(Por: Rubén Lasagno) – En afán de gastar fondos y construir popularidad para su próxima campaña política a la cual le viene dedicando plata del municipio (todos los riogalleguenses), tiempo y recursos municipales, el intendente de la capital Pablo Grasso inauguró, la semana que pasó, lo que denominó la “Mini Ciudad”, un espacio recreativo para los niños.
Con el apoyo indeclinable de la prensa bien regada con pauta municipal, Grasso exageró sus gestos con los chicos y los titulares de los diarios rescataban “la sensibilidad” del intendente, “la decena de parques y plazas que construyó para los chicos” y la infaltable frase “…a pesar de tremendo ajuste y falta de recursos…”, lo cual haría necesario que explicara de dónde saca los fondos, cosa que el jefe comunal no hace.
Pero más allá de cuestionar la poca o ninguna transparencia que tiene Grasso para manejar los bienes, recursos y fondos públicos, vicios que trae desde que presidía el IDUV y prosigue en el municipio, sigue siendo muy llamativa la forma con la cual aún trata de engañar a la opinión pública a pesar de las evidencias fácticas que existen en Río Gallegos, sobre su incompetencia en la gestión, toda vez que la capital provincial en los últimos cinco o seis años y ese desarrollo no fue acompañado en forma proporcional y adecuada, a las necesidades de infraestructura ni planificación urbana.
Por esta razón, creo que la definición de “mini ciudad” con la cual Grasso inauguró un espacio para los niños, es perfectamente aplicable a la capital provincial.
El relato y la realidad
Río Gallegos luce sucia, sus calles rotas, poceadas, el asfalto (donde hay) sin demarcar, agrietado con pozos-trampas en los cuales golpean los autos, los residuos no se recogen diariamente; a pesar de los anuncios y fondos públicos asignados; la vista aérea de las calles céntricas es una madeja intrincada de cables, donde (no se sabe por qué ni lo ha explicado) se abandonó la idea del soterramiento; no existen señalamientos claros, falta semaforización y la traza de la autovía es un verdadero desastre, obra que no se le puede achacar al actual intendente pero que ni siquiera mantiene en el tramo que corresponde al ejido urbano con calles y cordones sin pintar y sin la señalización adecuada.
Los monumentos, los carteles luminosos y “el embellecimiento”, como les gusta decir a los funcionarios municipales, precedidos del logo que el intendente le plagió a un ex intendente de Bariloche (RN) es la única “marca” junto con espacios recreativos para niños, que resalta y da colorido alrededor de la plaza principal, donde, recordemos, un niño resultó electrocutado por una deficiente instalación eléctrica realizada en la red de luz que alimenta a las torres metálicas de iluminación del paseo público.
Ni siquiera se nos ocurre mencionar, enumerar y mucho menos investigar en profundidad, qué pasaría en Río Gallegos si sufriera una lluvia por encima de los 50 o 60 milímetros en pocas horas, ya ni siquiera compararla con los 350 milímetros que recibió Bahía Blanca. El resultado sería catastrófico.
Con lluvias normales, la ciudad se inunda y los barrios periféricos quedan anegados. Todo el sistema cloacal (donde existe) rebalsa y por efecto de las mareas, el líquido sale por las bocas y los drenajes. Pero el intendente, más allá del maquillaje estético que trata de ponerle a la capital, no destina fondos ni esfuerzo para resolver estos verdaderos problemas de infraestructura que es inadecuada para una ciudad que ha crecido demográficamente de manera significativa en los últimos 10 o 15 años, sin acompañamiento de los recursos para contener y proveer servicios acordes.
Ningún plan urbano municipal a contribuido con el bienestar público de los nuevos barrios generados (muchos de ellos en campaña política) formando hoy “El Gran Río Gallegos”, extensiones de tierras que han sido (y siguen siendo) parceladas sin servicios ni planificación, con el consecuente perjuicio para los que se instalan, como para los habitantes más antiguos, ya que aumenta el tendido de redes de gas y agua, por ejemplo, pero no la capacidad de volumen y la presión que siguen siendo las mismas, por lo tanto, hay zonas de la ciudad que directamente pasan gran parte del año con muy poca agua en sus redes domiciliarias, o permanecen secas.
