La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) ha convocado una nueva jornada de protesta para el próximo jueves, en rechazo a los términos de la última negociación salarial que, según el sindicato, no ha tenido en cuenta la gravedad del deterioro de los ingresos en la Administración Pública. Además, los representantes de ATE evaluarán la posibilidad de convocar un paro general antes de fin de mes si no se resuelven sus demandas.
La movilización se desplegará a nivel nacional, con protestas en todas las provincias, pero será en la Ciudad de Buenos Aires donde se llevará a cabo la protesta central. En la Capital, la manifestación comenzará a las 9 de la mañana frente a la Legislatura porteña, continuará a las 11 en el Ministerio de Hacienda de la Ciudad y culminará a las 13 frente al Ministerio de Economía de la Nación.
Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, fue tajante al calificar el acuerdo paritario alcanzado entre el Gobierno y los sindicatos como “escandaloso”. Según Aguiar, el acuerdo fue negociado en secreto, fuera de los canales institucionales y no tuvo en cuenta las necesidades de los trabajadores públicos, aplicando lo que describió como una “rebaja salarial sin precedentes”. El sindicalista criticó el impacto negativo de la medida sobre los salarios y destacó la falta de una verdadera recuperación de los ingresos, a pesar de los aumentos constantes en los costos de vida.
“Este acuerdo se celebró a escondidas, sin la participación de los trabajadores. No se puede hablar de un acuerdo digno cuando no hay una verdadera negociación que permita recuperar el poder adquisitivo de los trabajadores del sector público”, afirmó Aguiar.
El sindicato de trabajadores estatales también protestará por el incremento de los precios de bienes y servicios esenciales, que siguen erosionando el salario de los empleados públicos. El aumento de combustibles, las tarifas de los servicios y los alquileres se ha traducido en un gasto cada vez mayor que afecta a las familias de los trabajadores, haciendo que el aumento salarial no sea suficiente para cubrir el alza del costo de vida.
En cuanto a los términos del acuerdo que motivaron la movilización, el Gobierno de Javier Milei otorgó un aumento salarial de solo un 2% para el mes de noviembre, seguido de un 1% para diciembre y un bono único de $30.000. Sin embargo, para ATE, esta propuesta es considerada insuficiente ante el contexto económico actual, en el que las subas en los precios de los combustibles y otros servicios esenciales impactan de manera directa en los salarios.
“Este incremento es miserable, no se ajusta a la realidad que vivimos los trabajadores. El Gobierno puede hablar de la baja de la inflación, pero la estructura de gastos de las familias sigue aumentando sin parar, lo que agrava aún más la situación de los empleados públicos”, señaló Aguiar, quien también advirtió que la protesta de este jueves será solo el primer paso de un plan de lucha más amplio que podría culminar en una huelga general.
Durante la jornada de protesta, se llevarán a cabo diversas acciones en todo el país, que incluirán paros, asambleas, radios abiertas y cortes de rutas, en un intento por generar presión sobre el Gobierno y exigir una nueva paritaria que permita la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores del Estado.
El conflicto entre ATE y el Gobierno de Milei, en cuanto a la política salarial para el sector público, pone de manifiesto las tensiones laborales en un contexto de alta inflación y crecimiento de los costos de vida, lo que se ha convertido en un tema central en las negociaciones salariales y en las protestas que se multiplican en el ámbito público. (Agencia OPI Santa Cruz)