Según el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), los precios de los alimentos aumentaron 3,5 veces del campo a la góndola durante el mes de junio. Esto significa que el consumidor pagó $3,5 por cada $1 que recibió el productor por sus productos.
El informe reveló que, en promedio, la participación del productor en el precio final de los alimentos fue del 25,2 por ciento. Los productores de huevo tuvieron la mayor participación, con un 50,5 por ciento, mientras que los productores de limón tuvieron la menor, con un 8,3 por ciento.
El IPOD frutihortícola, que incluye los precios de 19 frutas y hortalizas, se multiplicó por 5,1 veces en junio. Por otro lado, el IPOD ganadero, que incluye 5 productos y subproductos ganaderos, se incrementó en 3 veces lo que el consumidor pagó frente a lo que recibió el productor durante el mismo mes.
Los productos que presentaron mayor diferencia entre los precios de origen y destino fueron el limón (12,1 veces), el zapallito (8,1), la manzana roja (7,2), la naranja (7,1) y la zanahoria (6,8). El limón fue el alimento con mayor brecha entre el productor y el consumidor por tercer mes consecutivo.
En cuanto a los productos que tuvieron menor diferencia entre los precios de origen y destino se encuentran el huevo, el pollo, el pimiento, la papa y la calabaza. El huevo, con una brecha de 2 veces, tuvo la brecha más baja por tercer mes consecutivo. En el caso del pollo, cuya brecha fue de 2,9 veces, los precios disminuyeron debido a la suspensión de las exportaciones por casos de gripe aviar, lo que generó un exceso de oferta en el mercado interno.
El informe también destacó que el pimiento experimentó un aumento en origen del 37,4 por ciento debido a un aumento en la demanda y la calidad, mientras que en destino se observó una baja del 24 por ciento. En cuanto a la papa, los precios se incrementaron en ambos extremos de la cadena, con un aumento del 12,5 por ciento al productor y del 14 por ciento al consumidor.
La brecha entre los precios de origen y destino de los alimentos es un tema de preocupación para el sector agropecuario y para los consumidores, ya que afecta directamente al bolsillo de las familias y pone en evidencia las distorsiones en la cadena de producción y comercialización de alimentos. La CAME instó a seguir de cerca esta situación y buscar medidas que permitan reducir esta brecha y garantizar precios más justos para todos los actores involucrados en la cadena alimentaria. (Agencia OPI Santa Cruz/Con información de NA)
