Cientos de venezolanos se concentraron hoy en la Plaza de Mayo, Buenos Aires, para exigir “libertad” en su país y un proceso de transición democrática entre el presidente Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia, quien se autoproclamó presidente electo tras las elecciones del 28 de julio, cuya legitimidad es fuertemente cuestionada debido a la falta de transparencia en la presentación de las actas de votación.
La manifestación en Argentina se enmarca en un creciente rechazo internacional al régimen de Maduro y en la denuncia del espacio opositor Comando Venezuela, que alertó sobre la “interceptación violenta” de la dirigente opositora María Corina Machado por parte de efectivos de Maduro, luego de su participación en protestas en Caracas. Según reportes, Machado fue detenida durante las protestas que se realizaron en la capital venezolana contra la asunción de Maduro.
“Nuestro país está de pie, exigiendo libertad y democracia“, señaló Guillermo Francos, jefe de Gabinete argentino, quien se sumó a los manifestantes en Plaza de Mayo para respaldar la lucha del pueblo venezolano. En su discurso, Francos aseguró que el presidente Javier Milei sigue de cerca la situación y está comprometido con la causa de la libertad y los derechos humanos en Venezuela. “La postura oficial del Gobierno es en favor de la libertad, la democracia y en contra de la dictadura madurista“, expresó el funcionario.
Además, Francos manifestó su esperanza de que sectores de las Fuerzas Armadas de Venezuela actúen en favor del pueblo y se produzca una respuesta contra la represión y la violencia del régimen. “Uno puede esperar cualquier cosa del régimen de Maduro, pero esperamos una reacción de las Fuerzas Armadas a favor del pueblo“, añadió.
La protesta en Buenos Aires no fue la única. Manifestaciones similares tuvieron lugar en varias ciudades alrededor del mundo, incluidas Madrid, Barcelona, Bogotá, Lima, Valencia y Málaga. Los manifestantes exigen el fin de la dictadura de Maduro y piden la liberación de María Corina Machado, quien sigue siendo un símbolo de la lucha opositora.
El contexto de estas movilizaciones no es menos tenso. En los días previos a la asunción de Maduro, la situación en Venezuela alcanzó niveles críticos. Edmundo González Urrutia, líder opositor y autoproclamado presidente, denunció la desaparición forzada de su yerno a manos de hombres encapuchados. Además, el régimen de Maduro informó sobre la detención de siete mercenarios extranjeros, a quienes acusó de planificar ataques terroristas en el país. (Agencia OPI Santa Cruz)