Avanza un acuerdo para mejorar la productividad petrolera en Chubut

21/04 – 10:00 – Ayer hubo una reunión clave donde el Gobierno, la provincia, los gremios y las empresas fijaron nuevas pautas de la actividad, similares a las de Vaca Muerta; serán decisivas para sostener la operación en el yacimiento Cerro Dragón

Por: Pablo Fernández Blanco
Después del acuerdo por Vaca Muerta, el Gobierno avanza en la firma de una adenda al convenio colectivo de trabajo que rige para los trabajadores petroleros de Chubut, el principal distrito productor de crudo de la Argentina.

Ayer hubo una reunión clave en el Ministerio de Energía, donde se dieron pasos en concreto por primera vez en mucho tiempo. A tal punto que la agenda contempla que la próxima semana se vuelvan a ver las caras en Buenos Aires representantes de la administración de Mauricio Macri , de la gobernación de Mario Das Neves , los sindicatos y las principales empresas con operación en la provincia para firmar un acta acuerdo consensuada.

Sobre esa base se rubricará otro acuerdo a principios de mayo (se estima que será entre el 2 y el 5 del mes próximo) que permita agregar una adenda al convenio colectivo de trabajo de los petroleros, que hasta ahora se resistieron a firmarlo. Así lo confirmó a LA NACION el secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut, Jorge Ávila, y fuentes privadas.

El Gobierno descuenta que tras la firma de esa provincia patagónica será más fácil cerrar un convenio similar con Santa Cruz.

El nuevo marco laboral mejorará el costo del empleo en todos los campos de la provincia, incluido Cerro Dragón, el mayor yacimiento petrolero del país, a cargo de Pan American Energy (PAE).

La agenda es un reclamo extendido en el sector empresario. Contempla la aplicación de diversos cambios para los trabajadores que, según la mirada del sector privado, aumentarán su productividad.

El punto central de la discusión pasa por las denominadas “horas taxi”, que se pagan por prestar funciones, pero sin ejercer ninguna actividad. Aunque aún está en discusión la letra chica, el reclamo de las empresas es que se remuneren sólo las horas dedicadas al trabajo concreto, por lo que afectaría la remuneración de los empleados.

Del encuentro participaron el ministro de Energía, Juan José Aranguren , funcionarios de las carteras de Interior y Trabajo, la provincia, la intendencia de Comodoro Rivadavia y los referentes de las mayores empresas del país: Miguel Gutiérrez (presidente de YPF), Marcos Bulgheroni (director ejecutivo de PAE), Carlos Ormachea (CEO de Tecpetrol) y representantes de EnapSipetrol. Aunque con particularidades, el convenio con Chubut emula el que se firmó en Neuquén para promover el desarrollo de la formación de recursos no convencionales Vaca Muerta, una iniciativa que le encargó especialmente a su equipo el presidente Mauricio Macri.

En un rapto de sinceridad absoluta, Ávila reconoció ante la consulta de LA NACION: “No estamos de acuerdo con la adenda, pero necesitamos darle garantía a la gente de que podamos volver a trabajar. No estamos en condiciones de exigir. Pero vamos a firmar esto de la mano de la promesa de sostenimiento de la actividad”, explicó. “Estamos dispuestos a aceptar la adenda siempre que nos den garantías”, completó.

La situación en Comodoro Rivadavia es compleja. A la crisis de la actividad petrolera (por la caída del precio internacional del crudo) que ocasionó la salida de 1440 trabajadores en el año, entre despidos y retiros voluntarios, sobre un total de 22.000, se sumaron los perjuicios que ocasionaron las inundaciones.

El sostenimiento de las inversiones es la moneda de cambio que les dará el sector privado a los trabajadores. Según la versión de Ávila, la petrolera bajo control estatal YPF y Pan American Energy, la mayor empresa privada de petróleo del país, bajo el mando de la británica BP, la china Cnooc y la familia Bulgheroni, se comprometieron a sostener la actividad por los próximos 12 meses.

En tanto, Tecpetrol, la petrolera del grupo Techint, se comprometió a subir un equipo de perforación (así se denomina en el lenguaje del oro negro a la vuelta al trabajo de una máquina, que emplea a decenas de personas) y EnapSipetrol, la empresa del Estado chileno, a intentar subir otra máquina para explorar su yacimiento y anticipar parcialmente sus planes de inversión para el año próximo.

El Estado también pondrá su parte a través de los denominados Repro, un subsidio al salario de los trabajadores en crisis (son hasta $ 22.000 por mes por seis meses para hasta 1800 trabajadores).

Según Ávila, la firma de su gremio es fundamental no sólo para el futuro de Chubut, sino también el de Neuquén. “Hace seis meses que se firmó el convenio por Vaca Muerta, pero aún no se puede aplicar. Nos necesitan a nosotros para ver si se acomodan ellos”, sostuvo. (La Nación)