Fue la mayor caída para ese mes desde 2002. Esperan que en abril la baja sea aún mayor. Pese a la prohibición, aumentan los despidos.
Durante marzo, según la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) del Ministerio de Trabajo, el nivel de empleo asalariado registrado del sector privado tuvo una disminución del 0,5%, la mayor caída mensual para un mes de marzo desde 2002.
Representa unos 30.000 empleos privados en relación de dependencia menos, sin considerar la caída laboral entre los monotributistas y autónomos. El Informe laboral anticipa que en abril la pérdida de empleos sería muy superior.
Con relación a un año atrás, la caída es del 3%, lo que sumaría 180.000 asalariados privados formales menos.
La tasa de despidos, que venía mostrando un descenso en los últimos meses, tuvo en marzo un aumento del 0,6 %, a pesar de las prohibiciones de despidos sin causa. En tanto la tasa de suspensiones fue del 0,8%, aunque pegó un salto en abril por los acuerdos en varios gremios. “Producto del aislamiento social, es esperable un aumento en el próximo mes”, dice el Informe.
A su vez, “las expectativas netas de aumento de personal, reflejadas en la diferencia entre la proporción de empresas que esperan aumentar sus dotaciones y aquellas que esperan disminuirlas, resultaron altamente negativas, ubicándose en el valor más bajo de la serie (-6,5%)”.
La EIL abarca a empresas privadas formales de más de 10 trabajadores por lo que se descuenta que la caída del empleo es superior porque no toma en cuenta el achique de personal entre las empresas más pequeñas. La EIL abarca al 52,4% del total del universo de asalariados privados registrados del total país, que suman unos 6 millones.
“Esta es la mayor contracción mensual de los meses de marzo desde el año 2002. En marzo de 2009, con la crisis internacional como escenario se registró una caída similar, apenas menor a la actual. Este comportamiento se verifica en el mes en que se implementa el aislamiento social preventivo y obligatorio declarado en el marco de la pandemia del COVID19 oficializado el 20 de marzo, aunque algunos sectores ya habían restringido o suspendido sus actividades unos días antes. No cabe duda que esto impactó en las decisiones empresarias de contratación de personal”, dice el Informe laboral que detalla a la construcción, el comercio, hoteles y restaurantes y la industria como los más afectados.
El sector con mayor caída fue la construcción, que tuvo una reducción del 3,1% en relación al mes anterior y del 19.7% en relación a marzo de 2019, precisa el Informe. El comercio, que mostraba cierta mejora en los últimos meses, también se vio fuertemente afectado con un descenso de 0,8% mensual y de 3,1% en términos interanuales. Por último, la industria manufacturera, que en los últimos tres meses había dejado de caer, volvió a presentar una variación negativa de 0,5% mensual y 3,1% en términos anuales. Sólo los servicios comunales, que incluyen salud y educación, tuvieron un aumento del empleo registrado respecto del mes anterior (0,2%).
En las empresas de entre 10 y 49 ocupados y en las de entre 50 y 199 ocupados, es donde se registraron las caídas más pronunciadas (-0,6% y -0,7% respectivamente).
Por regiones, el empleo en el Gran Buenos Aires mostró una variación negativa mensual de 0,4%, mientras que los aglomerados del interior, en su conjunto, presentaron una reducción de 0,6%.
En términos interanuales, en el GBA alcanzó una variación negativa del 2,9% y 3% en los aglomerados del interior. “En relación a los aglomerados del interior relevados por la EIL, en marzo de 2020 se observan caídas en el empleo en la mayoría de ellos. Las más pronunciadas se registraron en Gran Mar del Plata (-2,2%) que vio adelantar el fin de la temporada estival por motivo del aislamiento obligatorio, Gran Jujuy (-1,6%), Gran Bahía Blanca (-1,2%) y Gran Mendoza (-1,1%), donde ya había finalizado mayoritariamente la cosecha de la vid en el mes de febrero. En términos interanuales, todos los aglomerados presentaron valores negativos”, concluye el Informe. (Clarín)
