El gobernador Sáenz intenta refinanciar $9600 millones; La Rioja, Chubut y Buenos Aires también pretenden renegociar sus vencimientos; los gobernadores buscan además un acuerdo con Anses
Por: Gabriela Origlia
Salta se sumó al grupo de provincias que buscan refinanciar su deuda para poder afrontar un año que se presenta muy complejo. Roberto Dib, ministro de Economía del gobernador Gustavo Sáenz, confirmó a LA NACION que buscará refinanciar una deuda de $9600 millones, incluyendo los montos en pesos y en dólares. “Necesitamos hacer esto para poder atender una situación socioeconómica muy dura, en el marco de una recesión”, indicó.
Chubut también integra el lote de provincias urgidas por reperfilar sus deudas: con casi 80 millones de dólares en vencimientos para lo que queda del año, el gobernador Mariano Arcioni debe cancelar esta semana $1108 millones de intereses por letras del Tesoro.
La Rioja, que el 24 de febrero no pagó un vencimiento de US$14 millones de un cupón de intereses de una deuda de US$300 millones que emitió en 2017, ya negocia contra reloj para alcanzar un acuerdo con sus acreedores. A fines de este mes se cumplen los 30 días con que contaba para no caer en default.
Salta no incumplió ningún pago: lo que busca la provincia -dijo Dib- es acordar con los tenedores de bonos y con el Estado nacional para prorrogar plazos. El ministro se reunió la semana pasada con autoridades de la Anses para intentar una refinanciación, pero sin lograr una acuerdo “todavía”, según indicó. “Estamos en conversaciones. Si bien no es determinante, la deuda con la Anses es una porción interesante del total”, describió.
La refinanciación de las deudas provinciales con la Anses fue un acuerdo que la UCR selló con el Gobierno, a cambio de votos en el Congreso para aprobar la emergencia económica que necesitaba Alberto Fernández. El acuerdo fue impulsado por los gobernadores radicales con deudas con la Anses. Mendoza, por caso, tiene un vencimiento con la Anses de $1200 millones en agosto, además de otros $3500 millones con el Banco Nación. En ninguno de los dos casos hubo avances en las conversaciones. A los gobernadores peronistas también les interesa llegar a un acuerdo para refinanciar sus deudas con la Anses, más ahora que al contexto recesivo se sumará el impacto del coronavirus en la actividad, la recaudación y los ingresos de la coparticipación. El stock total de las deudas provinciales es de $120.000 millones.
Desde la Anses insisten en que no hay una decisión tomada y que ahora hay otras prioridades, aunque subrayan que harán lo posible para que los pasivos subnacionales sean “sustentables”. Alejandro Vanoli, titular de la Anses, indicó que el Gobierno busca ayudar a las provincias, pero advirtió: “No se puede vaciar aún más el Fondo de Garantía de Sustentabilidad”.
Las estrategias provinciales
La ciudad de Río Cuarto (Córdoba) fue la primera en hacer un reperfilamiento de su deuda después de que la Casa Rosada -en la gestión de Mauricio Macri- anunciara uno a nivel nacional. Chubut está buscando autorización legislativa para hacerlo. El intendente de Córdoba, Martín Llaryora, anunció que buscará renegociar.
En Buenos Aires, Axel Kicillof terminó pagando a los bonistas ante la imposibilidad de reunir el 75% de apoyos para redefinir pagos. Pero el gobernador kirchnerista sí logró que la Anses le refinancie una deuda de 250 millones de dólares.
Los vencimientos de Salta suman US$40 millones: dos títulos por $380 millones y $46 millones entre capital e intereses. “Estamos juntándonos con los acreedores, entre los que hay algunas empresas privadas, para empezar a conversar. Hay vencimientos trimestrales y queremos resolver la situación. Tenemos buena calificación y queremos mantenerla”, dijo Dib.
En lo que va de este año, la ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Salta, Entre Ríos, Chaco, Formosa y Neuquén pagaron los vencimientos de intereses en tiempo y forma. Hacia adelante, la estrategia puede cambiar, como intenta Salta. Hasta antes de que el coronavirus y la caída del petróleo arrasaran con los mercados, los distritos mejor parados por las cotizaciones de sus bonos en el mercado eran la ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Mendoza y Chubut (por regalías de hidrocarburos). Más deteriorados se presentaban los papeles de Buenos Aires, La Rioja, Chaco, Jujuy y Río Negro. Los analistas toman esos datos para interpretar lo que esperan los acreedores.
Un reporte de Consultatio sobre el ranking crediticio provincial del primer trimestre de este año muestran a CABA, Santa Fe y Neuquén manteniéndose igual que al cierre del año pasado. Córdoba cayó dos puestos (porque afronta fuertes vencimientos en 2021) y Buenos Aires bajó marcadamente. Todos los distritos, sin distinción, enfrentan problemas de liquidez, que en algunos casos es más apremiante que en otros. Además, por tamaño y situación fiscal, hay diferencias entre las posibilidades que tendrán algunas provincias para rollear (postergar) una parte de los servicios de deuda. (La Nación)
