Por unanimidad, el Tribunal N°1 de Morón denegó hoy el pedido de excarcelación solicitado por el padre Julio César Grassi, quien deberá continuar en prisión hasta mayo de 2028, cuando finalice su condena por dos hechos de abuso sexual infantil.
La jueza Mariana Maldonado, quien presidió el tribunal, anunció que los fundamentos de la resolución serán publicados el próximo 2 de septiembre.
Tras la audiencia, el abogado Juan Pablo Gallego, representante de las víctimas, afirmó: “Es importante que estas audiencias se puedan ver, porque hoy se demostró que Grassi se complicó solo”. Además, Gallego calificó al sacerdote como “un monstruo” que “redobló su agresividad” y aseguró que Grassi “dio una clase de pedofilia”.
Gallego también solicitó que la Iglesia Católica expulse a Grassi, destacando que las víctimas “tienen miedo” y reafirmando la necesidad de justicia en este caso.
Grassi, quien actualmente cumple una condena de quince años por los abusos cometidos en 1996, había solicitado la libertad condicional, argumentando que su conducta ha sido correcta desde que fue acusado hace 22 años. Además, insistió en su inocencia y expresó su deseo de ser “útil a la sociedad” si la Iglesia le permite continuar su ministerio.
Durante la audiencia, Grassi participó de manera remota desde el pabellón N°6 de la Unidad N°41 de Campana, donde está alojado y permanecerá hasta completar su sentencia en 2028.
El abogado Gallego también señaló que Grassi rechazó someterse a una pericia psicológica, lo que impidió obtener un informe actualizado sobre su estado mental. “El informe carcelario no le da bien”, añadió Gallego, subrayando que el sacerdote no está apto para recibir el beneficio de la libertad condicional. (Agencia OPI Santa Cruz)
MUY BIEN!!!
Así evitan que el no menos degenerado del papa, que no lo echo de una patada en el o.g.t. de la cura, lo designe a cargo de algún asilo de menores