11/05 – 18:45 – Los Equipos de Pastoral Social-Patagonia-Comahue rechazaron ayer, mediante un claro y preciso documento, la intención de la Cámara de Diputados de bajar la edad de imputabilidad de los menores.
(OPI Chubut) – La Pastoral asegura, bajo el título “Ningún pibe nace chorro”, que nuevamente se ha vuelvo a instalar, con fuerza, la idea de que “uno de los factores determinantes de inseguridad son los delitos cometidos por jóvenes y adolescentes en particular”.
En las declaraciones con las que se sostuvo el documento, los integrantes de la Pastoral cuestionaron al poder político de promover “medidas demagógicas, que no solucionan nada”, en lugar de “respetar las actuales leyes, que establecen una serie de herramientas e institutos para atender la problemática y proteger a los menores”.
“Señalamos con profunda preocupación la vigencia de esta idea porque además de falsa es peligrosa ya que acentúa la descarga punitiva sobre los adolescentes, desconociendo que poseen historias atravesadas por la vulneración de derechos, producto de la desidia del estado y de la indiferencia de una sociedad que ahora los culpabiliza, dirigiendo la discusión hacia el castigo y no hacia la adecuada preparación para la vida en libertad”, se indica desde el pronunciamiento.
Seguidamente se recuerda las cuestiones que se plantean desde los Derechos Humanos a nivel internacional y se afirma que “lo regresivo no contribuye en absoluto a favorecer a la mejor protección de nuestros niños, niñas y adolescentes”.
Los equipos técnicos de la Pastoral también cuestionaron el papel de los medios que “acentúan este discurso social, instalando esta percepción de miedo y amenaza constante, ocultando a su vez la situación de desprotección con sus marcas de marginalidad que sufren millones de niños y adolescentes en nuestro país en un contexto de violencia estructural que no es denunciada”.
De inmediato, el documento menciona la responsabilidad que tiene la sociedad “ que avaló durante años la ejecución de políticas que incidieron en el proceso de desintegración social, marginación,pobreza, destrucción de la escuela pública y de los sistemas de salud, empobrecimiento de políticas integrales, pauperización, y desempleo de los padres de estos adolescentes afectando a las familias quienes debieran ser sostén, valor y cuna de aprendizajes. Esa sociedad, a la que pertenecemos, ahora pide medidas de seguridad a costa de estas consecuencias”, sentencian.
Finalmente, en el documento se denuncia que los delitos cometidos por menores son impulsados por adultos y se recuerda que “ningún pibe nace chorro”, y que “de los niños es el otro mundo posible”…
La Pastoral Social-Patagonia-Comahue, está integrada por las diócesis de Bariloche, Viedma, Río Gallegos, Comodoro Rivadavia, y la Prelatura de Esquel.(Agencia OPI Chubut).
