La Oficina de Prensa de la Santa Sede ha actualizado hoy el estado de salud del Papa Francisco, confirmando que no ha sufrido nuevas crisis de insuficiencia respiratoria. El informe médico vespertino detalla que el Santo Padre ha recibido oxigenoterapia de alto flujo durante el día, y que se reanudará la ventilación mecánica no invasiva durante la noche, como parte de su tratamiento para la neumonía bilateral que padece.
A sus 88 años, el Papa continúa con un pronóstico reservado, debido a la complejidad de su cuadro clínico. Según el informe difundido por Vatican News, el Pontífice ha incrementado tanto la fisioterapia respiratoria como la motora activa, y pasó el día en un sillón. Los médicos subrayan que la neumonía está siguiendo el curso habitual de una enfermedad de este tipo bajo tratamiento, destacando la ausencia de nuevas crisis respiratorias en los últimos días. Sin embargo, los médicos siguen siendo cautelosos y afirman que aún se necesita más tiempo para realizar una evaluación más profunda.
Durante el día, el Papa participó en la tradicional bendición de las Santas Cenizas, realizada por el celebrante, y recibió la Eucaristía en un rito de oración. A pesar de su situación, Bergoglio continuó con sus actividades cotidianas, y se dedicó a realizar algunas tareas laborales, como la llamada al párroco de la Sagrada Familia de Gaza, el P. Gabriel Romanelli. Alternó periodos de descanso con trabajo, demostrando que su estado de ánimo sigue siendo positivo.
El Papa Francisco permanece internado desde el 14 de febrero en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma, donde fue ingresado debido a una bronquitis y neumonía bilateral. En el informe médico emitido en la mañana de este miércoles, se precisó que Francisco descansó bien durante la noche y se despertó poco después de las 8:00, lo que refleja una mejora en su estado general.
A lo largo de los últimos días, el Vaticano ha confirmado que el cuadro clínico del Papa sigue siendo estable en términos de su corazón, riñones y valores sanguíneos, aunque la situación sigue siendo compleja debido a los efectos de la neumonía. Además, el Papa continúa sin presentar episodios de insuficiencia respiratoria o broncoespasmos, y sigue colaborando activamente con las terapias y tratamientos, permaneciendo siempre alerta. (Agencia OPI Santa Cruz)