Sostuvo que están tranquilos y que hay muchas especulaciones en torno a las negociaciones.
Mientras que en el ministerio de Economía evalúan suspender el roadshow internacional y realizar a cambio teleconferencias para explicarles a los acreedores los detalles -aún desconocidos- de la reestructuración de la deuda, desde la Casa Rosada admitieron que el cronograma que se había planteado para llegar al 31 de marzo con la renegociación resuelta podría demorarse.
Lo dijo el propio Alberto Fernández este miércoles. “Estamos avanzando bien. Nosotros tenemos un cronograma que puede sufrir alguna alteración, pero las cosas están funcionando de acuerdo a lo que habíamos programado”, sostuvo el Presidente, en declaraciones a FM Delta.
El mandatario insistió: “Ahora tenemos que esperar un poquito. Ya empezamos las rondas de discusión con los bonistas”. Fernández aseguró que todo lo que se está diciendo sobre la reestructuración son especulaciones. “Nosotros estamos muy tranquilos. El plan se está cumpliendo, aunque puede sufrir alguna alteración de fechas. Pero estamos bien”.
El Presidente sostuvo que “en abril había una serie de vencimientos, ahora también es cierto que sobre esos vencimientos podemos poner una prórroga de 30 días. Nos fijamos el 31 de marzo para darnos tiempo por si el cronograma se demoraba en algún momento, pero estamos muy tranquilos”.
Según el cronograma que había presentado el ministro Martín Guzmán, durante la segunda semana de marzo se iba a lanzar la oferta y entre esta semana y la tercera se realizarían las reuniones informativas sobre la oferta (roadshow).
Fernández reiteró que la deuda así como estaba era insostenible y que “no lo podíamos pagar a costa de ajustes”. Y recordó que eso fue lo que dijo el FMI, “que es como una suerte de gran auditor de las cuentas nacionales para el mundo financiero. Ahora estamos trabajando con el Fondo para ver en qué condiciones la Argentina puede pagar su deuda”. (Clarín)
