La maniobra de simulación de los gremios sin dignidad

12:30 – (Por Rubén Lasagno) – Cuando se creó el grupo de gremios afines al gobierno, encabezados (y organizados) por Claudio Vidal a instancias de Pablo González y Teodoro Camino, que reúne a los sindicatos oficialistas como UPCN, APAP, ATE, UOCRA, Camioneros y luego condensa una serie de sindicatos con poco pesos político pero con sello propio como para figurar en los papeles, los renombramos Club de Amigos de Alicia (CAA) porque es así como lucen y adelantamos cuál sería el objetivo de esta creación. Una maniobra para generar un grupo aliado de gremios tras los cuales la gobernadora aparezca “negociando” cuando en verdad son imposiciones políticas.

Para completar el cuadro de simulación, los gremios actuantes tienen la posibilidad de “protestar” o “pedir” días previos a un pago determinado (se retrasan los sueldos, pegan un grito y el día posterior aparece el pago) o como en este caso, previo o durante a una paritaria ejercen el acting. Allí simulan públicamente un “tire y afloje”, el gobierno parece que “cede” y finalmente se termina “acordando” lo que ya estaba establecido por el Ejecutivo.

En esta concepción infantil del engaño gremial, todos ganan, menos los afiliados de esos gremios a quienes su dirigencia no representan debidamente. El gobierno gana porque impone su voluntad, les cede a los sindicatos la posibilidad de “reclamar”, ambos simulan una negociación y finalmente tanto gobierno como sindicato reparten lo poco que la misma gobernadora puso arriba de la mesa.

Hacia la opinión pública, el gobierno se muestra dialoguista, cumple con las paritarias y de esa manera pretende demoler el argumento de otros gremios que se lo enrostran permanentemente. Hacia adentro, logra que los gremios afines se conformen con lo que les da y éstos pueden levantar (ante sus afiliados y los otros gremios)una bandera “de negociación en épocas de crisis” y pretenden marcar una realidad distinta a la que promueven los gremios beligerantes; ergo: intentan decirle a la opinión pública: con el gobierno se puede hablar y discutir salarios. Lo que no dicen es cómo y cuánto.

El otro objetivo común es que logran ampliar una plataforma de protesta en contra del gobierno nacional. Vidal y González, promueven las críticas, no solo desde sus lugares comunes sino que lo extienden a todos estos gremios afines, con el fin de “parecer más voces”, aliándose con el gobierno para protestar contra las políticas de ajustes de Macri, pero enmudeciendo con la depredación, política económica y laboral desplegada por Alicia en Santa Cruz.

“Nos encantaría pasar 3500 pesos al básico”

Esta frase es el título de una nota que aparece en el diario Tiempo Sur, un medio que como la Opinión Austral está abonado a la pauta y se promueve como exégeta del gobierno de Alicia, que ha incorporado (como hizo con el otro medio) a uno de los dueños del diario como funcionario de su gestión.

La frase del intertítulo (según el diario) corresponde a Marcos Vellio Secretario General de UPCN Santa Cruz. Y a partir de allí empieza a describir la actuación de uno de “los grandes simuladores”. 

Los tres gremios de la administración pública rechazaron la oferta de transferir 1000 pesos al básico, y los restantes mil pesos como suma remunerativa (de acuerdo a los 2000 pesos acordados en la paritaria anterior), dice la nota. Aquí se plantea la “oposición” de los gremios a aceptar tan magro saldo en la negociación paritaria.

“En esta línea UPCN reafirmó que buscará trasladar 3500 pesos al salario básico (los 2000 más 1500 acordado en 2016), pero además pases a planta, y mejorar las Asignaciones y sobretodo la que se abona por Hijo con Capacidades Especiales, agrega TS, instalando el viejo y remanido truco de negociador sin clase: pido 10 para que me den 5. En este caso con el agravante que uno de los negociadores sabe que el gobierno no le va a dar ni cinco.

