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Jorge Cerrotta ex Director del Banco TDF, vinculado al lavado de dinero, fue Director de SGI


07/05 – 16:20 – El ex Director del Banco Tierra del Fuego se encuentra involucrado en las operaciones de lavado de dinero krichnerista, que involucra directamente al empresario Lázaro Báez. El ex funcionario fueguino está comprometido y mencionado como quien “apretó” a Elaskar y luego se constituyó en Director de la financiera SGI en la denominada “La Rosadita”.

Una completa y extensa investigación realizada por el medio de Ushuaia “El Diario del Fin del Mundo” redondea un tema por demás escandaloso que demuestra los inocultables tentáculos de la corrupción, implicaciones con el lavado de dinero, el tráfico de influencias y la asociación ilícita entre gestores políticos de diversas provincias con el gobierno nacional.

En este caso, refiere el medio fueguino, se trata del ex Director del Banco Tierra del Fuego, Jorge Cerrota que se encuentra intimamente vinculado al “Lazarogate” y EFDM lo cuenta de una manera impecable, recurriendo, incluso a sus archivos.

Jorge Cerrotta presidió el Banco de Tierra del Fuego durante la gestion Coccaro y según se denunció en el programa de Lanata, es quien obligó al financista Federico Elaskar a desprenderse de SGI, la “cueva” por donde se presume que circularon los millones del empresario santacruceño Lázaro Báez.

El contador Jorge Norberto Cerrotta, DNI 10.354.045, se convirtió por estas horas en uno de los nexos entre el escándalo sobre presunto lavado de dinero que involucra al empresario kirchnerista Lázaro Báez, y la provincia Tierra del Fuego, por donde tuvo un paso plagado de actividades que este diario reconstruyó en base a archivos y documentos oficiales.

Cerrotta es uno de los contadores que de acuerdo al primer testimonio brindado por el financista Federico Elaskar, lo “apretó” para que vendiera la empresa S.G.I SA, la “cueva” por donde según la investigación periodística del programa televisivo Periodismo para Todos, de Jorge Lanata, pasaron los millones de Lázaro Báez hacia paraísos fiscales y cuentas bancarias en Suiza.

Cuando PPT dio a conocer el caso, el apellido “Cerrotta” retumbó en los oídos de varios dirigentes y periodistas que se acordaban de su paso por el banco fueguino, en el último tramo de la gestión de Cóccaro. Pero hicieron falta varias semanas para que pudiera corroborarse que se trataba de la misma persona.

El programa de Lanata se refirió a Cerrotta y corroboró su paso por el BTF. El escándalo no es menor: un contador acusado de ser partícipe de lavado dirigió un banco provincial y, además, no es lo único que hizo. Además, en el programa se mencionó que, tras su paso por Tierra del Fuego, Cerrotta fue jefe de contadores en la empresa Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA), que depende del Ministerio de Planificación Federal de la Nación que encabeza Julio de Vido.

La firma de los 16 palos

Cuando Elaskar denunció que Cerrotta fue uno de los que “lo apretó” para vender S.G.I. Era sólo su testimonio. Sin embargo, una comunicación oficial publicada en el Boletín Oficial de la Nación el 13 de octubre de 2011, demuestra que el ex presidente del BTF pasó a ser director de la financiera justo en el período en que Elaskar sitúa el supuesto apriete.

Allí se menciona que “mediante Asamblea General Ordinaria Nº 11 de fecha 18 de Julio de 2011, se han designado las siguientes autoridades: Directores Titulares: Presidente: Cesar Gustavo, Fernández, Vicepresidente: Alejandro Ons Costa, Director Titular: Jorge Norberto Cerrotta y Eduardo Guillermo Castro, Directores Suplentes: Juan Ignacio Pisano Costa. Los Directores titulares aceptaron sus cargos y constituyeron domicilio especial en la calle Juana Manso Nº 555, 7º piso, Oficina. “C”, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”. También “se deja constancia que ha cesado en su cargo el Señor Federico Elaskar”.

Pero antes de dirigir “la cueva”, Cerrotta tuvo un agitado paso por la provincia, que incluyó tres cargos de relevancia en el BTF. Primero fue gerente general, hasta el 15 de febrero de 2007 (último año de Cóccaro en el poder) en que fue designado director por decreto 581/07. Después, a mediados de ese año se produjo la siguiente circunstancia: Cóccaro perdió las elecciones y no tenía recursos para pagar los sueldos de la administración pública. Entonces gestionó un crédito de $16 millones ante el banco provincial. Su presidente, Vicente Fernández, se negó a concederlo, con el argumento de que la operación ponía en riesgo las cifras de encaje de la entidad ante el Banco Central.

