Reclaman una condena más enérgica al régimen de Nicolás Maduro
Por: Gustavo Ybarra
Conscientes de que la actitud ante la crisis venezolana divide opiniones en el interior del Gobierno, la oposición reunida en Juntos por el Cambio volvió a la carga ayer con críticas a la tibieza con que la administración de Alberto Fernández condenó el intento del chavismo de desplazar al opositor Juan Guaidó de la presidencia de la Asamblea Nacional.
“No es suficiente la declaración oficial de Argentina sobre Venezuela. Es muy difícil mantener una tercera posición frente a dictaduras como la de maduro”, sentenció el exsenador Miguel Pichetto.
El rionegrino agregó que es “poco consistente de parte del Gobierno llamar a recuperar la normalidad democrática en Venezuela” porque, aseguró, “hace tiempo que no hay democracia en ese país”.
Las declaraciones del excompañero de fórmula de Mauricio Macri están en la misma sintonía que la manifestada por Mario Negri (UCR-Córdoba), presidente del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio, quien acicateó al Gobierno por negarse a calificar de dictadura al régimen de Nicolás Maduro.
“Impedir por la fuerza el funcionamiento de la Asamblea Legislativa ratifica que hace tiempo la democracia como tal desapareció. Las ejecuciones probadas por la ONU, y este hecho dicen que es una dictadura. ¿Tanto les cuesta decirlo con todas las letras?”, desafió el líder parlamentario opositor en réplica al comunicado emitido anteayer por la Cancillería, que conduce Felipe Solá.
En diálogo con LA NACION, el diputado Negri aseguró que el Gobierno está dividido en torno a la situación venezolana. “Se ve que hay una cuestión bifronte entre Cristina Kirchner, que en el tema Venezuela responde a su clientela electoral, y Alberto Fernández y sus responsabilidades de gestión”, aseguró.
Al respecto, el legislador cordobés alertó sobre las consecuencias que para el país podría traer aparejada esa dualidad. “Es una ingenuidad imaginar que en política internacional podés hacer y decir lo que quieras sin que eso tenga repercusión en la política local, sobre todo cuando estás negociando la deuda con el Fondo Monetario Internacional”, explicó Negri.
Si bien el Congreso se encuentra en período de sesiones extraordinarias, la críticas del principal conglomerado opositor a la política del Gobierno ante el caso venezolano podrían trasladarse a los recintos de ambas cámaras legislativas.
Voceros de Juntos por el Cambio dijeron que seguirán de cerca la crisis y no descartaron impulsar un pronunciamiento del Parlamento en una próxima sesión. (La Nación)
