETE, porque si resulta en financiamiento al Tesoro y no se esteriliza puede tener impacto monetario y volver a afectar la demanda de pesos”, advierte.

Otra jornada caliente

La jornada definió su tónica poco antes del mediodía, apenas el BCRA comunicó a los bancos su decisión de aumentar en 3 puntos promedio los encajes para todos los depósitos en pesos. Vale recordar que apenas asumió Luis Caputo al frente del BCRA se había dispuesto un alza similar, que se completaría a mediados de este mes con otro incremento de 2 puntos.

La inesperada decisión, que generará una absorción de liquidez estimada en $60.000 millones, disparó una serie de reacomodamientos en el mercado al obligar a los bancos a vender distintos instrumentos (Lebac, dólares, etc.) para poder cumplir con la integración que entró en vigor en el día, lo que ayudó a voltear el precio del billete, que había llegado a marcar un máximo de $28,95 (10 centavos por arriba del cierre mayorista del viernes) y comenzó a bajar hasta cerrar en $28,30, lo que generó alivio en todo el Gobierno.

La suba de encajes obligará a su vez a elevar las tasas que los bancos ofrecen a los ahorristas por depósitos a plazo en pesos, que ya subieron del 24,7 al 28,1% promedio en un mes y aun así no alcanzaron a evitar un derrape de $13.300 millones en el stock de esas colocaciones. Por el nivel de astringencia monetaria, se supone que tenderán a ubicarse por encima del 30% en los próximos días, lo que debería a ayudar a bajar la pulsión dolarizadora si el billete al fin se estabiliza. (La Nación)

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Suscribité al Newsletter

Más Noticias

- Publicidad -spot_img

Más Noticias