Según publica La Nación En un primer momento ambas delegaciones confirmaron el encuentro, pero este domingo la reunión falló por cuestiones de agenda, según anunciaron Ucrania y Brasil.
Luego de que la reunión bilateral entre presidentes acordada entre el gobierno de Ucrania y el de Brasil en el marco del G-7 en Japón se frustrara, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, expresó en una conferencia de prensa que el más “decepcionado” por la reunión fallida fue el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva.
Zelensky confirmó la versión proporcionada por el gobierno brasileño, según la cual habría habido una incompatibilidad de agendas.
”En cuanto a las situaciones de mis reuniones, me reuní con casi todos, todos los líderes y todos tenían su propia agenda, entonces creo que por eso no pudimos reunirnos con el presidente brasileño”, declaró el líder de Ucrania en Hiroshima en la cumbre del G-7 a la que concurrió como invitado y en la que reforzó el apoyo de países para el conflicto bélico con Rusia.
Consultado acerca de si sostendría un encuentro bilateral con Zelensky para completar su agenda del sábado, Lula respondió un breve “no sé”, antes de que Brasil finalmente diera luz verde al encuentro, que acabó por no concretarse, indicó O Globo.
Lula da Silva, el último representante latinoamericano en la cumbre, ha generado polémica en las últimas semanas por sus declaraciones en las que culpó tanto a Ucrania como a Rusia por la guerra y acusó a Estados Unidos y a los aliados europeos de prolongar el conflicto con la entrega de armas.
“El presidente Putin no toma la iniciativa de parar, Zelensky no toma la iniciativa de parar. Europa y Estados Unidos siguen contribuyendo a la continuidad de esa guerra. Tenemos que sentarlos en la mesa y decirles ‘ya basta’”, sentenció entonces durante su gira por China y Emiratos Árabes Unidos.
También declaró en esa gira que se presentaría como una opción neutral para mediar en el conflicto y buscar una solución, pero ante la fallida reunión de este domingo con Zelensky, este rol conciliador que busca obtener Lula podría estar en riesgo.
Según expertos consultados por O Globo, la razón detrás por la que los mandatarios no se reunieron finalmente en el G7 recae en que Brasil podría no considerar este foro como el mejor espacio para reunir cara a cara a los mandatarios.
“Creo que el gran temor de la diplomacia brasileña era que la cumbre del G7 dejara de lado su agenda económica y se convirtiera en una plataforma de condena a Rusia, poniendo a Brasil en una situación delicada, ya que la invitación a Lula no tenía nada que ver con la guerra”, analizó Guilherme Casarões, politólogo de la Fundación Getúlio Vargas (FGV), en conversación con el medio brasileño.
Otra de las razones mencionadas por el experto indica que Lula pudo haber decidido no reunirse con Zelensky porque aún no se juntó frente a frente con su homólogo ruso, Vladimir Putin, lo que habría de poner en juego su neutralidad en el conflicto bélico.
“No sé si hubo una imposibilidad real de programar o si hubo falta de voluntad y, en este caso, de quién fue la falta de interés. Sin información fáctica, sería frívolo especular. De todos modos, no facilita un posible papel de mediación de Lula y confirma la poca relevancia de Brasil en el asunto”, opinó por su parte el ex embajador y ex ministro Rubens Ricupero.
Lula ha tratado de suavizar su narrativa sobre el conflicto tras sus controvertidas declaraciones al enviar el 10 de mayo a su asesor para asuntos internacionales del Palacio del Planalto, Celso Amorim, -que a principios de abril se reunió con Putin- a Kiev para reunirse con Zelensky, en un esfuerzo por mostrarse neutral. (La Nación)