Por: Candela Ini
Según publica La Nación Pocos días después de asumir al frente del Ministerio de Seguridad, la ministra Sabina Frederic había dicho que se haría una revisión del peritaje elaborado por la Gendarmería Nacional que había determinado que al fiscal Alberto Nisman lo mataron dos personas.
En el marco de un nuevo aniversario por el presunto homicidio del fiscal que investigaba la causa AMIA, el Ministerio de Seguridad dijo que la Gendarmería no cumplió con el protocolo vigente, que, según aclararon desde esa cartera, “estaba desactualizado”. El organismo avanza por estos días en un protocolo similar para las cuatro fuerzas.
Si bien esa resolución aún no fue publicada -porque el informe no está terminado-, el Ministerio dejó trascender esta información en los últimos días, en los que se recordó la muerte de Nisman y las circunstancias del caso. Y advirtió que en el área de pericias de la Gendarmería hay una “necesidad imperiosa” de profesionalización.
Los resultados del análisis efectuado por la cartera de Seguridad no serán presentados a la justicia federal ni tendrán una vinculación puntual con la causa en la que se investigan los hechos, a cargo del fiscal Eduardo Taiano y el juez Julián Ercolini, según pudo saber LA NACION. En ese expediente se dio por probado que Nisman murió asesinado por dos personas, pero no hay un móvil ni un autor investigados por el hecho.
El técnico informático Diego Lagomarsino está procesado en esa causa como partícipe necesario de la muerte, además de los custodios que trabajaban para Nisman, por incumplimiento de sus deberes.
Las conclusiones del peritaje de 2017
El informe realizado por 24 expertos de Gendarmería había asegurado en 2017 que a Nisman lo mataron dos personas. Según ese peritaje, lo golpearon y lo redujeron en su departamento haciéndole ingerir ketamina antes de que le dispararan. Uno lo sostenía por detrás y, con una de las rodillas tocando el piso mientras la otra persona llevaba el arma hacia su cabeza, le dispararon. El tirador dejó el arma en el piso, detrás del cuello del fiscal, y se retiró del baño para no pisar la sangre. Luego su cómplice, que lo tenía tomado de las axilas, lo depositó en el piso y lo acomodó, concluyeron tras analizar las manchas de sangre.
Las conclusiones de ese análisis discreparon con los resultados de una junta criminalística anterior, de la Policía Federal, que en junio de 2015 había dicho que Nisman estaba solo y de pie cuando se disparó de frente al espejo. Pero tanto el fiscal Taiano como el juez Julián Ercolini sostuvieron que no había contradicción, sino que Gendarmería, con una mirada integral, había llegado más lejos.
El informe de la cartera conducida por Frederic subraya que, a pesar de que el análisis de los hechos debe ser realizado en la escena, la Gendarmería Nacional montó un escenario que replicó el baño del departamento de Nisman, en el edificio Centinela, y que así incumplió las normas.
“Respecto de la pericia de Nisman se concluyó que existía un protocolo para la actuación de las fuerzas en la escena del crimen y su análisis, y que la GNA no había observado los criterios y pautas resultantes del mismo”, concluyó el análisis del Ministerio de Seguridad.
“Lo vamos a revisar en colaboración con la Justicia. Se montó un escenario, se replicó la escena del baño del departamento de Nisman, y eso está dentro del edificio Centinela. Vamos a intervenir, pero no en este momento, vamos a dejar pasar un tiempito; primero tenemos que hacer modificaciones en la jefatura (de la fuerza)”, había dicho Frederic el año pasado.
El informe de la Gendarmería, sobre la base del cual la Justicia determinó que se trató de un homicidio, había sido fuertemente reivindicado por la exministra de Seguridad y actual presidenta de Pro Patricia Bullrich.
“Una pericia que determina cómo ocurrió un hecho sin haber estado nunca en el lugar de los hechos, yo nunca vi una cosa igual”, había dicho el presidente Alberto Fernández cuando asumió. (La Nación)