Fue allí donde Cerrotta entró en escena. Fernández renunció y Cóccaro lo nombró en su reemplazo el 10 de julio, mediante decreto 1921/07. Su primera acción fue poner la firma para autorizar el crédito.

“El Sr. Fernández tomó una decisión de esas que son exclusivamente personales; él había firmado el convenio respectivo para apoyar al Gobierno con 16 millones de pesos, y después se requerían una serie de autorizaciones que no estaban totalmente listas, y si bien firmó el convenio luego no quiso hacer el desembolso y decidió renunciar”, señaló Cerrotta sobre las razones de la dimisión de su antecesor.

“Fernández firmó el instrumento de crédito el 5 de julio pasado y después, por alguna causa, no quiso hacer el desembolso y ese desembolso lo hicimos nosotros. Gracias a esto, se pudo completar el pago de sueldos”, explicitó aún más el contador.

Síndico de RENASA

Cerrotta también tuvo un extraño y efímero paso por la malograda RENASA, la empresa que se proponía como la variante local de la nacional ENARSA y que básicamente se proponía concentrar el manejo de los recursos naturales de la provincia, con hincapié en los hidrocarburos.

La compañía fue creada mediante la ley 730 que se sancionó el 22 de diciembre de 2006. El 23 de mayo de 2007, a través del decreto 1470 firmado por Cóccaro, fueron nombrados los directores y síndicos de la empresa. Como síndico suplente, mientras en forma simultánea era director del BTF, apareció Cerrotta.

Ese cargo no le duró demasiado. El 12 de julio (cuando ya era presidente del BTF) la Legislatura rechazó la designación de los síndicos de RENASA porque no habían sido propuestos por el Tribunal de Cuentas, y tras cartón derogó la norma de creación de la compañía pensada para juntar capitales estatales y privados.

Como resultado, por decreto 1943/07 se dejaron sin efecto las designaciones de los síndicos, mientras Cóccaro aún analizaba si vetaba la ley de derogación de la empresa.

El negocio de CA 12

Por otra parte, ahora que se conoce el vínculo entre Cerrotta, SGI y Lázaro Báez, toma otra dimensión lo ocurrido durante los últimos días de la gestión de Cóccaro, con el intento de adjudicar el área hidrocarburífera CA12.

El ex gobernador ya había perdido las elecciones frente a Fabiana Ríos cuando, en julio de 2007, dictó un decreto declarando “de interés público y provincial” el proyecto de Iniciativa Privada para la exploración y eventual explotación de hidrocarburos en el área CA–12, presentado por EPSUR S.A.

La compañía ya había ganado 7 de las 15 áreas licitadas por Santa Cruz a fines de 2006 y se sabía que estaba vinculada a Lázaro Báez.

Así, mientras Cerrotta estaba a punto de catapultarse a la presidencia del BTF, Cóccaro daba un paso inesperado basándose en las facultades conferidas a las provincias por la Ley Federal de Hidrocarburos y generando derechos a favor de EPSUR.

Según el decreto 1876/07, dictado el lunes 2 de julio, se consideraba “económico y técnicamente viable” el proyecto de la petrolera, y aunque se contemplaba un llamado a licitación pública, la compañía tenía prioridad.

En los días siguientes, la fórmula electa integrada por Ríos y Carlos Bassanetti protestó por esta medida y le solicitó a la Legislatura que no convalidara el decreto.

No obstante, el 10 de noviembre Cóccaro llamó al concurso público para adjudicar CA12, cuando faltaban 35 días para el cambio de gobierno. Pero el 21 de noviembre, antes las presiones políticas, resolvió dejar sin efecto el llamado y EPSUR retiró el proyecto.

Público y privado

Lo denunciaron, él denunció, hizo negocios mientras era funcionario bancario. El paso de Cerrotta por Tierra del Fuego es de todo menos aburrido.

En 2008, ante la presentación realizada por el ex director del BTF Rubén Bahntje, el Fiscal de Estado, Virgilio Martínez de Sucre, resolvió denunciar penalmente al ex titular de la entidad crediticia.

El motivo fue una presunta incompatibilidad de funciones, al verificarse que mientras presidía el banco, era a su vez síndico del Banco Privado de Inversiones S.A.

Martínez de Sucre emitió entonces el dictamen 15/08 donde acusó a Cerrotta de violar la prohibición establecida en la ley de creación del BTF, respecto a las exigencias para formar parte del directorio.

Según la Fiscalía de Estado, el inciso c) del artículo 23 de la Ley Territorial N° 234, establece que “no podrán ser miembros del directorio los administradores, presidentes, directores, gerentes, y todas aquellas personas que tengan o desempeñen funciones rentadas en otros bancos”.

Cerrotta fue director y luego presidente del banco entre el 15 de febrero y el 16 de diciembre de 2007, mientras que de acuerdo a la investigación de la Fiscalía fue síndico del banco privado en ese mismo período y continuó siéndolo al menos hasta 2009.

