De acuerdo al Decreto Nº 0982 del 21 de agosto de 2020, emitido por el Poder Ejecutivo provincial, Alicia Kirchner dispuso otorgar una asignación extraordinaria de carácter no remunerativo a favor de personal de la salud y voluntarios que presten servicios de manera efectiva en los distintos ámbitos o centros relacionados con el Hospital Regional de Río Gallegos – localidad que se encuentra en ASPO- afectados específicamente a la contención del virus SARS-CO V-2, tengan o rio relación de dependencia con el sector público provincial”, dice el documento que OPI publica al pie.
En el Artículo 2º establece que dicha asignación “consistirá en una suma de pesos sujeta a las variables de riesgo, exposición y función conforme los niveles I, II, III y IV establecidas en el ANEXO I del presente instrumento” y en el Artículo 3º indica que “la asignación será percibida de conformidad al detalle que surge de la nómina de personal y niveles asignados en el Anexo II”, expresando el listado en una planilla anexa.
En dicha planilla expresa que según los niveles de riesgos, exposición y funciones se detallan cuatro niveles correspondiendo al Nivel I $ 25.000,00; Nivel II $ 17.000,00; Nivel III $ 10.000,00 y Nivel IV $ 7.000,00.
Consultado personal de la salud en hospitales del interior provincial se sintieron “sorprendidos” y a la espera de recibir una medida similar, por cuanto fuera del HRRG, la realidad es igual o más grave de parte del personal sanitario asignado al combate de la pandemia. “No creemos que la gobernadora nos discrimine o piense que en el interior el personal de salud estamos menos expuestos que en el nosocomio de Río Gallegos”, dijeron desde el Hospital Pedro Tardivo.
Este decreto ha comenzado a ser analizado en hospitales de cada localidad y muchos han coincidido que la gobernadora se vio en la necesidad de firmarlo, ante el malestar creciente que existe en el Hospital Regional de Río Gallegos, especialmente por el enfrentamiento del Director y las autoridades del Ministerio, con parte de los profesionales y auxiliares de la salud, que reclaman medios, pago y reconocimiento por una labor sobrecargada, mal paga y peor organizada. Otros miran a esta capital con cierto prejuicio, pensando que el gobierno está cometiendo un incalificable acto de discriminación entre el personal de la salud. (Agencia OPI Santa Cruz)
