¿Quién puede ser tan estúpido de creer, realmente, la pelea del candidato alfombra Daniel Scioli y el vago diputado nacional del FPV y su madre?

(Por: Rubén Lasagno) – Todo el acting entre Scioli, la presentación de su candidatura, la bronca de Máximo y Cristina, la decisión del  inoxidable ex gobernador bonaerense de abrir un frente interno y la última de ir a la justicia hasta que finalmente “el kirchnerismo le dio los avales”, es toda una farsa K, usada para dividir el electorado y rescatar aquellos del peronismo que no quieren votar a la marca del huevo frito y entonces, teniendo a la vista al inútil y corrupto Daniel Scioli, gran parte del electorado disidente, (creen los K) van a terminar llenándole las urnas al motonauta, que es el único brazo electoral del partido gobernante.

Scioli es un idiota, es un panqueque, un político que se ha dejado basurear de la peor manera, maltratar en público y en privado, no tiene dignidad ni ética; lo han usado y se han burlado de él, desde épocas en que se unía a Menem, pero fue Néstor y Cristina quienes más lo han arrastrado por el fango y aún así, “se las ha bancado” porque su ambición personal de poder, es superior a cualquier denigración en público, como aquella que le hizo Sergio Massa, cuando lo dejó hablando solo en una conferencia de prensa y el embajador en Brasil puso la mejor cara de Scioli para pasar el mal trago, porque para él pesan más los 17 mil dólares por mes que cobra y los negocios que hace desde la embajada, que el desplante del actual Ministro de Economía.

Por eso y por todo lo que representa Daniel Scioli en el peronismo/kirchnerismo y lo transparentes que son para llevar adelante las maniobras maquiavélicas en la política nacional, es que no les creo nada y pienso, que la orden de al viuda es simular que Scioli “se corta solo” y como el tero, pegar cuatro gritos allá lejos, mientras los huevos los pone en otro lado para, de esa manera, “convencer” al electorado de que Scioli es distinto, es un “disidente del peronismo”, quien “se les enfrenta”, pero en realidad es un multiuso, actual funcionario de Alberto, Cristina y Massa, que abona las expectativas del propio krichnerismo de seguir manteniendo el poder, más allá del 2023.

Recuerde el lector al “Frente Renovador”, las grande alocuciones de Massa prometiendo meter preso “a los ñoquis de la Cámpora”. Todo un acting de convencimiento de las  masas, de que se ofrecía como un renovador diferente, pero en realidad, pedía pista en el oficialismo para ser parte del poder, como finalmente sucedió.

Todo este teatro de Scioli está construido en términos similares, a la separación del SER del FPV en Santa Cruz. 

Claudio Vidal nació y se forjó dentro del oficialismo provincial con quien votó siempre en concordancia y a nivel nacional todo con Máximo Kirchner; “se separó” para ampliar la base electoral y logró destrozar a la oposición, quitándole presión al FPV que con este panorama se queda este año con el poder en la provincia.

A veces, no siempre se es un buen militante K desde la propia estructura del partido; cuando todo está colapsado, el kirchnerismo tiene esta propiedad funcional de dividir su cuerpo celular, solo para multiplicar sus posibilidades y perdurar y no, precisamente, para desaparecer, como muchos creen y piensan erróneamente. (Agencia OPI Santa Cruz)