Como defensa, el otrora funcionario fueguino, vinculado a Lázaro Báez, dijo que había renunciado a sus honorarios como síndico, pero Martínez de Sucre entendió que ello “no lo excluye de su responsabilidad penal”.

La denuncia radicada ante el Juzgado de Instrucción de turno está caratulada «s/presunta incompatibilidad de ex director y ex presidente del Banco Tierra del Fuego».

Agente de bolsa

Mientras era funcionario del banco fueguino y a su vez síndico de un banco privado, Cerrotta también seguía haciendo negocios. Según se desprende de un documento publicado en el Boletín Oficial de la provincia de Santa Fe, el 16 de mayo de 2007, el contador constituyó la empresa Trust Brokers Sociedad de Bolsa SA, y el 23 de junio de ese año (cuando ya presidía el BTF) modificó el estatuto de la compañía.

Según el contrato societario, Trust Brokers está integrada por Norberto Andrés Cerrotta, de 84 años, jubilado bancario (por la edad podría ser el padre del contador) Evelina Diana Faerbarg (la esposa) y por él mismo, que además fija domicilio personal en Olegario Andrade 427 primer piso de Ushuaia.

A su vez, la empresa estableció domicilio legal en avenida Freyre Nº 2088 Dpto. 1 de Santa Fe, y en su objeto social figura “dedicarse por cuenta propia o de terceros, o asociada a terceros, a (…) agentes de bolsa (…) realizando cualquier clase de operaciones sobre títulos públicos o privados”, entre otras actividades relacionadas.

Vamos contra el tope

De todas maneras, los negocios externos a la provincia y la sindicatura en un banco privado no le impidieron a Cerrotta defender sus intereses como trabajador del Banco de Tierra del Fuego, ya que a poco de que la actual gestión gubernamental estableció la aplicación del tope salarial constitucional, fue uno de los primeros que demandó a la provincia exigiendo que no le aplicaran la medida.

La gestión Ríos consideró que el artículo 73 inciso 4 de la Constitución, según el cual los agentes públicos de cualquiera de los tres poderes no pueden tener remuneraciones superiores al gobernador, era aplicable también a los empleados del BTF. De ahí que decidiera “topear” los salarios superiores dentro de la entidad.

Sin embargo, al igual que sucedió en otros ámbitos del Estado, en el banco buscaron argumentos para no estar atados a la manda constitucional. En el caso de Cerrotta presentó una demanda ante el Juzgado Laboral de Ushuaia, a cargo del juez Guillermo Penza, con el fundamento de que los empleados del BTF no son agentes públicos, sino privados, y por lo tanto están ajenos a la limitación de la Carta Magna.

La demanda dio lugar al expediente Nº 4932/2009, caratulado “Cerrotta, Jorge Norberto c/ Banco Provincia de Tierra del Fuego s/ diferencias salariales”.

En diciembre de 2010, el juez Penza dictó una sentencia haciendo lugar a la demanda y condenando al BTF a pagarle las diferencias de sueldo devenidas de la aplicación del tope más los intereses.

Conductor alcoholizado

Y como si algo le hubiera faltado al multifacético funcionario bancario, director y presidente del BTF, síndico de un banco privado y de RENASA, además de accionista de una empresa de bolsa, para mantenerse ocupado en aquel año 2007, aparece lo que le sucedió el 22 de abril a las 5.10 de la madrugada en la avenida Maipú, cuando conducía el vehículo patente TTF–104 y fue detenido por la Policía.

Aquella vez lo sometieron a un test de alcoholemia que resultó positivo, por lo que el rodado fue secuestrado por las autoridades y quedó ligado a un proceso contravencional.

El 8 de junio de 2007, cuando le faltaba un mes para presidir el BTF, la jueza Faltas de Ushuaia Adriana Pérez Torres dictó sentencia en la causa T–107262–00/07 y resolvió inhabilitar a Cerrotta para conducir vehículos por el término de seis meses, por lo que su carnet fue retenido por las autoridades.

En el fallo se menciona que Cerrotta tenía en sangre cuatro veces más alcohol que el permitido para manejar, y que en su descargo dijo que había venido de un asado y que aceptaba haber consumido bebidas alcohólicas. (El Diario del Fin del Mundo/OPI Santa Cruz)

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2 COMENTARIOS

  1. Enarsa: aprovechan el caso Baéz para echar a un hombre de De Vido POR MARÍA EUGENIA DUFFARD Es porque un contador que trabajaba en la firma era, a su vez, director de la financiera SIG usada para lavar dinero. Se trata de Ezequiel Espinoza. Su salida de la petrolera estatal la pidió Axel Kicillof a la presidenta Kirchner.

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