El pliego del juez federal Ariel Lijo no será tratado mañana en el Senado, lo que frena momentáneamente las posibilidades del Gobierno de avanzar con su candidatura para ocupar una de las vacantes en la Corte Suprema de Justicia. Fuentes cercanas a la reunión de la labor parlamentaria de hoy confirmaron que, ante la falta de consenso, el magistrado no cuenta con el respaldo suficiente para que su nombramiento sea sometido a votación en el recinto.
El bloque kirchnerista, que posee 34 votos en el Senado, se muestra firme en su rechazo hacia Lijo, quien necesita el apoyo de dos tercios de los presentes para ser designado, lo que hace imposible su nominación sin el visto bueno de este sector. Además, otros senadores “dialoguistas“, que suelen ser clave en este tipo de negociaciones, también se muestran reticentes a darle su respaldo.
A raíz de esta situación, fuentes cercanas al oficialismo indicaron que el Gobierno ya maneja otros nombres como posibles reemplazos en caso de que Lijo no logre el apoyo necesario. Entre las alternativas que están siendo consideradas se encuentran los jueces Ricardo Rojas y Ricardo Ramírez Calvo.
En paralelo, el despacho del juez Manuel García Mansilla, otro de los candidatos propuestos por el Ejecutivo, aún no cuenta con las firmas requeridas para ser tratado en el Senado. Esta situación deja al Gobierno en una posición incómoda, ya que sigue sin poder concretar un candidato para el Tribunal Supremo.
Fuentes oficiales indicaron que, en caso de que Lijo sea rechazado, el Gobierno no descartaría avanzar con los nombramientos por decreto. “Estamos pensando en mandar por decreto a las dos personas más libertarias que haya“, reveló una fuente importante de la Casa Rosada, dejando claro que el oficialismo está dispuesto a tomar medidas drásticas si no consigue el respaldo legislativo necesario.
De esta manera, el futuro de la Corte Suprema de Justicia sigue siendo incierto, con el oficialismo buscando alternativas y el Senado jugando un rol clave en la definición del próximo miembro del Tribunal Supremo. (Agencia OPI Santa Cruz)