Según publica Clarín Alberto Fernández exigió más acción a su Gabinete. Este lunes, su equipo se juntó para defender la gestión y apoyar al gobernador tucumano Juan Manzur.
Por: Ignacio Ortelli
Tras el pedido que hizo Alberto Fernández puertas adentro, cuando les pidió a sus ministros que “salgan a defender la gestión” y advirtió que aquel que no lo haga “se va”, el Gobierno puso primera de cara a la campaña. En un acto con eje en la gestión pero que anticipa la estrategia oficial para intentar ganar las Legislativas, cinco miembros del Gabinete se juntaron para apuntalar al gobernador de Tucumán, Juan Manzur, uno de los más cercanos al Presidente, y aprovecharon para cruzar a la oposición.
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, a quien el Presidente nombró como su jefe de campaña, fue el encargado del discurso de cierre por parte de la nutrida tropa de funcionarios nacionales que dispuso la Casa Rosada para el lanzamiento de un plan de obras públicas para 93 comunas rurales del interior de Tucumán.
Aunque la participación de los ministros fue a través de videoconferencia -y la escena se hará habitual en la campaña por la pandemia-, Manzur se aseguró que el acto tuviera ribetes de campaña. Así, unos doscientos dirigentes locales, entre diputados nacionales, legisladores provinciales y jefes comunales, fueron ubicados en el Hipódromo de Tucumán para lograr un marco electoralista.
En ese contexto, los ministros Nicolás Trotta (Educación), Gabriel Katopodis (Obras Públicas), Matías Lammens (Turismo y Deportes) y Eduardo “Wado” de Pedro (Interior) fueron conectándose por Zoom e intercalando discursos con Manzur y su equipo. El tono fue similar de ambos lados: repaso y defensa de la gestión y crítica a Mauricio Macri y a Juntos por el Cambio, una fórmula a la que el Gobierno apostará más allá de la delicada situación social y económica con la que encara la campaña, al cabo de un año y medio de la asunción de Fernández.
El primero fue Trotta, quien cuestionó el “profundo ajuste” y la herencia que recibió del gobierno de Cambiemos y pidió que la Argentina “nunca más transite el proceso de abandono del sistema educativo como en los cuatro años de Macri”.
Sin referencias al cierre de clases presenciales por la pandemia y realzando el aumento en la inversión en infraestructura escolar, Trotta mantuvo el speech de campaña y cerró agradeciéndole a Manzur por ser “uno de los responsables de la unidad que permitió la victoria de Alberto y Cristina” y comprometió al peronismo a no dividirse, “no sólo para el triunfo electoral, sino para garantizar el cambio definitivo y positivo de nuestra sociedad”.
Luego fue el turno de Katopodis, quien pidió pensar “en la reconstrucción, en el día después de la pandemia”. “Hay mucha expectativa en todo el país de ver cómo el peronismo, después de cuidar la salud de los argentinos, va a estar en condiciones de recuperar el trabajo”, dijo. Y recordó que “gobernar es crear trabajo y la obra pública es un pilar fundamental”.
A continuación, Lammens resaltó el proyecto del Centro de Alto Rendimiento Deportivo en Tafí del Valle que impulsó su cartera, con financiamiento internacional por 450 millones de pesos, pero también hizo eje en las Legislativas donde según interpreta “se va a plebiscitar la gestión”. “Estas son elecciones importantes para consolidar la identidad del Frente de Todos”, consideró. E instó a “hablarles a todos”. “Sabemos que tenemos que convencer a los que tienen alguna diferencia con nosotros y a los que que ven que en la gestión fallamos en algunas cuestiones”, indicó.
La presencia de Wado de Pedro, a cargo del diálogo con los gobernadores y junto a Katopodis el ariete territorial de Fernández, terminó siendo casi testimonial. En rigor apenas llegó saludar: el ministro explicó que estaba aislado por haber sido contacto estrecho y alcanzó a decir que tenía “algunos problemitas con la conexión de internet” que obligaron a Manzur a tomar la posta.
El gobernador refrendó el discurso de polarización y recordó “la tragedia que vivió el país con Macri”.
En el final del acto, tras volver de Ezeiza donde recibió una nueva tanda de vacunas junto a Carla Vizzotti, Cafiero se propuso marcar un contraste con la oposición. Y enfocó en el macrismo: “Mientras ellos hablan, nosotros traemos vacunas; mientras ellos critican, nosotros hacemos obras; mientras ellos insisten con su modelo político y económico de exclusión, nosotros vamos de a poco recuperando a la industria, a las pymes y a los comerciantes”.
En su arenga final, Cafiero destacó “el esfuerzo del peronismo tucumano, rebelde en los años de Macri”, y en línea con la línea discursiva optimista trazada por Cristina Kirchner, que en su reaparición prometió que los argentinos van “a volver a ser felices”, mostró su expectativa de “poder dar vuelta la página de la pesadilla de la pandemia”. (Clarín)
