La Secretaría de Comercio ha anunciado la actualización de los valores de referencia del trigo, lo cual representa un ajuste del 7,58% con respecto al último incremento establecido a fines de mayo.
Esta decisión, que podría tener repercusiones en el precio del pan, se llevó a cabo en el marco del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino (FETA) y se formalizó mediante la publicación de la Resolución 1029/2023 en el Boletín Oficial este miércoles.
En consecuencia, los nuevos precios de la harina 000 se han fijado en $2.142 por bolsa de 25 kilogramos y $84.073,5 por tonelada, teniendo en cuenta un precio de referencia del trigo de $45.177,39 por tonelada.
El Gobierno ha considerado las variaciones del precio FAS del trigo (que representa el 40% del total), la inflación mayorista (30%) y los salarios (30%) para aplicar estos aumentos.
Según lo establecido, los precios son sin impuestos, a la salida del molino y sin costos de entrega. Se deben agregar los siguientes costos logísticos por región: 3,50% para la ciudad y provincia de Buenos Aires, 5,50% para Centro, Cuyo y Litoral, 7% para NEA y NOA, y 10,5% para la Patagonia.
Con este ajuste realizado este mes, la Secretaría de Comercio ha detallado que durante el primer semestre del año se ha autorizado un incremento acumulado del valor del trigo del 34,6%, pero en términos interanuales el aumento es del 78,5%, por debajo de la inflación.
El FETA fue creado mediante decreto en marzo de 2022 con el objetivo de garantizar un valor de referencia para el trigo en el mercado interno, “que permita conservar una estabilidad en la participación de la bolsa de harina como componente del costo de los productos que de esta se derivan”, según destacó el Poder Ejecutivo.
Este fondo se estableció debido al aumento sostenido del precio de los alimentos que afectó significativamente al trigo, maíz, girasol y sus derivados a raíz del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, justificó el Gobierno.
En la actualidad, la Secretaría de Comercio considera que “a fin de mejorar el impacto de la herramienta financiera tanto en la estructura de costos como en el producto al consumidor, resulta necesario aumentar la oferta de la harina con compensación en el mercado y, asimismo, actualizar sus valores para que sean consecuentes con la evolución del resto de los componentes del costo de los productos derivados de la harina de trigo”.
A principios de este mes, el Gobierno asignó a este Fondo un monto equivalente a hasta 1,3 puntos porcentuales de la alícuota de retenciones a la soja y sus derivados. (Agencia OPI Santa Cruz)
Con información de NA.