Todo armado: Giubetich, Concejales, Alicia, Grasso, terreno, licitación simulada y Permaco (obvio)

18:30 – Esta semana se coronó el plan del gobierno provincial, que contó con la inestimable colaboración de los radicales siempre necesarios para lograr las metas del FPV, especialmente de aquellos integrantes de la UCR con reconocida “trayectoria” a favor de los objetivos kirchnerista. En este caso el más destacado es el intendente de Río Gallegos Roberto Giubetich, seguido del concejal Evaristo Ruiz del mismo partido que en este último acto alineado con el gobierno provincial, lograron que el municipio de esta capital (es decir todos los ciudadanos de Río Gallegos) le regalaran un céntrico terreno al gobierno provincial, que tiene un valor aproximado al millón de dólares, para que Alicia Kirchner, Pablo González y Pablo Grasso cierren un proyecto financiero largamente acariciado por el kirchnerismo, especialmente para cobrar antes de las próximas elecciones.

En el salón Blanco de la Casa de Gobierno la gobernadora y el vice gobernador, en el marco del programa UNIRSE, abrieron el sobre del adjudicatario de la obra de ampliación del Hospital Regional Río Gallegos, a construirse en el controvertido terreno regalado por el intendente Giubetich en calle Ramón y Cajal y 25 de Mayo, correspondiente a la Licitación Nº 63/IDUV/2018, donde (como no podía ser de otra manera) la empresa “favorecida” fue PERMACO SRL.

“Esto no es un proyecto de responsabilidad social empresaria más porque en la argentina es único y es la forma que encontramos para realizar las obras que se necesitan y seguro que falta mucho más y por eso seguimos trabajando”, dijo Alicia Kirchner en el acto sin ponerse levemente colorada, cerrando con un cálido agradecimiento al intendente Giubetich “porque ha colaborado para que la obra del Hospital se pueda comenzar”, señaló la gobernadora y vaya si el intendente cumplió. A tal punto cumplió Giubetich que en tren de no fallarle dejó atrás su dignidad, el interés público de la gente, el interés por el patrimonio de la ciudad, olvidó las necesidades que tiene su municipio, fracturó algunos brazos internos de la UCR y se inmoló políticamente de aquí en más, como posible candidato a algo, al menos en la ciudad capital de Santa Cruz.

Sin sorpresas, todo había sido dicho

El 1º de octubre de este año escribimos una nota titulada: “Ya está todo cocinado. El terreno no ha sido entregado formalmente por el municipio, pero el IDUV ya licitó la obra” y realizamos un informe donde se plasmaba claramente que todo el acting del Concejo Deliberante de Río Gallegos, las inconsistencias de Giubetich cuando le preguntaban a micrófono abierto sobre si iba a entregar o a vetar el terreno, las maniobras inmorales de concejales de la UCR y el FPV en el CD de la ciudad, como el propiciado por Evaristo Ruiz (UCR) a instancias de su jefe de equipo Jorge Cruz para darle luz verde a Giubetich, fue una parodia berreta, una puesta en escena antes de cumplir la obligación que tenían: entregarle a Kirchner el terreno, porque el gobierno ya tenía todo preparado para “empezar la obra”, la cual estaba asignada a PERMACO SRL, desde el primer momento en que se pensó en ampliar el hospital, aunque no haya nada “para ponerle adentro” como aparatología, médicos y enfermeros.

Dicho esto, el 16 de noviembre se “convocó” a una licitación trucha y dos días después apareció la empresa que “ganó” la obra: PERMACO SRL, de Osvaldo Sanfelice, la “Austral Construcciones de Alicia”, la firma preferida de Pablo Grasso y la cual, junto con otras empresas del medio estrechamente vinculadas con el poder y hasta con parientes y amigos de funcionarios del IDUV en sus directorios, constituyen la continuidad de la cartelización de la obra pública que promovió Néstor Kirchner tanto en la provincia como en la Nación.

PERMACO SRL no puede dejar de ser la aspiradora de fondos públicos puesto ahí por el estado provincial para cerrar el círculo de dinero espurio, producto de la coima, los sobreprecios y las dádivas, por eso la empresa creada por Sanfelice y Sancho se hizo cargo del plan “Techo Digno” de 45 viviendas en El Calafate, otras 66 en Pico Truncado, 50 en Las Heras, 25 en Piedra Buena, 18 en Puerto Santa Cruz, 15 en Gobernador Gregores, 4 en Fitz Roy y otras 4 en Tres Lagos.

No es casualidad, es causalidad; los obras deben hacerse para que caigan en manos de PERMACO SRL y ésta no es la excepción. Por eso y no por otra cosa, mucho antes de que el intendente Roberto Giubetich enviara al CD de la ciudad el proyecto para la “donación” del terreno, ya estaba hablado y decidido con la gobernadora la entrega sin cargo de la tierra fiscal. A partir de allí, el gobierno provincial ya había decidido la obra, el monto y la empresa que la iba a ejecutar y el 19 de noviembre se “formalizó” públicamente esta entrega que es un nuevo negocio de más de 100 millones de pesos que quedarán en pocas manos y algunos bolsillos.

Todo era obvio y previsible y OPI lo contó con la debida anticipación para que nadie hoy diga que se siente sorprendido. Pasó tal cual lo describimos y nos animamos a decir que seguirá pasando, en tanto la población no se involucre y la sociedad siga ciega e indolente a estas cuestiones que hacen no solo al patrimonio de la ciudad, sino a la dignidad ciudadana. No se puede pedir que algo cambie cuando como ciudadanos asistimos impávidos a la burla, el robo y la mentira descarada de la que somos blanco, por parte de autoridades municipales y/o provinciales que solo miran su bolsillo y el de sus amigos. Estos “logros” de la politiquería provincial, lo consiguen mediando dos elementos sustanciales: la impunidad y la indiferencia. (Agencia OPI Santa Cruz)