Según publica La Nación Washington Mutual, que era la asociación de caja de ahorros más grande del país, fue adquirida de urgencia por J.P. Morgan en 2008.
Silicon Valley Bank se convirtió el viernes en el mayor banco estadounidense en quebrar desde el colapso de Washington Mutual en 2008, en plena crisis financiera mundial.
La implosión de Washington Mutual, así como de los bancos de inversión Lehman Bros. y Bear Stearns, fue seguida de la quiebra de todo el sistema. Entre 2008 y 2015 quebraron más de 500 bancos asegurados por el gobierno federal.
La mayoría eran bancos regionales pequeños o medianos y fueron absorbidos por otras instituciones, un resultado común para los bancos que han sido puestos bajo control gubernamental. Washington Mutual, que estaba muy involucrado en hipotecas de riesgo y se convirtió en el mayor banco en quiebra de la historia de Estados Unidos, fue vendido a JPMorgan Chase.
En los últimos años, han quebrado menos bancos, gracias en parte a una normativa más estricta que se puso en marcha a raíz de la crisis financiera. Antes del Silicon Valley Bank, la última empresa que quebró fue a finales de 2020, cuando el coronavirus asolaba el país.
No está claro si el colapso de Silicon Valley Bank se extenderá a la industria en general. El banco era más conocido por sus préstamos a startups tecnológicas y tenía 209.000 millones de dólares en activos a finales del año pasado, lo que lo convertía en el 16º banco más grande del país. Pero sigue siendo pequeño en comparación con los tres primeros, que poseen más de un billón de dólares cada uno y tienen modelos de negocio y bases de clientes mucho más diversificados.
La regulación que se estableció para los mayores bancos del país tras la crisis financiera incluye estrictos requisitos de capital, lo que significa que deben tener una cierta cantidad de reservas para momentos de crisis, así como estipulaciones sobre lo diversificados que deben estar sus negocios.
Pero Silicon Valley Bank y otros de su tamaño no tienen la misma supervisión regulatoria. En 2018, el presidente Donald Trump firmó un proyecto de ley que disminuyó el escrutinio para muchos bancos regionales. El director ejecutivo de Silicon Valley Bank, Greg Becker, fue un firme defensor de la medida. Entre otras cosas, cambió los requisitos para la cantidad de efectivo que estos bancos tenían que mantener en sus balances para protegerse contra los shocks. (La Nación)