(Por Rubén Lasagno) – Victoria Donda, la funcionaria K que tiene “varias convicciones” por si las que muestra no convencen, no se diferencia de la media kirchnerista, pero si lo estiramos un poco llegamos a ver que es casi un modus operandi de los funcionarios políticos de los sucesivos gobiernos argentinos, quienes una vez asumidos sin la voluntad de ningún argentino, más que aquellos que gobiernan, se transforman en lo que realmente son: usurpadores de cargos, ineptos, autoritarios y corruptos.
Sintéticamente Donda, titular del INADI (nada menos) lo que hizo fue tener en negro a una empleada doméstica por 10 de los 14 años que trabajó en su casa y cuando Arminda Banda Oxa que así se llama decidió jubilarse, ante el reclamo de la mujer de 62 años por los aportes no realizados y la falta de pago del salario en los meses de pandemia, comenzó una disputa que se hizo pública y terminó por desnudar un nuevo caso de “corrupción natural”, que si el gobierno tuviera un poco de vergüenza, debería pedirle la renuncia a Victoria Donda, precisamente como titular del INADI, un organismo que debería hacer del combate a la discriminación y la marginalidad humana el ABC de su existencia. No es éste el caso.
Donda le ofreció a la señora que trabajaba en su casa y le reclamó por los aportes no realizados durante 10 años, un Plan Social de 10 mil pesos y un contrato en el INADI para ella y su hermana. Es decir, Donda buscó licuar su responsabilidad particular, regalando plata del Estado, una acción típica de los políticos corruptos argentinos; de estos ejemplos hay miles, solo que muy de vez en cuando conocemos alguno.
Lo peor es que cuando estos casos aparecen, nunca pasa nada. El gobierno no los echa, síno los encubre y los funcionarios no renuncian, porque no está dentro de sus términos morales esta actitud de dignidad, que para ellos es “debilidad”, aún cuando se descubrió que son corruptos, explotadores, mentirosos y falsos.
Dos gobiernos y un calco de ilicitud
El día 12 de enero de 2018, OPI Santa Cruz hizo público en exclusiva un informe donde se inicaba que la señora Sandra Viviana Heredia, quien se desempeñó seis caños desde el año 2012 y hasta el 8 de enero de 2018 como casera y asistente personal del entonces Ministro de Trabajo de la Nación Jorge Triaca, funcionario de Mauricio Macri, había sido maltratada, insultada y despedida por el funcionario nacional sin preaviso como marca la ley y como en el caso de Donda, le había dado un trabajo como delegada interventora del Ministerio de Triacca en el SOMU.
El escándalo que se armó alrededor del funcionario luego de la publicación de OPI donde inclusive dimos a conocer el audio del insulto de Triacca a Heredia y la primera entrevista que se le hizo a la ex ama de llaves del entonces funcionario de Trabajo (material que el lector puede releer en esta edición), hizo que desde todos los sectores y especialmente desde el Frente para la Victoria, se pidiera la renuncia del Ministro, invocando la evidente corrupción en la que incurría nada menos que el responsable de mediar en conflictos laborales, dictar normas y ejecutar acciones para poner justicia entre empleadores y trabajadores.
Las voces que se levantaron en contra de Triacca por su actitud y del presidente Macri por sostenerlo, eran lógicas, valorables y el conjunto de la sociedad pensaba alineado con la idea de que un funcionario que había cometido tal ilícito, no podía seguir siéndolo.
Recién el 12 o 13 de noviembre de ese año 2018, el presidente Mauricio Macri lo hizo renunciar a Triacca al cargo, por cuanto, como lo indicamos en varias notas de ese momento, la credibilidad y la autoridad como Ministro de Trabajo, se habían destruido con una actitud tan mezquina, discriminadora y delictual, como la que había producido con su empleada de años.
Como sucedió con Triacca, el actual gobierno de Alberto Fernández, tampoco le ha solicitado la renuncia a Victoria Donda y como el FPV se desgarraba las vestiduras ante la mala acción del Ministro M, hoy Juntos por el Cambio pide a voz en cuello que aparten a Donda del INADI y como ellos entonces, hoy el kirchnerismo en una actitud de total complicidad, la protege, la exculpa y explica con relatos insólitos a una funcionaria tan corrupta como aquel Triacca del 2018.
No hay diferencias cuando se trata del poder y más aún cuando quienes lo detentan son los principales actores de esta abominable forma de usar al Estado en beneficio propio.
Todos, sin excepción, dicen una cosa y en privado hacen otra. Triacca y Donda son ejemplos claros, pero de éstos hay de a miles en nación, provincias y municipios. Todo se reduce a la falta de justicia y a la impunidad con que cuentan quienes asumen el poder en los distintos niveles. Y en esto, el macrismo, el kirchnerismo, peronismo o como se llame, son muy similares tanto en la implementación, como en la reacción posterior, donde queda de manifiesto la falta de compromiso con la verdad y la sociedad que los puso allí. (Agencia OPI Santa Cruz)
La mediocrodad del gabinete de cientificos nos muestra la baja calidad intelectual de quien dice se el jefe del gabinete de cientificos, es la mediocridad, la ignorancia, y lo peor ante la falta de idoneidad presidencial buscan culpables por todos lados,” culpar a los predecesores nos muestra la mediocridad intelectual de los que hoy dicen ser el gobierno que nos pondra de pie,si de pie en mas miseria,hambre,corrupcion,son lo mas bajo en calidad humana, son delincuentes,pero esto no es privativo de este gobierno,son todos unos crapulas,pero este es lo peor en lo eyico,lo digno y lo moral