Por: Francisco Jueguen
En la jornada en la que se conmemora el Día de la Industria, el presidente Alberto Fernández, y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunciaron una serie de medidas frente a empresarios industriales con el objetivo de impulsar la recuperación del sistema productivo argentino, golpeado por la recesión y la pandemia, que incluyen créditos blandos por $455.000 millones, un plan de desarrollo de proveedores, industria 4.0 y parques industriales.
El Presidente, el último en tomar la palabra en la fábrica de Sinteplast en Ezeiza, envió un mensaje a la mamá de Facundo Astudillo Castro -hoy se confirmó que el cuerpo hallado era el del joven- y cuestionó duramente a la oposición tras la polémica de ayer en la Cámara de Diputados. Del encuentro participaron el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados y Kulfas.
“Quiero decirle a Cristina que cuenta conmigo y con Axel y que los dos estamos comprometidos en saber lo que pasó. Todo nuestro cariño y nuestra solidaridad, estamos con vos Cristina, Axel y yo”, enfatizó el Presidente y dijo: “No dudes que estamos a tu lado, los dos queremos saber qué fue lo que pasó. Fue un amanecer ingrato para mí pero bueno, tenemos que salir adelante”.
Sobre la oposición y el escándalo en Diputados criticó: “Ayer, lo único que lograron es que los que peor la pasan con la pandemia, que son aquellos que viven del turismo, hoy estén un poco peor porque el Congreso no pudo sesionar.”
Las iniciativas para el sector productivo se desplegaron en la celebración organizada por la Unión Industrial Argentina (UIA) presidida por Miguel Acevedo. Justamente, el directivo de Aceitera General Deheza (AGD) fue el primero en tomar la palabra. Acevedo celebró la moratoria impositiva y previsional aprobada semanas atrás, reclamó la eliminación de “impuestos distorsivos” en la reforma tributaria que trabaja el Gobierno, criticó la ley de teletrabajo aprobada en el Congreso y pidió trabajar en un nuevo “ecosistema laboral” que promueva la productividad, instó a más financiamiento productivo para la industria, y también un proyecto que promueva las exportaciones. Además, Acevedo reclamó “consensos” para evitar la profundización de las actuales “urgencias” y la generación de una “marco previsible”.
Kulfas detalló algunas de las medidas pensadas para la industria en base a cuatro ejes: financiamiento productivo, desarrollo de proveedores, industria 4.0 y programa nacional de desarrollo de parques nacionales. Sobre el financiamiento, dividió los anuncios en dos. El primero está relacionado a un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por US$500 millones. Se buscarán dar $248.000 millones en diferentes herramientas a cerca de 87.000 pymes. Habrá créditos para capital de trabajo, refinanciar pasivos, e inversiones a tasas subsidiadas entre 10% y 24%. Por otro lado, se dará un nuevo impulso al Fogar para apalancar financiamiento. En segundo lugar, se otorgará financiamiento para el “cambio estructural” con el objetivo de “generar inversiones” y divisas. Kulfas dijo que se instrumentará con el Banco Central (BCRA) en los próximos días. Precisó que será una línea de crédito destinada a inversiones de largo plazo por $200.000 millones para procesos productivos de “alto impacto” en ahorro de divisas y exportaciones con plazos de 10 años y tasas debajo de la tasa de interés Badlar que publica la entidad que preside Miguel Pesce.
El ministro de Desarrollo Productivo mencionó además la idea oficial de crear un sistema de Banca de Desarrollo que tenga el objetivo final de coordinar la oferta de financiamiento para incrementar el impacto de los beneficios y la profundidad del crédito con actuación de provincias y el sector privado.
Como segundo eje, se trabajará en el desarrollo de proveedores industriales y tecnológicos. Habrá apoyo de $1400 millones a empresas nacionales que sean o aspiren a ser proveedoras en sectores estratégicos y de alto impulso como el petróleo y gas, la minería, automotriz, industria ferroviaria y naval. Las pymes recibirán Aportes no Reembolsables (ANR) por parte del Ministerio de Desarrollo Productivo por hasta un 70% del proyecto, o la bonificación de hasta 10 puntos de tasa en el caso de empresas que inviertan en bienes de capital, certificaciones o desarrollo de productos.
