ATE dividido. La conducción provincial dividida en dos se juega la supervivencia. Los que están reaparecen con reclamos de paritarias y lo que vienen prenden la motosierra

ATE a nivel nacional decidió la fecha de las elecciones para renovar los cargos en el período 2023/2027. El 10 de mayo se realizó la convocatoria para el llamado a elecciones y el 23 de mayo se cumplió la fecha para presentación de lista de las elecciones a realizarse el próximo 9 de agosto. 

El Consejo Provincial de ATE, con Olga Reinoso como Secretaria General, vive una irreconciliable interna que ha partido el espectro gremial interno del otrora sindicato más potente de los estatales el cual capituló a partir del año 2016, principio de 2017, cuando Alejandro Garzón y Olga Reinoso compatibilizaron su acción gremial con las acciones del gobierno, transformándose en el brazo sindical de Alicia Kirchner, en un caso y llegando a su máxima expresión, cuando el ex secretario general y dirigente nacional de ATE se transformó en funcionario del gobierno provincial.

Toda esta exposición ante los afiliados, que han visto cómo la dirigencia de ATE entregó las banderas de la lucha a la actual gobernadora, más una serie de acciones sistemáticas y recurrentes de la dirigente Reinoso, quien (entre otras cosas) anuló las asambleas cuando sobrevino  la pandemia, pero terminada la veda ella jamás quiso reponerlas, dejando fuera de la decisión política del gremio a los afiliados, fueron los principales generadores de reclamos y discusiones, al punto que para las elecciones irán dos listas, una la oficial y otra opositora con el detalle de que ambas utilizan el mismo color  y nombre “Verde Anusate”, lo cual a la hora de votar podría generar confusión en el electorado y favorecer a la lista oficialista.

La división por factores políticos

Otros de los problemas cosechados por la actual conducción a cargo de Reinoso, fue la incorporación de toda la familia Garzón al gremio e inclusive los disidentes del sindicato se quejan de que la Secretaria General puso a su hijo dentro de la estructura, sin siquiera ser afiliado de ATE, con el cual chocan permanentemente aquellos que sí tienen sentido de pertenencia dentro de la organización provincial.

Pero quizás la mayor confrontación interna en ATE provincial, proviene del cambio de actitud de la actual conducción, con respecto al gobierno provincial y su injerencia en la cuenca, especialmente en YCRT donde confluyen cuatro sindicatos nacionales, pero tiene presencia el CDP por la fuerte vinculación de sus representantes nacionales (Godoy, Michelis, etc) con el kirchnerismo del gobierno central, de hecho, afiliados de ATE recuerdan que fue Reynoso quien plantó una denuncia para que 417 empleados del yacimiento fueran echados por Aníbal Fernández, un hecho inédito en el sindicalismo y especialmente en ATE.

Otro de los temas que ha dividido las aguas en el CDP, fue la injerencia de la Secretaria General en la decisión final de cada Paritaria, donde se guarda para sí la aprobación de manera unipersonal, de las ofertas salariales que realiza el ejecutivo, sin consultar con las bases, como hacía Alejandro Garzón hasta el 2016, que reunía a los integrantes de ATE en sus lugares de trabajo (Ministerios, hospital, etc) y en asamblea tomaban las decisiones o bien en asambleas generales se otorgaban los mandatos de manera clara y transparentes.

OPI ha publicado varias notas de cómo es la estrategia de la Secretaria General de ATE en cada paritarias, donde acepta los ofrecimientos oficiales por sobre la negativa de los paritarios de su gremio (Navarro- Shuterland), generando una clara disposición a entregar la lucha sindical en beneficio de Ejecutivo.

La obligación de pedir, pero no exigir

Es en este marco que el 18 de mayo de este año, el sector disidente de ATE provincial realizó una comunicación (Nota Nº 377/23) al Ministerio de Trabajo de la provincia en la cual le informó de la realización de un paro provincial de 24 horas con una serie de exigencias al pie, donde figuran el pedido de reapertura de paritarias, inversiones para YCRT, condiciones dignas de trabajo en la administración central, condiciones edilicia, fin de la violencia y persecución laboral, la precarización laboral y otros tópicos que constituyeron el reclamos de ese sector.

Dicha nota fue elevada con la firma de Carlos Garzón como Secretario Adjunto y Sandra Shuterland como Secretaria Administrativa, pero sin intervención de la Secretaria General, Olga Reinoso.

Esta comunicación obviamente tiene un sentido político expreso, al “cortarse” de la decisión de la conducción provincial, por no poner estos temas en agenda o si Reinoso lo hace desde el discurso, nunca lo ha plasmado en medidas concretas en contra de la administración de la actual gobernadora.

En virtud de ello y de la cercanía de las elecciones en el mes de agosto y la campaña previa que llevan a cabo los candidatos, el 30 de mayo de 2023, la actual Secretaria General Olga Reinoso elevó a la gobernadora Alicia Kirchner, una nota (Nº 826/23) en la cual, en representación del CDP, le hace presente la necesidad de abrir paritarias salariales ante la urgencia que plantea la pérdida del poder adquisitivo por inflación y tarifazos.

En el último párrafo reitera la necesidad de abrir la mesa de acuerdos, pero en ningún momento hace mención a posibles medidas de fuerza que podría tomar el sindicato, en caso de no tener respuestas favorables.

Consultadas las fuentes del gremio, indican que Reinoso actúa de esta manera para no quedar relegada en los reclamos, lo cual tiene planificado hacer en estos meses, la conducción de la lista opositora cuya estrategia sería incrementar los reclamos, hacerlos visibles, promover medidas de fuerza y dejar a la conducción del CDP en clara connivencia con el gobierno provincial, pues la señora Reinoso estaría comprometida con el gobierno a no potenciar reclamos por la vía de los hechos, como fue la metodología de ATE hasta que en el año 2017, la conducción se alió con el kirchnerismo. (Agencia OPI Santa Cruz)