Lo mismo pasa con la luz, la cual en muchos casos y con la anuencia de las autoridades que miran para otro lado, los vecinos “se cuelgan” y usufructúan ilegalmente la energía que paga el resto de la población. En muchos casos, SPSE lo ha advertido, pero el problema nunca se resolvió.
Por todo esto y no por otra cosa, decimos que el intendente Pablo Grasso tiene subvertido el orden de prioridades en la ciudad y es en ese marco donde nacen las críticas a estas inversiones que promueve el municipio, relacionado con “el bienestar de los niños” que es muy loable, pero todos sabemos que Grasso lo usa para la foto emblemática de una campaña política en la que viene montado desde hace mucho tiempo.
Por otro lado, los aumentos indiscriminados de las patentes, tasas y contribuciones o como en los últimos tiempos el cobro ilegal del arreglo de las calles asfaltadas a los frentistas, son permanentemente justificadas desde Hacienda del municipio local, desde donde parecen llorar miseria a la hora de aumentar salarios o brindar servicios, pero de manera permanente vuelcan recursos en cuestiones de segundo o tercer orden, sin atender problemas reales y necesidades básicas de la ciudad.
Los equipos de campaña del intendente, seguramente opinan exactamente de manera inversa, relacionado con los temas que exponemos, pero no tener en cuenta estos aspectos sociales básicos les ha costado a otros jefes comunales no perpetuarse al frente del municipio y en muchos casos, desaparecer de la política como ha sido el caso de Aburto, Villafañe y Cantín, entre otros, todos pertenecientes al kirchnerismo. (Agencia OPI Santa Cruz)
Trabaje en el IDUV con Pablo es un charlatan y un chorro. Mandaba a abrir los expediente, sobraba los certificados y las obras bien gracias—- es un tipo angurriento por la guita el su hermana y toda la familia. Publiquen lo que tiene, la guita que hizo y van a ver si le erro en algo
Un desastre !!! cada vez mas parecido al Gobierno de Giubetich .. queda agregar aparte de 500 monotributistas y 400 empleados, una ciudad que parece KOSOVO, a parte de perros por todos lados sin control municipal. Tremendos aumentos de impuestos, mucha gente caída de Provincia y Nación en las nuevas e ineficaces estructura municipal. !!! Cada vez peor pero con mas pelo Grasso
Cada vez mas parecidos a la soberbia del rencoroso de Vidal y del insensible vendepatria de Milei . La COHERENICA DE LOS HAMBREADORES !!
¿¿¿Que méritos tiene este payaso de Intendente para estar donde esta???, solo gente ignorante podría votar semejante inútil..causas para meterlo en cana sobran, miedo no creo le tengan, pero negocios o intereses seguro. Este inservible con solo investigarle el patrimonio va en cana..OPI que les parece y hacen un buen informe de como vivía y como vive y ostenta nuestro suertudo intendente. o tienen miedo?? o tienen negocios??? espero que no .
“Evidencia Fáctica”, “incompetencia,” “infraestructura”, no le hables en difícil a este punga, mamarracho, avaro, envidioso, oportunista, sos perdedor, vividor. “Maquillaje Estético” me suena acá en Las Heras, los hermanitos “Carambola”, líquidos cloacales – lo tiran en forma natural a kmts, el “Pintor” les dio 30 millones, hicieron algo?? Donde está el dinero, el control del Concejo Delirante? Bueno así estamos amigos, desocupación, abandono, Choreo el la Cara de Todas/es/xs, uno senador nacional y el otro Juntando Grasa. Ni hablar sabe, pobre ciudad y provincia, ni si se volvería a refundar se salva con esta gente miserables…