El Gobierno anunció, además, lanzará en breve el Plan de Transformación Digital PyME y Plataforma Industria Argentina 4.0 con financiamiento público por $2500 millones a tasas bonificadas e incentivos fiscales para proyectos de adopción de tecnologías 4.0.
Por último, Kulfas presentó el Programa Nacional para el Desarrollo de Parques Industriales para el que se invertirán más de $3000 millones de aportes y financiamiento en los próximos doce meses. El ministro detalló que en la primera fase del plan se ofrecerá apoyo a 48 parques industriales y tecnológicos en todo el país. Como objetivo, se buscará asistir y desarrollar 300 parques industriales y tecnológicos en el período 2020-2023.
“La economía fundada en la especulación financiera no sirve. En el capitalismo que tenemos que construir la industria es central, con capital, trabajo, producción y consumo”, dijo el Presidente en su discurso, que criticó el flujo de importaciones y la “especulación” financiera la gestión de Mauricio Macri. Luego volvió a celebrar el acuerdo cerrado con los bonistas.
“Promover la producción, el trabajo y las exportaciones para que entren divisas, ayudar a los que invierten y trabajan, y nunca olvidar a los que peor están son las formas para que la sociedad progrese”, estimó el Presidente y destacó además que “un país sin industria es un país dependiente, sin trabajo y sin futuro en los tiempos que vivimos”. Criticó al capitalismo financiero prepandemia y rescató al fordismo.
El Presidente -que criticó elípticamente el incumplimiento de las metas de la gestión económica que se autoimpuso Cambiemos- volvió a prometer que a mediados de septiembre se va a conocer el presupuesto 2021. Fernández remarca esta idea en sus últimos discursos públicos ante el reclamo desde varios sectores económicos y políticos que piden que presente un plan.
“Van a ver claramente la mirada que tiene el Gobierno; de lo que creemos que se puede hacer, de cuáles son los límites fiscales que nos estamos poniendo para que el deterioro fiscal vaya cediendo. Van a conocer ahí la política monetaria y cambiaria de la Argentina. Ahí van a tener las reglas que necesitan”, dijo el Presidente, que prometió que ese proyecto “no es producto de la improvisación”. No hubo detalles de cómo se financiarán las medidas anunciadas hoy.
La semana pasada los representantes regionales y sectoriales de la UIA abordaron la situación de la actividad industrial y su evolución desde el inicio de la pandemia. Destacaron “las dificultades que atraviesan los diferentes sectores para sostener el empleo con caída de las ventas y retracción de la actividad, los problemas para acceder al mercado de divisas, las restricciones en materia de financiamiento destinado al sector y los problemas vinculados con la cadena de pagos”, entre otros inconvenientes que afectan al tejido productivo.
En esa misma reunión se presentaron los resultados de la cuarta encuesta que relevó los efectos de la pandemia. Los datos registrados por el Centro de Estudios UIA mostraron que un 32% de los establecimientos industriales se encontraba produciendo al mismo nivel o con incrementos respecto a la pre-pandemia. Mientras que un 6% de las empresas continuaba con su producción paralizada y un 62% de industrias operaba con bajas mayores al 25%. La industria mostró mejoras desde abril pasado, cuando la economía tuvo su mayor desplome en la historia producto de la cuarentena más restrictiva. Desde entonces, según el Indec, mayo y junio mostraron un rebote (de 12,5% y 13,8%, respectivamente). Sin embargo, el nivel de la actividad fabril se mantiene todavía por debajo del que mostraba antes de iniciada la pandemia. Se trata de un nivel bajo que arrastraba dos años de recesión durante la gestión de Mauricio Macri y años de estancamiento previos, según los datos oficiales. El Índice de Producción Industrial Manufacturero mostró en junio una caída de 6,6%.
El problema que se le presenta a la actividad manufacturera de cara el futuro tiene que ver con el cuello de botella por la falta de dólares (necesita divisas para producir en el mercado interno y también para exportar), hecho que podría poner el freno de la mano a la recuperación que mostraría el sector una vez que la pandemia esté controlada. Las dudas privadas acerca de cómo será el rebote de la economía crecen: incluso varios datos, como el indicador de la actividad económica de la consultora de Ferreres de julio pasado ya mostró un freno de medio punto en el mismo. (La Nación)