(Por: Lic. Leandro Peres Lerea para OPI Santa Cruz) En otra movida errónea el gobierno nacional limita los viajes al exterior a través de la restricción de las cuotas, siendo esto muy dañino para el turismo nacional aunque busquen instalar lo contrario.
La semana pasada el gobierno nacional y ante la clara falta de reservas del BCRA resolvió limitar aún más los viajes al exterior, prohibiendo a bancos y tarjetas de crédito financiar en cuotas los pasajes y servicios turísticos al extranjero.
Lo insólito de la medida es que fue tomada apenas unas horas antes del Black Friday generando un inusitado golpe a una industria de las más golpeadas por efectos de la pandemia y que había invertido esfuerzos económicos de toda índole para prepararse para esta ocasión.
La medida fue apoyada por varios funcionarios del gobierno nacional con innumerables motivos y explicaciones por ejemplo que buscan fomentar el turismo interno, que el gobierno no tiene que subsidiar cosas para ricos, que pidan prestado a un amigo o un préstamo al 48% anual y demás prosas de perogrullo que no hacen más que demostrar el cabal desconocimiento de lo que es la industria del turismo. Y que en nuestro país es el tercer o cuarto consorcio exportador de divisas, sin contar el potencial inmenso que tiene para la creación de puestos de trabajo genuinos.
El turismo es de por sí una industria circular, es decir que cuando un argentino viaja al exterior una persona ingresa a nuestro país desde el extranjero, ergo cuanto más demanda de pasajes haya al extranjero más oferta de vuelos y asientos habrá para quien desee venir a nuestro país. De lo contrario si esa oferta disminuye producto de la baja en la demanda menos vuelos programaran las aerolíneas y asi menos turistas podrán venir a Argentina puesto que los vuelos para ser rentables deben ir llenos en ambos sentidos.
Otro sinsentido de los almacenes de excusas oficiales quedo a la vista este lunes al verse el aumento sideral de los pasajes de cabotaje y ni que hablar de los costos en dolares que nos lleva mantener una aerolínea de bandera que desde esta gestión está cada vez más cazando en un zoológico. Ni que hablar de la cantidad de impuestos que se cobran en un pasaje aéreo, que ascienden al 50%.
Por último y no menor debemos entender que los viajes al exterior no son solo a efectos vacacionales, son también de estudios, tratamientos médicos, o bien de trabajo y negocios.
Es decir que al exterior también viaja una Pyme a buscar clientes y conquistar mercados, por ende el error no se puede justificar desde ningún punto de vista más que por la falta de dólares en el BCRA.
Ahora si lo que llaman subsidio a los viajes al exterior es mantener artificialmente el precio del dólar al tipo de cambio estamos en otro tipo de problema, que es admitir el descalabro producto de la intervención del BCRA del mercado de cambios y eso no tiene nada que ver con la industria turística que de por sí ya tan golpeada esta.
Lo que debemos plantearnos es si vamos a resolver los problemas de una vez o si vamos a seguir dando vueltas sobre lo mismo con tal de conformar un relato militante.
Que tengan todos un buen viaje. (Agencia OPI Santa Cruz)
