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La Argentina se sumó a los países que no reconocerán el resultado

Mauricio Macri: "La transición es difícil y dura, y me duele"
31/07 – 09:30 – El Gobierno calificó como “ilegal” la Constituyente de Maduro; EE.UU., que evalúa sanciones, habló de una “farsa” y dijo que es un paso más hacia la “dictadura”

Por: Jaime Rosemberg
El gobierno de Mauricio Macri se sumó ayer, con inusual dureza, a la lista de países que no reconocerán el resultado de la Asamblea Constituyente convocada por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, que ayer fue votada en un clima de gran convulsión social.

Además de la Argentina, la lista de países que no reconoce las elecciones incluye a Estados Unidos, España, Brasil, Colombia, Panamá, Perú y México. El Parlamento Europeo también deconoció la Constituyente.

Luego de distintas consultas, dentro y fuera de la Casa Rosada, la Cancillería emitió un comunicado en el que lamenta la convocatoria de Maduro y deja en claro que “no reconocerá los resultados de esta elección ilegal”. Se sumó así a otros países de la región, como Colombia, Panamá, Perú y México, que criticaron también a Maduro por este llamado a las urnas para consolidar más su poder en medio de un estallido de protestas.

“La elección de hoy no respeta la voluntad de más de siete millones de ciudadanos venezolanos que se pronunciaron en contra de su realización”, afirmaron ayer desde la Cancillería a través de un comunicado. El documento hace alusión al plebiscito que realizó la oposición venezolana, que fue calificado como ilegal por las autoridades electorales de ese país.

También hay en el texto, consultado con “otros miembros del Mercosur”, una clara mención a la represión desatada desde el gobierno chavista, que se ha cobrado la vida de más de un centenar de personas en los últimas meses.

“El gobierno argentino hace un llamamiento para que el gobierno venezolano cese la represión de quienes se manifiestan para hacer oír sus voces y para asegurar el respeto de la voluntad popular mayoritariamente contraria a esta elección que sólo procura asegurar la continuidad del actual régimen, violencia que ya ha causado más de cien muertes”, dijo el comunicado, redactado por el canciller Jorge Faurie y sus colaboradores más cercanos.

En paralelo a este comunicado, distintos diputados nacionales del frente Cambiemos (Waldo Wolff, Karina Banfi, Alicia Besada, entre otros) acompañaron a disidentes venezolanos que ayer organizaron un acto contra Maduro en la Facultad de Derecho. “Apoyamos la vigencia del sistema democrático y la libertad como modelo de vida en Venezuela y en cualquier país al que le toque atravesar lo que hoy sufre el pueblo venezolano”, dijo Wolff a LA NACION. La postura del gobierno de Macri, contraria desde el comienzo de su gestión a la represión y encarcelamiento a opositores venezolanos, se endureció desde la salida de Susana Malcorra y el ingreso de Faurie a la Cancillería . Con la asunción de Michel Temer en Brasil, Maduro se quedó sin uno de los países que resistían las declaraciones conjuntas contra Caracas.

Hoy, la sintonía entre la Argentina y Brasil en relación con la necesidad de cambios profundos en Venezuela, cuya incorporación al Mercosur está suspendida, es total.

Ayer, el gobierno brasileño denunció una “ruptura del orden constitucional” en Venezuela. “El gobierno brasileño manifiesta su grave preocupación por la escalada de violencia (…) y repudia la violenta represión de las fuerzas del Estado y de grupos paramilitares como la que se produjo en el día de hoy”, dijo ayer en un comunicado.

Antes, el canciller Aloysio Nunes había afirmado ayer en una columna en el diario Folha de S. Pablo que “llegó a su fin el tiempo de tolerar el arbitrio en Venezuela”. Para Nunes, “es lamentable que el gobierno de Maduro siga ciego y sordo a las peticiones internacionales para un verdadero diálogo, que permita la redemocratización, con espacio para todos, incluso los chavistas”.

La Argentina y Brasil coinciden con otros países del continente en el respaldo a la postura de la oposición venezolana, que agrupada en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se negó a participar de la consulta. A través de su embajadora ante la ONU, Estados Unidos calificó de “farsa” la elección de ayer y dijo que Venezuela dio un paso más hacia la “dictadura”. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sancionó la semana pasada a 13 altos funcionarios chavistas, a los que les prohibió, entre otras cosas, la entrada al país. Además, había prometido una respuesta “firme y rápida” si se concretaba la Constituyente.

Se espera ahora que Estados Unidos sancione la industria petrolera, principal recurso del país, aunque según trascendió ayer no llegaría a imponer un embargo, tal como señalaron algunos medios.

“Esta Asamblea Constituyente tiene un origen ilegítimo y por ello no reconoceremos los resultados”, sostuvo el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, de los primeros en sumarse a la crítica frontal de la oposición a Maduro.

“Esta elección viola normas de la Constitución venezolana y contraviene la voluntad soberana del pueblo, representado en la Asamblea Nacional”, coincidió la cancillería peruana en un comunicado.

El gobierno de Panamá dijo que ” en respaldo a los esfuerzos que realiza la comunidad internacional por defender el orden democrático y la paz social en Venezuela”, decidió respaldar “las medidas tomadas por el gobierno de los Estados Unidos de América”. (La Nación)

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