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En la guerra la primera víctima es la verdad. La autocracia rusa y los ladrisprogresistas latinoamericanos usan ese recurso en la guerra o en la paz

El presidente de Rusia Vladimir Putin - Foto: NA
El presidente de Rusia Vladimir Putin – Foto: NA

(Editorial) – La frase de que la verdad es la primera que sucumbe en una guerra, producto de la desinformación que invade los medios dominados, en este caso manipulados por la autocracia rusa, se relativiza ante la dinámica de las comunicaciones actuales, donde cualquier ciudadano, soldado o niño, inclusive, puede con su teléfono, subir imágenes en tiempo real y destruir las campañas psicológicas de los invasores, en este caso el ejército ruso, enviados por Vladimir Putin a recuperar paso a paso y palmo a palmo el terreno extenso del vecino país, un territorio clave para luego avanzar sobre otros países lindantes, con el fin de reeditar la URSS, aquella que Gorvachov hizo implosionar, cuando destruyó el comunismo como lo había construido Vladimir Lenín.

La verdad es la primera víctima mucho antes de que suenen los primeros disparos. Los hechos así lo demuestran. Vladimir Putín es incapaz de respetar cualquier acuerdo porque firma con la mano y borra con el codo. Miente permanentemente usufructuando la ideología comunista, pero siendo un férreo capitalista. Igual que sus amigos argentinos, Alberto Fernández y Cristina Fernández o los regímenes de dictadorcitos como el de Cuba, el de Venezuela con Chávez y el colectivero, se encuadran dentro de la nueva denominación “ladriprogresista”, es decir, aquellos pseudo-progresistas ladrones.

La verdad de la guerra

En el Siglo XXI nadie esperaba una guerra por invasión y el juego de intereses internacionales es tan grande e intrincado que hacía casi imposible una decisión bélica, menos aún por parte de una potencia armamentista y militar como Rusia. Pero el espíritu expansionista de Vladimir Putin, fue más fuerte. Y esta mañana escuché al economista Cachanovsky hacer un paralelismo genial: “lo que hace Rusia es más o menos lo que hacen los Mapuches en el sur argentino (salvando las distancias y el poder de las armas). Los Mapuches dicen: nuestros antepasados eran dueños de estas tierras, hoy nosotros venimos a reclamarlas. Putin se justifica: Ucrania pertenecía a la URSS, hoy venimos a tomarlo” y el remate del economista fue “Imagínense si los Mapuches tuvieran poder de fuego; no dudaría en invadir tierras como los rusos”.

En ese marco la Argentina se negó a votar en la ONU una condena a la invasión Rusa. Tarde y cuando el gobierno de Alberto y Cristina, vieron que el mundo vira en sentido contrario a las agujas del reloj y Rusia es “sacado del mundo financiero”, al bloquearlo del sistema Swift, sancionaron a los rusos en todos los frentes internacionales, hasta la última decisión de la FIFA de excluirlo de la competencia mundial de fútbol y suspender cualquier participación de Rusia en juegos olímpicos y/o internacionales, mientras dure este ataque absurdo a la población civil de Ucrania; luego de admitir que su marginación arrastraría a los países aliados y especialmente a los más débiles como Argentina, cinco días luego de negarse a condenar a Rusia en la ONU, el gobierno argentino decidió hacer público un rechazo a la invasión, a través de Santiago Cafiero, su Canciller.

Y nuevamente la verdad en la víctima. Porque ni Alberto ni Cristina, quieren condenar un crimen de lesa humanidad como el que lleva a cabo Vladimir Putin, pero las circunstancias los obligan a ejecutar esta “protección discursivas” porque Occidente es el único ancla posible que tiene el gobierno argentino para salir de la situación financiera desesperada a la que nos han llevado y en ese marco el FMI vuelve a ser la tabla de salvación que alguien con más criterio que ideología, advirtió se le escaparía a la Argentina, si acaso este gobierno de mentirosos y rapaces, seguían pensando en ellos como los enemigos, cuando en todo caso es el usurero oficial al que gobierno tras gobierno, incluyendo el del CFK, Macri y éste de Alberto y CFK, recurren para sobrevivir un par de años más. 

Por todo esto podemos decir que si bien en la guerra, la verdad es la primera víctima, en la paz, la mentira es la primera arma que atenta contra la propia paz de los pueblos. Y en ambos casos, sus generadores y ejecutores, es la misma clase política que evalúa la manipulación de la verdad, lo cual es lo mismo a decir, el uso de la mentira. (Agencia OPI Santa Cruz)

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15 COMENTARIOS

  1. COn 20 balas se termina el problema: maten a Putín y a 19 de sus burócratas, gordo de dinero, enriquecidos sobre la sangre de los rusos y se termina el problema::: no es tan dificil. Se puede usar veneno como usa él contra sus opositores, por ejemplo

    • Coincido, sin embargo pienso que Putín puede ser asesinado por los propios en base al daño que está inflingiendo a su pueblo

  2. Putín sabe que se le termina el poder si no hace algo. La comunidad política rusa no lo quiere más. Los burgueses rusos lo detestan y se lo quieren sacar de encima. Putón está tan desesperado como Galtieri en el 82 (salvando las distancias)
    Eso pienso yo

  3. la *gran ramera de babilonia* mucho blablabla comunista pero c sus relojes rolex y carteritas hermes … y viviendo en recoleta !!!

    asi sho tmbn me hago comunista !!!

    me dejo la barba y voy hacer la revolucion !!!

    pero eso sí : viviendo en recolets o puerto madero !!!

    suyo,

    pedro páramo

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