Según publica La Nación Los equipos jurídicos de la Casa Rosada y la Procuración del Tesoro trabajan en el escrito que llevarán ante el máximo tribunal; los argumentos sanitarios, eje de la respuesta.
Por: Santiago Dapelo
El Gobierno trabaja contra reloj en la presentación que hará ante la Corte Suprema de Justicia para defender el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó el presidente Alberto Fernández la última semana, en el que se suspende la presencialidad en los colegios por dos semanas.
Según confirmaron fuentes oficiales, los equipos jurídicos de la Casa Rosada y de la Procuración del Tesoro, a cargo de Carlos Zannini, trabajan de forma mancomunada. El objetivo es presentar el descargo hoy. En la presentación el gobierno nacional dará una respuesta jurídica, pero la argumentación, según explicaron cerca del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, estará focalizada en lo sanitario.
“La decisión es responder rápido, queremos que la Corte tenga todos los elementos para resolverlo cuanto antes”, describieron desde Balcarce 50, donde aún mastican “bronca” contra el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por interponer una acción declarativa de inconstitucionalidad ante la Corte Suprema para garantizar las clases.
En un escenario de enfrentamiento entre la Nación y la Ciudad, el máximo tribunal se declaró competente y avanzó con la medida cautelar que presentó Rodríguez Larreta para suspender el DNU de Alberto Fernández. Según dijo en la resolución, el caso es de “competencia originaria” de la Corte y estableció que la demanda se realizará mediante un “proceso sumarísimo”; es decir, veloz, según está previsto en el Código Procesal Civil y Comercial.
Con el correr de las horas, creció el malestar con Rodríguez Larreta. “Se sobrepasó un límite. Lo sanitario no debería judicializarse”, confió a LA NACION un dirigente con trato cotidiano con el Presidente. El Gobierno y sus principales socios fueron claros: la expansión del virus, según explicaron, amenaza con desbordar el sistema de salud.
Tanto fue así que el gobierno nacional escenificó un fuerte respaldo político de las nuevas restricciones que impuso el jefe del Estado. Ayer, junto al Presidente, hubo cinco gobernadores que criticaron a Rodríguez Larreta y tomaron postura en la pelea por las clases presenciales.
Axel Kicillof (Buenos Aires), Omar Perotti (Santa Fe), Sergio Uñac (San Juan), Alicia Kirchner (Santa Cruz) y Omar Gutiérrez (Neuquén) cuestionaron la decisión del jefe de gobierno porteño por elevar el conflicto a la Corte Suprema. Como publicó LA NACION, los encargados de sumar voluntades y robustecer la imagen presidencial con los mandatarios provinciales fueron el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, y el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis.
“No hagamos política con la pandemia, estamos condenando a argentinos y argentinas. Que se carguen en su conciencia los que actúan de ese modo”, dijo el Presidente en el acto en el Museo del Bicentenario en el que se anunciaron obras de infraestructura para combatir la pandemia y un bono de $6500 pesos por tres meses para el personal de salud.
La crisis sanitaria y el renovado enfrentamiento quebró la relación entre el Presidente y el jefe de gobierno. Así lo aseguraron desde la Casa Rosada y Uspallata, sede del gobierno porteño. “Podrán reunirse, pero la confianza se perdió”, analizó uno de los hombres de trato diario con Alberto Fernández. (La Nación)