Y a partir de aquí aparece el verdadero personaje del simulador sindical. Escribe el diario, a instancia del propio Vellio:

“Que pasen 2000 supera las exceptivas por un lado, porque quedó el compromiso con los jubilados, ya que no fue culpa nuestra aceptar esos 2000 pesos, ya que fue la base para negociar en el futuro, como ahora, para llevarlo al blanco” y a continuación agrega que “igualmente” insistirán en mejorar la oferta ya que “tenemos sueldos muy bajos, e incluso cuando asumió esta gestión, estaban así”.

Este último párrafo es para poner en un cuadrito. Específicamente en estas frases se condensa lo que va a ocurrir. A lo sumo el gobierno va a pasar los 2000 pesos al básico, tal como ya lo había pactado de antemano con ellos, mientras tanto los estuvo abonando en negro. Pero como Vellio intenta no quedar descolgado frente a sus afiliados, asume que fue “base de la negociación previa” y que ahora “se logró el objetivo”. Con esto Vellio intenta decirle a los afiliados: ¿Vieron que hacemos las cosas bien?. Más debería explicar por qué y cómo se aceptó desde un principio, un salario no remunerativo que dilapidó las conquistas sindicales del 2007. Y que aún pasado los 2000 pesos al básico, en relación al salario puro, es una cifra miserable que no alcanza a cubrir ni el último aumento de la canasta básica del mes.

Pero como no puede dejar de reconocer la mala situación por la que atraviesa su sector, debido, entre otras cosas, a la falta de lucha en contra de quienes les fijan salarios, el dirigente (expresa el diario) reconoció tener sueldos muy bajos, debió decir por debajo de la línea de pobreza y puso la frutilla del postre al “reconocer” que “cuando asumió esta gestión” (obviamente por el gobierno provincial, aunque deja la duda si es la de Alicia o la de él), “los sueldos estaban así”; es decir, la culpa, en todo caso, está repartida entre Alicia y Peralta. De esta manera evita, ante sus afiliados, explicar por qué no discute y lucha más en la mesa de acuerdo, por un salario mejor.

Lo que viene después es, claramente, una muestra más de lo que todos sabemos por parte de esta dirigencia sindical sumisa y complaciente. No tiene palabras más que de agradecimiento para la patronal que los tiene postergados bajo al línea de pobreza, mientras el gobierno gasta a manos llenas sin límites ni control.

“Veo un análisis del Ejecutivo, de la Gobernadora, con una voluntad para mejorar”, sostuvo y resaltó que esto es notorio “con los interlocutores” que participan de la paritaria”, empresa el diario que dijo Vellio.

Es como si alguien que está siendo sodomizado, se tranquiliza porque hoy lo sodomizan menos. Una vergüenza, propia de la falta de libertad que tiene parte de la dirigencia sindical que en vez de pelear por sus derechos, los declama para la tribuna y los entrega en al mesa chica del gobierno.

Y si la simulación y las alabanzas al gobierno eran pocas, Vellio (siempre de acuerdo a TS), dijo que fue “muy acertada” la creación del Ministerio de Trabajo (¿?), recordemos que esta nueva estructura burocrática la creó Alicia con el simulado “impulso” de la CAA (su club de amigos). Dijo también que “(Teodoro) Camino sabe sentarse con nosotros y hablar de otra manera, había funcionarios que parecían que nos querían enseñar a hacer gremialismo. Se ve que verdaderamente ahora se puede avanzar, ya que antes las cosas no estaban funcionando porque los interlocutores que habían obstruían la mesa de negociación”, deslizó. Lástima que no se acordó que Camino es jefe del área de Trabajo desde que asumió Alicia.

Es decir, UPCN no dejó nada afuera al hora de entender cuál es su rol como gremio en Santa Cruz: un brazo ejecutor del discurso oficial y sostenedor de las políticas de su patronal, a la cual debiera estar reclamándole mejores salarios en beneficio de sus afiliados, en vez de hacer chupamedismo barato y arriando las banderas de cualquier lucha digna por sus representados. (Agencia OPI Santa Cruz)