Una nueva oleada de misiles y drones rusos ha causado daños significativos a las instalaciones energéticas en el sureste y oeste de Ucrania. Este ataque ha dejado al menos dos trabajadores heridos y ha obligado al país a importar una cantidad récord de electricidad, según informaron las autoridades ucranianas.
El operador de la red nacional, Ukrenergo, informó que el equipo en sus instalaciones en las regiones de Zaporiyia y Leópolis resultó dañado durante este segundo gran ataque aéreo ruso de la semana. Dos trabajadores en Zaporiyia fueron trasladados al hospital para recibir tratamiento. Además, el Ministerio de Energía de Ucrania confirmó que una instalación de infraestructura de gas en el oeste del país también fue alcanzada.
“Tras ocho ataques masivos del enemigo contra el sistema eléctrico desde marzo, la situación en el sector energético sigue siendo difícil”, afirmó el Ministerio en un comunicado.
El Ministerio de Defensa ruso informó que sus fuerzas utilizaron misiles de largo alcance lanzados desde aviones y barcos, así como drones, para atacar depósitos de municiones e instalaciones energéticas que, según afirman, apoyan la producción militar ucraniana. Este es el primer ataque en el que las fuerzas rusas han lanzado misiles desde el mar de Azov en lugar del mar Negro.
“Este es un punto de inflexión importante, porque lo utilizan al considerarlo una zona acuática más segura que el mar Negro”, declaró Dmytro Pletenchuk, portavoz de la Marina ucraniana, a la televisión local.
La defensa antiaérea de Ucrania logró derribar 12 de los 16 misiles y los 13 drones lanzados por Rusia, según la Fuerza Aérea del país. Las alertas aéreas en varias regiones de Ucrania duraron varias horas durante la noche, subrayando la tensión y el peligro constante bajo el cual viven los ucranianos.
Debido a los daños causados por los ataques, Ucrania se vio obligada a importar la cifra récord de 33.559 megavatios hora de electricidad el sábado. El gobierno también anunció la necesidad de ampliar los cortes de electricidad programados en todo el país para gestionar la demanda y la infraestructura afectada. (Agencia OPI Santa Cruz) Con información de NA