La reciente devaluación anunciada por el presidente Javier Milei ha tenido un fuerte impacto en la industria automotriz argentina, con un aumento alarmante del 40% en los precios de los autos en las últimas dos semanas. Este incremento está afectando especialmente a los sectores medios de la población, quienes ven cada vez más distante la posibilidad de acceder a un vehículo.
Las remarcaciones de precios se desataron tras el anuncio de la devaluación, que se estima rondaría el 55%, llevando a las terminales automotrices a ajustar significativamente las listas de precios. Con el objetivo de evitar la paralización total de las ventas, las concesionarias están ofreciendo vehículos en stock a precios anteriores, una opción que podría resultar ventajosa para aquellos que disponen de efectivo, especialmente en dólares.
En un intento por mantener cierta actividad en el mercado, las concesionarias están tomando el dólar a un valor de aproximadamente 1.000 pesos, asumiendo que este podría ser el valor al que se estabilice con la implementación del plan de shock para ajustar las cuentas públicas.
Las subas en los precios de los autos se dividieron en dos etapas: un aumento del 15% a principios de mes y otro del 25% después de la devaluación del martes, dando como resultado un aumento acumulado del 43%. Ante la perspectiva de un estancamiento económico, las concesionarias están implementando diversas ofertas, como la bonificación de la primera revisión técnica.
Esta situación está generando un temor entre los compradores, alejándolos de las concesionarias. Incluso, modelos considerados típicos de la clase media, como el Fiat Cronos y el Peugeot 208, ya están alcanzados por el denominado “impuesto al lujo” debido a los significativos aumentos de precios.
El Peugeot 208, fabricado en El Palomar, ha experimentado un aumento cercano al 50%, llevando a algunas de sus versiones a tributar el “impuesto al lujo”. Modelos considerados económicos, como el Toyota Etios, ahora superan los 10 millones de pesos en precio de lista.
Las versiones más caras de modelos como el Fiat Cronos y el Peugeot 208 han superado los 14 millones de pesos, automáticamente ingresando en la primera escala de los impuestos internos. Esta situación plantea desafíos significativos para los consumidores y la industria automotriz en Argentina. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA