La reactivación parcial del Corredor Atlántico por parte de Líneas Aéreas del Estado (LADE) genera expectativas en la Patagonia, aunque deja afuera a Tierra del Fuego, que hasta septiembre de 2024 contaba con este servicio. La decisión impacta en la conectividad de la provincia, que sigue dependiendo de una estructura de transporte limitada y centralizada en Buenos Aires.
Desde el 8 de abril, el Corredor Atlántico volverá a operar con vuelos semanales entre Aeroparque y Comodoro Rivadavia, con escalas en Mar del Plata y Bahía Blanca. Sin embargo, a diferencia del esquema original, ya no incluirá paradas en Trelew, Santa Cruz ni Tierra del Fuego.
El servicio se realizará con aviones Embraer ERJ 140, con capacidad para 44 pasajeros, lo que representa un total de 352 plazas al mes, lejos de las 2.496 que ofrecía Aerolíneas Argentinas antes de la cancelación de la ruta.
Desde su creación en 2017, el Corredor Atlántico permitió a los pasajeros viajar dentro de la Patagonia sin necesidad de pasar por Buenos Aires, facilitando la conexión entre distintas localidades. Sin embargo, su cancelación en 2024, en el marco de la reestructuración financiera del gobierno, dejó a la región con menos opciones de vuelo.
Los nuevos vuelos de LADE despegarán desde Aeroparque los martes a las 8 de la mañana, con escalas en Mar del Plata a las 8.40 y en Bahía Blanca a las 10.05, llegando a Comodoro Rivadavia a las 12.10. En sentido inverso, saldrán los jueves desde Comodoro a las 12.50, con paradas en Bahía Blanca a las 14.15 y en Mar del Plata a las 15.40, para aterrizar en Buenos Aires a las 17. (Agencia OPI Santa Cruz)