11:00 – La web del Banco Central de Venezuela (BCV) comenzó anoche a escupir un dato tras otro sin previo aviso y en medio de la sorpresa nacional. Tras más de tres años de silencio impuesto por Nicolás Maduro , con una parte de las cifras sin actualizar desde 2012, el BCV aportó sus datos oficiales, que no coinciden con los adelantados por economistas locales y entes internacionales como el FMI, pero que sí confirman la catástrofe.
Por: Daniel Lozano
Según el BCV, el Producto Bruto Interno (PBI) cayó un 47,6% entre 2015 y 2018, lo que se acerca al análisis del Banco Mundial (BM), que definió el derrumbe venezolano como “la peor crisis en la Historia moderna de la región”. Restando los tres meses que faltan del año pasado y el pronóstico del BM para 2019 (una contracción del 25%), Venezuela pasaría a liderar el ranking histórico de peores depresiones económicas, igualando a la guerra civil siria.
El 51% del PBI perdido durante la primera presidencia del “hijo de Chávez” más lo vaticinado en la actualidad queda muy por encima del crack del 29 en Estados Unidos, la crisis de Grecia, la Guerra Civil española o la República de Weimar, según los estudios del economista estadounidense Steve Hanke.
A los datos del PBI, tan contundentes que habrían provocado la caída del gobierno en el resto del planeta, se suman los de la inflación, mucho más timoratos y alejados de la realidad: la subida de precios, según el BCV, alcanzó el año pasado el 130.060%, tras una escalada que comenzó en 2015 (180,9%), prosiguió en 2016 (274,4%) y se estiró en 2017 (862,6%). El FMI, en cambio, la situó en 1.370.000 durante el año pasado y el Parlamento democrático, que se ha encargado de aportar al país lo que el gobierno ocultaba, la corrobora con su propio cálculo: 1.698.488%.
“Es la más alta en la Historia de América Latina, ya sea que se use la tasa reportada por el BCV o la muchísima más alta calculada por el Parlamento”, resumió el economista Urbi Garay.
Cifras ocultas
Las primeras cifras que el chavismo comenzó a ocultar, al principio de la era Chávez, fueron las referentes a la violencia. Durante el gobierno de Maduro, el catálogo de censuras se amplió a las estadísticas económicas, sanitarias y sociales.
Las aportadas ayer comprenden hasta el tercer trimestre de 2018, antes de la aplicación de las sanciones internacionales y el embargo petrolero de este año, usadas en la actualidad por el gobierno de Nicolás Maduro para justificar desde las muertes de los niños sin trasplante hasta la escasez y racionamiento de gasolina en el interior del país.
“El BCV también confirma que la mayor parte de la destrucción de la economía ocurrió mucho antes de las sanciones”, sentenció Henkel García, director de Econométrica, que durante los años de ocultamiento estadístico también aportó sus propias mediciones.
El economista Garay también pone en duda las cifras gubernamentales sobre la construcción de viviendas públicas, uno de los grandes ejes de la propaganda chavista: Maduro celebró este mes la entrega de tres millones de hogares, dentro de la Gran Misión Vivienda Venezuela. Algo que parece imposible a tenor de las cifras del BCV, que asegura que el PBI del sector construcción se desplomó un 95% entre 2012 y 2018. “Es el que más ha caído, no se está construyendo”, subrayó Garay. (La Nación)
