Según publica Clarín Era el gerente artístico del canal estatal. Reemplaza a Eliseo Álvarez, quien renunció la semana pasada. El camporismo impulsaba otro candidato, para tener una “pantalla militante”.
Por: Alejandro Alfie
El Gobierno designó a Leonardo Flores al frente de la TV Pública, en reemplazo de Eliseo Álvarez, quien renunció la semana pasada por problemas de salud, tras el escándalo de los bolsos con $11,4 millones.
El nuevo director ejecutivo del canal estatal era su gerente artístico y había ingresado a principios de 2020, de la mano de Álvarez.
La presidenta de Radio y Televisión Argentina (RTA), Rosario Lufrano, encabezó su acto de asunción en el Estudio 1 de la TV Pública, ante funcionarios y trabajadores del canal.
Lufrano planteó ahí que el objetivo de la actual gestión es la “reconstrucción de los medios públicos” y recuperar “el prestigio de la pantalla” del canal estatal. Además destacó la trayectoria de Flores, que tiene 30 años de experiencia en la Argentina y en el extranjero.
Una fuente del canal aseguró a Clarín que “Leo Flores era la mano derecha de Álvarez en la TV Pública. Pero su último destino antes de ingresar acá le jugó en contra para que asumiera el otro cargo que también tenía Álvarez antes de renunciar”, como vicepresidente de RTA, la empresa estatal que maneja Radio Nacional y la TV Pública.
Es que “Leo” Flores vivió varios años en Miami y fue gerente de Noticias del Canal 41 de esa ciudad, America Tevé, cuya línea editorial para la población hispana anticastrista estadounidense no pasó el filtro de los jóvenes camporistas que se referencian para estos temas en el ministro de Cultura, Tristán Bauer.
De hecho, el Emmy Awards que ganó Flores en 2016 por la investigación periodística “Petare: la tumba del chavismo”, es un alegato contra el gobierno de Nicolás Maduro y en favor de la oposición venezolana que en ese entonces encabezaban Henrique Capriles y Leopoldo López.
El camporismo pretendía que asumiera Martín Bonavetti, quien había ocupado la dirección ejecutiva de la TV Pública durante la gestión de Tristán Bauer en RTA. Pero el secretario de Medios y Comunicación Pública, Francisco “Pancho” Meritello y la titular de RTA, Rosario Lufrano, lograron imponer a Leo Flores como director ejecutivo del canal.
Sin embargo, no lograron designarlo a Flores para que sea el segundo de Lufrano, como vicepresidente de RTA, el otro cargo que tenía Álvarez y que no será ocupado por Flores. “Estamos analizando a quién poner ahí”, dijeron a Clarín fuentes oficiales.
Fuentes cercanas a Bauer aseguraron que “en ningún momento” conversaron con Meritello la posibilidad de designar a Bonavetti en la TV Pública. “Asumió alguien que no tenía nada que ver con Bauer ni con Bonavetti”, quien se desempeña como subsecretario de Gestión de Espacios y Proyectos Especiales, plantearon desde Cultura. Lo mismo dijeron cerca de Meritello.
Pero lo cierto es que la semana pasada hubo fuertes debates en ambos equipos de trabajo sobre quién debía ser el reemplazante de Álvarez. Y el nombre de Bonavetti sonó muy fuerte, ya que había ocupado ese cargo bajo la gestión de Bauer, cuando Cristina Kirchner era Presidenta de la Nación, y la Gerencia de Noticias estaba en manos de La Cámpora y el programa emblema era 6-7-8, donde se denostaba a los dirigentes de la oposición y hasta a periodistas del propio canal, como fue el caso de Juan Miceli.
Meritello y Bauer “conviven en el mismo edificio, se cruzan y reúnen mil veces, pero no hay intención de gestionar la TV Pública. Obviamente que (Bauer) está interesado, como en cualquier otro sector del gobierno. Solo que acá hacemos cosas juntos en contenidos, pero no hay nada más que eso. Por ejemplo, el canal emite algunos especiales de conciertos del Centro Kirchner o de Tecnópolis, como el homenaje a Astor Piazzolla”, aclararon fuentes del Ministerio de Cultura.
Meritello está en el cuarto piso del Centro Cultural Kirchner y Bauer tiene sus oficinas un piso más arriba, así que son habituales sus encuentros para intercambiar ideas.
“La asunción de Leo Flores marca una continuidad en el perfil de la TV Pública, que es un canal de servicios, donde no se hace una militancia oficialista, como se hacía durante la gestión de Bonavetti-Bauer”, plantearon fuentes del canal estatal.
Flores también tendrá que responder ante la Justicia sobre el recorrido que tuvieron los $11,4 millones que se retiraron en bolsos de la TV Pública, cuando Álvarez tenía a su cargo la relación con las diferentes gerencias y los proveedores del canal estatal. El fiscal Gerardo Pollicita planea citar en estos días a los directivos que intervinieron en el retiro de ese dinero y su posterior distribución irregular.
Desde que estalló el escándalo en la TV Pública, hace 40 días, ya se fueron Guillermo Siaira, director de Administración y Finanzas; Diego Pascual, director de Personal; y Ernesto Molinero, gerente de Producción, que tenían contratos con la TV Pública y presentaron sus renuncias, a pedido de Lufrano.
Después de echar a esos funcionarios e intervenir las áreas implicadas, las autoridades les prohibieron el ingreso al canal a Alejandro de la Torre, subdirector de Administración y Finanzas; Ariel Berliner, subgerente de Producción; y Andrea Mendes Guimaraes, jefa de Contabilidad de la TV Pública.
Y la última medida que se conoció, antes de la renuncia de Eliseo Álvarez y la asunción de Leo Flores, fue cuando la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) echó al “auditor militante” de la TV Pública, Rolando Oreiro, en base a una investigación periodística de Clarín. Es que el auditor debía investigar el retiro ilegal de los $11,4 millones, pero había sido designado en forma irregular, ya que había tomado un retiro voluntario como auditor del INCAA, que terminó de cobrar pocos meses antes de asumir en RTA, y había falseado su declaración jurada para ingresar en RTA. (Clarín)
