El día 18 de octubre se llevarán a cabo las elecciones en el gremio docente para revalidar a la Lista Lila que viene administrando el gremio desde hace varios años o la alternativa formada por una coalición de listas que disputarán ese liderazgo.
Básicamente, el problema que se presenta en estas elecciones es la diferencia en la cosmovisión que tienen ambos sectores respecto de la partidización política del sindicato, especialmente de parte de la coalición de listas donde confluyen la izquierda, el PRO y sectores afines al gobierno provincial y la Lista Lia que actualmente conduce el gremio y se ha mantenido equidistante de aquellos sectores con fuerte impronta partidaria.
Nicolás Pereyra, Secretario General de la filial Río Gallegos de la ADOSAC, e integrante de la Lista Lila, definió esta situación de una manera muy clara y práctica a este conglomerado de listas que responden a una línea política en particular como “La sumatoria de minorías, sostenidas en programas partidarios diferentes, con principios rectores múltiples y diversos, con métodos devenidos de la política gubernamental y no la sindical y unidos por la auto obligación de conducir un espacio que naturalmente no les es propio, para impulsarse a la carrera por los cargos de Gobierno; antes decíamos un matrimonio por conveniencia, hoy más que eso, son una poligamia partidaria”.
En este sentido, el dirigente de ADOSAC explicó cómo fue el proceso por el cual el gremio fue poblándose de listas que individualmente no han podido competir con la Lista Lila en términos cualitativos y cuantitativos, pero que indefectiblemente han tenido la intención (y la pretensión) de llegar a conducir al gremio, en términos distintos a lo que ha fundado históricamente la Lista que oficialmente conduce a la Asociación, desde hace varios años.
“La evolución en la conformación de los espacios políticos partidarios intra sindical, traduce claramente cómo a partir del 2005, cuando nace la Lista Lila para agrupar a los docentes bajo los principios de independencia de los partidos políticos y del poder político, el resto del ecosistema gremial se fue poblando paulatinamente de minorías de tintes sectarios y todas ellas representando a un partido político que intentan mimetizar sus objetivos a expensas de la lucha genuina de la docencia, lo cuales en estas elecciones se reúnen bajo una lista de oposición para competir con la Lila, que individualmente (y tampoco lo lograrán unidos) han podido desplazar todos estos años”, remarcó Pereyra.
De esta manera está planteada la disputa electoral de la ADOSAC el próximo 18 de octubre 2024. La Lista Lila, que va por un nuevo mandato con autoridades renovadas, tiene la base experiencial que puede mostrar en su largo historial de conducción en la cual el afiliado nunca ha sentido que fuera relegado por su pertenencia política “Todo espacio gremial y particularmente el nuestro, contiene miles de personas de distinta ideología y nuestro deber y compromiso es defender al compañero docente, independientemente de a qué sector político pertenezca o con el cual simpatice”, dijo Javier Fernández, el Secretario General de ADOSAC en la provincia “Cuando un sindicato se partidiza, el afiliado corre el riesgo de quedar apartado de la defensa de sus derechos, por la sencilla razón de que las conducciones politizadas, naturalmente tienden a discriminar a los propios afiliados por sus simpatías políticas, sus manifestaciones públicas o su falta de alineamiento con los valores políticos que ellos defienden y no se ven correspondidos. Y eso es absolutamente ilegal. Un gremio debe actuar apolíticamente y su único norte debe ser la defensa del salario y la estabilidad de, en nuestro caso, los docentes, sin preguntarle su afiliación política, sino, pensando que frente a nosotros, tenemos un compañero que está en un problema y necesita el respaldo institucional, que mal podríamos dar, si estuviéramos encolumnados tras un lineamiento político partidario determinado que puede ser antagonista al gobierno provincial u obsecuente irremediable.”, concluyó el dirigente quien resaltó que la independencia de la política ha hecho de la Lista Lila el factotum para que los docentes de la provincia hayan logrado hitos históricos en la Educación pública provincial y les ha permitido, a la hora de negociar en paritarias, discutir de igual a igual con éste o el anterior gobierno, sin generar concesiones, como sí ocurre con otros gremios provinciales, cruzados por la política partidaria, que no dudan en entregar a sus compañeros, por la dependencia que tienen con el poder político. (Agencia OPI Santa Cruz)
Y las armas Iris???? Ya renunciaste?
No tenes verguenza
Lo que hacen y dicen los politicos es el resultado de la educacion que brindan los docentes.
Sigan haciendo huelga y no se quejen