16/10 – 10:00 – Conti sugirió a León Arslanian para el cargo; apoyo de parte de la UCR y rechazo del macrismo.
Por: Jaime Rosemberg
Dispuesto a sostener en condiciones favorables su pulseada con el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, el kirchnerismo afirmó ayer, a través de dos de sus principales voceros, que “tiene los votos” para nombrar al reemplazante de Eugenio Zaffaroni-que confirmó su retiro para enero próximo- en el máximo tribunal del país.
La diputada Diana Conti y el senador Aníbal Fernández fueron los encargados de continuar ayer la línea iniciada por el secretario de Justicia, Julián Álvarez, quien horas después de la muerte de otro miembro del tribunal, Enrique Petracchi, insinuó que la Casa Rosada podría intentar alcanzar el número de siete miembros para la Corte Suprema antes de que Cristina Kirchner finalice su mandato.
“Podemos aprobar por nosotros mismos porque tenemos el número, no necesitamos a los opositores”, desafió Aníbal Fernández. Conti fue un paso más allá y propuso al ex juez de la Cámara Federal León Arslanian como eventual reemplazante de Zaffaroni, un juez de marcada afinidad con el kirchnerismo.
“Me gusta la figura de Arslanian, no sólo por su trayectoria, compromiso patriótico y formación intelectual, sino porque es un hombre de consenso, que no generaría que la oposición no consigne su candidatura”, declaró Conti.
Horas después, desde el radicalismo llegó un respaldo algo impensado. “Es un excelente candidato”, dijo el ex ministro y diputado de la UCR Ricardo Gil Lavedra. De todos modos, el ex compañero de Arslanian en el tribunal que juzgó a las juntas militares aclaró que “no es lo ideal” que el proceso se realice en un año electoral, como el próximo.
El apoyo de Gil Lavedra contrastó con la posición del titular del Comité Nacional, Ernesto Sanz, quien anteayer sostuvo: “La Corte puede seguir funcionando hasta con tres miembros, puede funcionar normalmente”. La del senador mendocino fue una posición afín a la que había fijado antes Lorenzetti, para quien la Corte “va a seguir funcionando normalmente” con la composición actual (de cinco miembros) y luego del alejamiento de Zaffaroni.
Atentos a las declaraciones de kirchneristas y radicales, Mauricio Macri instruyó a sus espadas legislativas a dejar por escrito una posición contrapuesta a la de los referentes kirchneristas. “La Corte Suprema puede actuar sin problemas si Zaffaroni renuncia, por lo cual no deben acelerarse los tiempos institucionales ni quedar atada a situaciones de coyuntura político-electoral”, afirmó Unión Pro a través de un comunicado firmado por la senadora Gabriela Michetti y los diputados Federico Pinedo, Patricia Bullrich, Laura Alonso y Pablo Tonelli.
Contra la UCR
En otro tramo del texto, el macrismo apuntó a la UCR. “Esperemos que el radicalismo honre su mejor tradición de defender una justicia de la ley y no una justicia del poder, y no apruebe propuestas con el Gobierno para buscar impunidad a cambio de que le nombren un juez de su partido”, afirmaron.
En diálogo con LA NACION, Alonso fue más allá. “Sería desagradable que la UCR en el Senado traicionara a sus votantes y a quienes quieren un cambio real en la Argentina. No hay gravedad institucional que amerite acelerar los tiempos”, afirmó la legisladora.
En el macrismo deslizaron que “habría un acuerdo” entre el Gobierno y la UCR para designar a Gil Lavedra en caso de otra vacante en la Corte Suprema. Desligaron de ese supuesto acuerdo a Sanz, que “no representa a toda la UCR”.
En el mismo sentido se expresó el massismo a través de Adrián Pérez, diputado nacional del Frente Renovador por la provincia de Buenos Aires. “La Corte necesita estabilidad, no cambios apresurados y caprichosos”, dijo el diputado, que responde a Sergio Massa. “Hoy no están dadas las condiciones políticas e institucionales para dar una discusión seria y responsable sobre cambios en el número de magistrados del máximo tribunal”, agregó Pérez, quien también acusó al Gobierno de intentar “cooptar” la Justicia. (La Nación)
