- Publicidad -

Donald Trump promete enviar agentes federales a ciudades gobernadas por demócratas y escala la furia

Donald Trump se muestra triunfante mientras espera su absolución en el juicio político

Tras las duras críticas por la actuación de las fuerzas de seguridad en las protestas en Portland, días atrás, el presidente de Estados Unidos redobla la apuesta.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prometió enviar a fuerzas de seguridad federales a grandes ciudades gobernadas por la oposición demócrata, como Chicago y Nueva York, tras el controvertido despliegue de esos agentes en Portland, Oregon, para controlar una serie de protestas contra el racismo. La polémica y la dura respuesta de varios gobernadores y alcaldes no tardó en llegar.

El anuncio de Trump llega luego de que el estado de Oregon demandara, este fin de semana, a varias agencias del gobierno de Estados Unidos por “violar los derechos civiles” de los manifestantes en Portland, mientras continuaban las protestas contra el racismo en esa ciudad.

En una demanda difundida este domingo por varios medios y presentada a última hora del viernes ante un tribunal federal, la fiscal general de ese estado del noroeste de EE.UU., Ellen Rosenblum, exigió que el gobierno federal detenga sus polémicas tácticas para hacer frente a las protestas en Portland.

Pero el jefe de la Casa Blanca, lejos de escuchar los reclamos, defendió el despliegue de las fuerzas de seguridad.

“Vamos a tener más fuerzas de seguridad federales. En Portland han hecho un trabajo fantástico”, declaró el presidente a la prensa el lunes, al margen de un encuentro con congresistas en la Casa Blanca. “En tres días han puesto a un montón de anarquistas en la cárcel”, agregó.

Agentes federales fueron desplegados la semana pasada en esa ciudad de Oregon para detener protestas contra la violencia policial y el racismo, marcadas por episodios violentos.

Trump se refirió a un incremento de la violencia en Chicago y Nueva York en particular tras el aumento de los tiroteos en las últimas semanas. En el caso de Nueva York responsabilizó a las autoridades municipales y estatales -demócratas- por limitar la respuesta de la Policía.

“Voy a hacer algo porque no vamos a permitir que Nueva York, Chicago, Filadelfia, Detroit, Baltimore y ciudades así, como Oakland, sean un enredo. No vamos a permitir que pase en nuestro país”, remarcó el mandatario, y acusó a los demócratas que dirigen esas ciudades de ser miembros de la “izquierda radical”.

Chicago recibirá 150 agentes federales de refuerzo esta misma semana, según confirmó el portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, en declaraciones a Fox News.

Trump lleva semanas amenazando con la intervención de fuerzas federales tras las multitudinarias protestas y manifestaciones por la muerte del afroamericano George Floyd ​el 25 de mayo durante una detención policial, pero finalmente fueron enviados a Portland en una especie de “experimento” para contrarrestar la acción de “anarquistas”.

Las imágenes de fuerzas paramilitares en el centro de la ciudad llevándose a manifestantes en vehículos sin indicativos hizo saltar todas las alarmas políticas y personalidades de todos los signos advirtieron que se trata de imágenes propias de una “república bananera”.

Las autoridades locales, demócratas, pidieron la salida de esas fuerzas federales al considerar que empeoran la situación en lugar de resolver los problemas.

Trump, que apuesta por la firmeza ante las protestas para lograr un segundo mandato en las presidenciales del 3 de noviembre, acusa a las autoridades de Portland de laxismo y promete extender la misma receta a otras ciudades.

El presidente republicano dijo que la situación de Chicago, donde los tiroteos aumentaron en las últimas semanas, “es peor que en Afganistán”, un país devastado por décadas de guerra.

Según el mandatario, si su rival demócrata para las presidenciales, Joe Biden, llega a la Casa Blanca, esa situación se extenderá al conjunto de Estados Unidos. “¡El país iría al infierno!”, lanzó.

Gretchen Whitmer, la gobernadora de Michigan, donde se sitúa Detroit, una de las ciudades con mayor población afroamericana en el país, denunció “una retórica odiosa” por parte del mandatario.

“No hay ningún motivo para que el presidente envíe tropas federales en una ciudad donde la gente pide reformas pacífica y respetuosamente”, dijo la gobernadora en un comunicado.

Desde la muerte de  Floyd, un ciudadano negro asfixiado por un policía blanco el 25 de mayo en Minneapolis, tras ser detenido por el supuesto intento de pagar con un billete falso en un supermercado, Estados Unidos ha vivido una ola de protestas sin precedentes desde el movimiento de lucha por los derechos cívicos de los años 1960.

Aunque la movilización ha ido disminuyendo, varias ciudades siguen siendo escenario de manifestaciones esporádicas, donde en ocasiones se han producido disturbios.

Los alcaldes de varias ciudades de Estados Unidos, incluidos los de Portland y Chicago, rechazaron de plano el despliegue de las fuerzas enviadas por Trump y llamaron al gobierno federal a retirarlas de inmediato y detener su “despliegue unilateral” en las ciudades.

En la carta publicada en Twitter, Ted Wheeler, alcalde de Portland, junto con sus cinco homólogos de Chicago, Seattle, Atlanta, Washington D.C. y Kansas City, dijo que la intervención federal unilateral es inaceptable y “viola las protecciones constitucionales fundamentales y los principios del federalismo”.

“En Portland, sus acciones han provocado la escalada de los acontecimientos y aumentado el riesgo de violencia contra civiles y agentes de la ley locales”, denunció el alcalde, al enumerar los actos violentos de las tropas, incluidos disparos, contra las protestas pacíficas en la ciudad.

En junio, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva para proteger los monumentos y estatuas, que en muchas ciudades fueron atacadas en el marco de las protestas contra el racismo, así como para combatir las actividades criminales.

A medida que Estados Unidos se enfrenta a desafíos sin precedentes, como la pandemia de coronavirus​, la devastación económica y el movimiento pro derechos civiles, los alcaldes “necesitan la ayuda de nuestro gobierno federal” y no acciones irresponsables que amenazan la seguridad y el progreso en la sociedad, agrega la carta.

En una transmisión de la cadena CNN el domingo, Wheeler repitió su llamada a la retirada de las tropas federales. “No las queremos aquí. No hemos pedido que estén aquí. De hecho, queremos que se vayan”, dijo.

Por su parte, el senador por Oregon Jeff Merkley anunció este lunes un proyecto de ley para evitar que Trump utilice a fuerzas federales en los estados y ciudades del país “como policía militar secreta”, según explicó en Twitter.

“Lo que está haciendo en mi estado es propio de dictaduras y pesadillas y déjenme ser claro: si se sale con la suya, lo hará en otro lugar”, denunció el senador. (Clarín)

spot_img

Suscribité al Newsletter

Más Noticias

- Publicidad -spot_img

Más Noticias

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí