- Publicidad -

La empleada doméstica de Victoria Donda le reclama una indemnización de casi un millón de pesos

Victoria Donda

Según publica Clarín Le inició un juicio laboral por $827.518 por tenerla en negro 10 años, diferencias salariales y despido. La tuvo registrada con el mismo sueldo desde 2016. Y no le pagó varios meses en plena cuarentena.

Por: Alejandro Alfie

La empleada doméstica de la funcionaria Victoria Donda le inició un juicio laboral por $827.518 -más los intereses-, por tenerla en negro durante 10 años, entre 2007 y 2016. Luego de regularizar la situación en 2016, la funcionaria le pagó siempre la misma cifra, de $5.000 mensuales, sin cubrir la deuda anterior ni actualizar ese monto en los siguientes cinco años, hasta que Arminda Banda Oxa se consideró despedida en enero de 2021.

Luego de fracasada la conciliación laboral obligatoria, Banda Oxa y su abogado Osvaldo Barsanti presentaron la denuncia contra la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), el jueves de la semana pasada, ante el Tribunal de Trabajo para el Personal de Casas Particulares, según el expediente N°2021-79537955, al que este lunes accedió en exclusiva Clarín.

Un detalle que surge de la denuncia presentada por Banda Oxa es que Victoria Analía Donda Pérez no le pagó varios meses, desde marzo de 2020, cuando comenzó a regir el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) decretado por el presidente Alberto Fernández.

“A partir de dicha medida y atento a la falta de prestación de servicios, la empleadora comienza a no abonar mis salarios (ni siquiera la parte que se hallaba registrada por debajo de los salarios mínimos legales), motivo por el cual incrementé mis quejas verbales a fin de solucionar los incumplimientos que me aquejaban”, sostuvo Banda Oxa en la denuncia.

Pese a que el vecino de Donda se ofreció a ser intermediario para facilitarle los pagos a Banda Oxa, “la demandada se negó. Sorprendió la negativa de Donda Pérez a abonar mis insuficientes salarios durante el período de restricciones, toda vez que la demandada no sufrió restricción salarial alguna y, además, contaba con libertades para movilizarse y cancelar mis salarios sin inconveniente alguno, dada su condición de funcionario público”, planteó la empleada doméstica.

“Después de ejercer innumerables presiones, en el mes de julio de 2020 la demandada abonó la suma de $10.000, correspondiendo a los meses de abril y mayo”, planteó Banda Oxa. Y agregó que luego de ese pago, “intentó convocarme a prestar servicios (a pesar de la prohibición legal imperante), señalando que podía trasladarme en el vehículo oficial que el INADI pone a disposición de la Sra. Donda Pérez, toda vez que se encontraba vedado el acceso al transporte público para mi actividad”.

De confirmarse esa exigencia por parte de la funcionaria del INADI, se trataría de una situación que hubiera puesto en peligro a Banda Oxa, ya que por tener más de 60 años era parte del grupo de riesgo de contagio de coronavirus.

Ante la negativa a violar el ASPO, la empleada doméstica aseguró en su denuncia que la funcionaria del Gobierno no le pagó durante varios meses la mensualidad, hasta que “por las presiones que ejercían los entonces vecinos de la demandada”, donde también trabajaba Banda Oxa, abonó “la suma de $21.500”, con la que “pretendió cancelar con ese monto los salarios de los meses de junio, julio, agosto, septiembre y octubre de 2020”.

“Agotada de tantos incumplimientos y de las dificultades que debía enfrentar a una edad avanzada para poder hacerme de mis ingresos, a lo que cabe agregar la falta de pago de aportes por todo el primer período de la relación laboral en la que me encontré sin registro alguno, decidí intentar jubilarme”, dijo Banda Oxa, en su denuncia.

Pero cuando quiso que Victoria Donda regularice su situación previsional por los 10 años en los que había prestado servicios “sin registro alguno”, entre 2007 y 2016, la funcionaria se negó y le pidió que renunciara, “a cambio de conseguirme un Plan Social o bien una contratación en el INADI, instituto estatal que ella dirigía”

“Ante dichos ofrecimientos, que tomaron estado público en el marco de una causa penal que se inició al respecto, decidí formalizar mi reclamo” de regularización del contrato de trabajo, a fines de 2020, “habida cuenta que la empleadora evidentemente jamás iba a satisfacer mis reclamos de modo legítimo”, planteó la empleada doméstica.

Victoria Donda rechazó el reclamo y, entonces, Banda Oxa se consideró “injuriada y despedida”, el 12 de enero de 2021, situación que también fue rechazada por la funcionaria.

Ante la falta de acuerdo en la “instancia de conciliación ante el SECLO”, la empleada doméstica le inició la semana pasada el juicio laboral, para que se condene a Donda al pago de  $827.518 -más los intereses-.

Clarín quiso consultar a Victoria Donda por esta denuncia, pero no obtuvo respuesta.

La empleada doméstica de Victoria Donda también le había iniciado un juicio en sede penal, por el ofrecimiento de un cargo en el INADI o un plan social para conseguir su renuncia, por “negociaciones incompatibles con la función pública y abuso de autoridad”. Pero allí Donda fue sobreseída “por inexistencia de delito”, ya que el juez Sebastián Casanello entendió que no hubo actos administrativos tendientes a concretar esas ofertas que le realizó la funcionaria a su empleada doméstica.

Habrá que ver cómo sigue el reclamo laboral contra la funcionaria del Gobierno nacional, que fue presentado el jueves pasado en el Tribunal de Trabajo para el Personal de Casas Particulares, con sede en el Ministerio de Trabajo de la Nación. En caso que ese fallo no conforme a las partes, la denuncia podría seguir en apelación -como cámara revisora- ante la Justicia del Trabajo.

Inconsistencias de Victoria Donda

Cuando a principios de año Clarín pudo comunicarse con Donda, la funcionaria reconoció los ofrecimientos de un plan social y un contrato en el INADI, aunque le quitó el carácter delictivo a su accionar. Sostuvo que la empleada trabajaba con ella desde el año 2016, que la tenía “en blanco” y que “como me dijo que quería renunciar, porque le dolía el brazo, entonces le ofrecí ingresar en el INADI o en algún plan social”.

“Ella me dijo varios veces que tenía problemas personales, que no podía salir de su casa a hacer nada, porque tiene un hermano internado y que por esa situación no sabía si iba a seguir trabajando conmigo en casa. Como la tengo registrada, le pedí que renuncie, para que no se quede sin nada. Le ofrecí ayudarla con algún tipo de trabajo en el INADI, donde podía ingresar en el sector de maestranza o podía entrar a un programa de promotores contra la discriminación, para la gente de barrios humildes, o sino con algún plan”, dijo Donda a Clarín. Y agregó que, si Arminda renunciaba, “le iba a pagar una indemnización, como corresponde. Pero la están usando políticamente, para intentar perjudicarme”.

En ese entonces, Donda difundió un comunicado donde aseguró que “los aportes laborales y los pagos salariales fueron hechos en tiempo y forma. Así consta en los registros de ANSES y AFIP”.

En los recibos de sueldo que la funcionaria entregó a Clarín figuran pagos realizados por la funcionaria a Arminda, desde julio de 2016, cuando le pagaba $5.000 mensuales, hasta enero de 2021, cuando también le pagaba $5.000, como si le hubiera pagado a su empleada doméstica el mismo sueldo “en blanco” durante cuatro años y medio, sin ningún tipo de actualización inflacionaria. En ese período los aportes laborales fueron subiendo de $176, en agosto de 2016, a $363, en enero de este año, según los recibos aportados por Donda.

Más allá de la polémica en torno a la oferta que le hizo Victoria Donda a su empleada doméstica para darle un plan social de $ 10.000 o que ingresara a trabajar en el organismo oficial que ella dirige, los recibos de sueldo a los que accedió Clarín muestran que la presidenta del INADI no puede justificar lo que pagaba “en blanco” a Banda Oxa.

Es que la tuvo registrada en ANSES por 50 horas semanales y le pagaba “en blanco” $5.000 mensuales, en enero del año pasado, pese a que el mínimo establecido en esa época era de $134 la hora. Es decir, que tendría que haberle pagado por lo menos $6.700, en ese entonces, a la inmigrante boliviana de 62 años que trabajaba en su casa.

Pero le pagaba por debajo del mínimo de la escala salarial oficial, cuando ya era presidenta del INADI. Y además, nunca le pagó el aguinaldo.

Esto desmiente la explicación de Donda, que aseguró que le pagó siempre el mismo monto “en blanco” a su empleada doméstica, durante casi cinco años, de $5.000 mensuales, porque “por sus problemas de salud terminó trabajando cada vez menos horas”, dijo Donda, en una entrevista con C5N.

Clarín accedió a los recibos de sueldo de Banda Oxa, entre julio de 2019, cuando Donda era diputada nacional, y agosto de 2020, cuando ya era titular del INADI.

Según esos recibos, Donda la tuvo registrada a su empleada doméstica por 48 horas mensuales y un pago de $5.000, hasta diciembre de 2019. De hecho, en los certificados de pago, la misma funcionaria reconocía que le pagaba ese salario desde julio de 2016, aunque sin especificar cuál era la carga horaria en ese entonces.

La diferencia entre el mínimo salario para el personal doméstico y lo que le pagaba Donda era una deuda de $448 en julio de 2019, monto que fue aumentando hasta incautarle $1.700 a Banda Oxa en enero de 2020, cuando el mínimo se ubicó en $6.700 y ese mes la registró con 50 horas.

Sin embargo, esa relación se revirtió a partir del mes siguiente, al registrarla con 12 horas mensuales. Con la nueva registración, Donda le habría pagado $3.392 más que el salario básico, hasta llegar a superar por $3.266 ese salario básico en agosto de 2020.

Una situación difícil de explicar, ya que al mantenerle el mismo sueldo, pero con 12 horas registradas durante el último año, sería como si le hubiera cuadruplicado el sueldo a partir de febrero del año pasado, pese a que se lo mantuvo congelado en $5.000 “en blanco” durante casi cinco años.

Lo cierto es que la funcionaria del Gobierno nacional registró en la AFIP como si le hubiera pagado a su empleada doméstica el mismo sueldo durante 55 meses, pese a que la escala salarial pasó de $ 51 a $ 158,95 la hora, en ese período.

De hecho, en las planillas que envió la funcionaria Donda a Clarín, donde está registrado su pago en AFIP, no figura nunca ningún pago del aguinaldo, durante los cuatro años y medio que está registrada, entre julio de 2016 y enero de 2021. (Clarín)

spot_img

Suscribité al Newsletter

Más Noticias

- Publicidad -spot_img

Más Noticias

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí