Luego de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que sacudieron el panorama político de Argentina, los bonos del país enfrentan una mañana tumultuosa en los mercados, con caídas notables en las primeras operaciones. Los resultados inesperados situaron a Javier Milei y su partido Libertad Avanza como los más votados, generando una reconfiguración en el tablero político.
Las bajas en los títulos públicos son significativas, llegando a descender hasta 12 puntos en el premarket. Uno de los bonos relevantes para las operaciones en la Bolsa de Comercio, el GD30, registra una retracción del 11,3%. Otros bonos, como el GD29, presentan una baja del 11,7%, mientras que el GD35, GD38, GD41 y GD46 sufren caídas del 12,4%, 11,6%, 12% y 12,45% respectivamente.
Esta situación plantea la necesidad de una intervención más fuerte por parte de las autoridades económicas para evitar una escalada en los dólares financieros que, a su vez, podría ejercer presión sobre la cotización informal del dólar.
La semana pasada, el Gobierno ya destinó un promedio de US$100 millones diarios para frenar la subida de los dólares alternativos. La consultora 1816, en un análisis privado distribuido entre sus clientes, considera que los resultados de las PASO fueron un “cisne negro” y que no era un escenario previsto por nadie, lo que obligará a recalcular inversiones.
A pesar de que los candidatos más pro mercado (Milei y Patricia Bullrich) sumaron el 47% de los votos, mientras que el peronismo no alcanzó el 30%, la incertidumbre predominará en el mercado. Las expectativas anteriores estaban fundamentadas en la victoria clara de Juntos por el Cambio, lo que compensaba ciertas noticias económicas desfavorables, pero ahora la situación es menos clara.
1816 proyecta “mucha presión” sobre los dólares financieros debido a la creciente preocupación de que Argentina pueda llegar a una dolarización. A pesar de esta posibilidad, la consultora argumenta que con US$10.000 millones de reservas netas negativas y US$40.000 millones de pasivos del Banco Central, la dolarización solo sería posible a través de la liquidación de stocks. Esta perspectiva añade un elemento adicional a las complejidades económicas que el país enfrenta en este momento crucial. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA